(Minghui.org) Era un día soleado en Shijiazhuang durante el Festival de la Linterna, los días 11 y 12 de febrero de 2017. Muchos practicantes de Falun Gong se ayudaron unos a otros para colgar carteles y banderas en las principales calles, árboles y vallas de la ciudad.
Los carteles y banderas recordaban a las personas que Falun Gong es bueno, que el partido comunista chino (PCCh) es malo, y que el PCCh persigue a la práctica injustamente. Muchos transeúntes se detuvieron a leerlos.
Falun Gong, fue hecho público en 1992, se volvió muy popular debido a que muchísimas personas fueron beneficiadas. Temiendo a su amplia popularidad, Jiang Zemin, exlíder del PCCh, lanzó la persecución contra la disciplina el 20 de julio de 1999. Como resultado muchos practicantes fueron asesinados en el transcurso de casi 18 años.
Frente a esta persecución que aún continúa, los practicantes se valen de muchas formas creativas para informar al público sobre los beneficios de Falun Gong y para exponer la brutal persecución de la cual son víctimas.
Transeúntes leyendo sobre la persecución a Falun Gong por el PCCh.
Dijimos: “Falun Gong es bueno” a todos los que pasaban a nuestro lado mientras colgábamos los carteles y banderas. Muchos sonreían y leían: “Falun Dafa es bueno. Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno”.
Una bandera colgada de la rama de un árbol quedó torcida. Queríamos quitarla e intentar colgarla de nuevo, pero no podíamos alcanzarla. Entonces vimos a una persona alta de unos treinta años que pasaba y le pedimos ayuda. Preguntó con cautela: “¿No se desgarrará?”.
Le respondimos: “No, no se preocupe”. El hombre la tiró hacia abajo y le dimos las gracias. No hizo ningún comentario después de leer “Falun Dafa es bueno”, así que sentimos que ya conocía los hechos.
Un hombre de más de sesenta años quitó una bandera que habíamos colgado de un árbol. Le pedimos que volviera a colocarla o que nos la regresara. Él nos dijo: “No, me gusta. La colgaré en mi casa”. Se fue caminando con la bandera y una sonrisa en la cara.
Una anciana vio que estábamos poniendo una bendición escrita con grandes caracteres chinos y nos preguntó: “¿Por qué hacen eso?”. Le respondimos que podía traer bendiciones a las personas. Entonces la mujer nos preguntó si podía conseguir un par de esas para colgarlas en su casa.
Le dimos dos y le contamos sobre Falun Gong, sobre por qué el PCCh lo persigue, y sobre lo importante que era renunciar al partido y sus organizaciones afiliadas. La señora renunció a su membresía de los jóvenes pioneros y leyó un cartel con información sobre la escenificación de la autoinmolación planificada por el PCCh.
Justo cuando estábamos sujetando otro cartel apareció un patrullero. Vimos el auto pero lo ignoramos. Justo cuando estuvo cerca de nosotros, se dio la vuelta y se marchó.
Mientras trabajábamos mantuvimos nuestras mentes puras e hicimos las cosas con naturalidad. Sentimos una muy fuerte energía del Maestro.
Uno de nosotros trató de sujetar de un árbol un colgante que decía: “Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno”, pero no pudo en varias oportunidades. Otro practicante pensó para sus adentros: “Maestro, por favor ayuda”, e intentó de nuevo. El colgante se prendió de una rama de cerca de cuatro metros de altura. Nos quedamos sorprendidos de lo alto y de lo bien ubicado que había quedado el colgante.
Nos apoyamos entre nosotros con pensamientos rectos y trabajamos como un cuerpo durante todo el proceso. Nos pusimos muy felices de ver a la gente despertar.
Una bandera donde se lee: “Falun Dafa es bueno”.
“Renuncia al PCCh por un futuro brillante”.
“Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno”.
Cartel con información sobre la persecución del PCCh.