(Minghui.org) Muchos policías de Beijing entienden que los practicantes de Falun Gong son buenas personas gracias a que durante 17 años los practicantes les han explicado pacientemente que la persecución está mal. Ahora algunos comenzaron a proteger secretamente a los practicantes.
Un hombre compró una casa en un distrito de alto nivel para sus padres, que practican Falun Gong. Después de mudarse, el policía de su área residencial anterior los llamó por teléfono y les dijo: “La división de seguridad nacional pasó información sobre ustedes a la comisaría de su nuevo vecindario. Por favor, cuiden su seguridad”.
Un funcionario de la oficina 610, que sabe que la persecución es ilegal, fue hasta la casa del practicante Won (alias) a visitarlo. Incluso aunque participó en la persecución del Sr. Won en el pasado, éste le dio la bienvenida y lo invitó con té. Dijo al funcionario que se cuidara y le aconsejó que no volviera a participar en la persecución a Falun Gong.
Además le contó cómo renunciar al partido comunista chino y a sus organizaciones afiliadas por medio de la página web de La Gran Época. El funcionario estuvo muy agradecido y contó al Sr. Won que otro funcionario de la oficina 610 que solía perseguir a los practicantes fue recientemente transferido.
Un policía local llamó a un pariente de otro practicante antes de Año Nuevo. Le dijo: “¿Cómo está todo? ¿Cómo están tus padres? Se acercan las fiestas, por favor cuídate, cuida a tu familia, y se consciente de su seguridad”.