(Minghui.org) Comencé a practicar Falun Gong en 2010, pero hace poco que tomé mi cultivación en serio.

Cuando leí por primera vez Zhuan Falun, el libro principal de Falun Gong, decía que la cultivación podía elevar el reino moral de la persona y cambiar el pensamiento y el comportamiento de uno.

Cultivando el habla

Cuando me uní al grupo del estudio del Fa, no podía leer muchos de los caracteres chinos en Zhuan Falun. El diccionario y mi cuñada me ayudaron a entender el significado de los caracteres.

Solía practicar Daoismo y también era aficionado a otras religiones, pero todavía contendía cuando me encontraba en conflictos y a menudo usaba lenguaje grosero. Sin embargo, Falun Gong cambió todos mis malos hábitos y me ayudó a dar un paso atrás cuando me enfrentaba a conflictos. También superé mi miedo a hablar con desconocidos.

Estudiar el Fa también me ayudó a mirar adentro, centrarme en los puntos positivos de otros, minimizar las críticas, reducir las quejas y dejar de culpar a otros.

Solía tener inflamaciones en la boca cuando murmuraba a espaldas de otros. Falun Gong me enseñó a prestar atención a lo que decía. Comprendí la importancia de cultivar mi habla y no tuve que preocuparme mucho más por la inflamación de mi boca.

Protegido por el Maestro

Mi vida no iba viento en popa, pero siempre había alguien para levantarme. Estudiando el Fa comprendí que el Maestro estaba ocupándose de mi.

Hubo una explosión en mi unidad de trabajo, pero nadie resultó herido. Yo estaba sacando algunas hogazas de pan del horno cuando de repente, el horno explotó. Mi jefe estaba aterrorizado, pero yo ni nadie más de los que estábamos en la cocina resultamos lastimados. Sé que el Maestro estaba protegiéndonos.

En otra oportunidad, cuando estaba preparándome para cruzar la carretera, no vi ningún coche. Sin embargo, no detecté una motocicleta acercándose. Afortunadamente, el conductor se las arregló para frenar sin golpearme. Encontré el peligro, pero una vez más, estuve a salvo.

Un tercer incidente ocurrió en mi lugar de trabajo. Mientras estaba afilando un cuchillo, perdí el control y me hice un profundo corte en la mano. La herida sangraba tanto que empapó mi ropa. Envolví la herida con toallas de papel y eventualmente paró de sangrar. No pensé en ver a un doctor, sabía que estaría bien porque el Maestro estaba cuidando de mí.

Purificando la mente

Estuve controlado por la lujuria por muchos años. Incluso después de comenzar a practicar Falun Gong, todavía navegaba en Internet para visitar páginas web con contenidos explícitos. Me reprendía después, pero no paré ese mal hábito que seriamente afectaba mi cultivación y mi habilidad para concentrarme en el trabajo. Mi mente estaba llena de pensamientos sucios y todo mi cuerpo tenía un olor inmundo. Sentía que era incapaz de continuar con mi cultivación.

Por añadidura, tenía el apego de ser perezoso. La página web Zhenjian publicó un artículo titulado: "Usando una voluntad fuerte para romper pensamientos de pereza". El artículo decía que la pereza era causada por una emoción y que era hermana del apego de buscar una vida confortable. Los dos indican la debilidad resultante de ser incapaz de controlarse.

Leyendo este artículo pude comprender que la pereza causaba mi falta de diligencia en la cultivación. También era la pereza la que controlaba mi mente y me hacía retornar a las malas acciones una y otra vez.

Ahora, sigo estrictamente el estándar de Dafa. Si algún mal pensamiento brota, hago todo lo que puedo por oponerme a ello, eliminar la mala influencia y arrancar el problema de raíz .

Cuando algún mal pensamiento como lujuria, odio, mentiras, dormir excesivamente, envidia o rabia salen afuera, como cultivador hay que controlarlos, de otra forma, esas entidades de bajo nivel podrían instantáneamente atacar el cuerpo de uno.

Esas entidades de bajo nivel en la dimensión de uno traen interferencias y persecución. Los Fashen del Maestro no tienen modo de proteger a dicho cultivador, porque los problemas son causados por los apegos de uno. Por eso es muy importante purificar la mente.

El Maestro dijo:

"...¿Qué es lo que las viejas fuerzas y el viejo cosmos ven como la cosa más grave? La lujuria, la actividad sexual fuera del matrimonio. Eso es lo que ellos ven como la cosa más seria". (Exponiendo el Fa en la ciudad de Los Ángeles)

"...Ellos saben, “Li Hongzhi, usted no quiere abandonar a sus dizi, así que haremos que los abandone”. Por eso es que ellos hacen que los estudiantes que cometieron errores cometan más errores, una y otra vez, y que al final hagan cosas malvadas y se vayan al lado opuesto". (Exponiendo el Fa en la ciudad de Los Ángeles)

Abandoné muchos apegos. Mi vida ha empezado a ser significativa y he comprendido que he salido de la oscuridad.