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Toronto: Turistas en Queen's Park aprenden la práctica de meditación de Falun Dafa.

Oct. 4, 2017 |   Por Zhang Yun, corresponsal de Minghui

(Minghui.org) Grupos de practicantes de Falun Gong pueden ser vistos a menudo meditando en Queen's Park en el centro de Toronto. Es uno de los parques urbanos más antiguos de América del Norte y es un sitio histórico muy conocido que atrae a un gran número de turistas todos los días.

Impresionados por el ambiente sereno y los suaves movimientos de los ejercicios, muchos turistas tomaron fotos o hablaron con los practicantes para aprender sobre Falun Gong.

Los practicantes de Falun Gong meditan en el Queen's Park en el centro de Toronto.

Turistas europeos


Los turistas de Bélgica toman fotos con las banderas.

“Recientemente, ha habido muchos grupos de turistas de Europa”, dijo la Sra. Wang. Un grupo de Bélgica se mostró entusiasmado por ver a los practicantes. Cada miembro del grupo tomó un volante y una foto del grupo con un estandarte que decía: “Falun Dafa es bueno”.


Turistas de Croacia recibieron trípticos y flores de loto hechas a mano antes de tomar una foto con los practicantes.


Per (izquierda) y Ursula (medio), marido y mujer, dijeron que les gustaban los principios de Falun Dafa.

Per y Ursula, marido y mujer de Noruega, observaron los ejercicios y tomaron muchas fotos. Hemos visto informes sobre Falun Gong en Noruega. También vimos los ejercicios en un parque de Quebec. “Encantada de volver a encontrarnos aquí”, dijo Ursula. “Me gustan tanto los ejercicios como los principios de Falun Dafa. Verdad-Benevolencia -Tolerancia es lo mejor para el mundo, para todos, incluso para el universo”, añadió.


Una mujer aprende los ejercicios de Falun Gong de un practicante.

Funcionario del gobierno chino retirado

El Sr. Sun, un funcionario del gobierno retirado de la provincia de Henan en China, vino con su familia. Mientras la Sra. Zhang comenzó a contarle sobre los crímenes cometidos por el partido comunista chino, el Sr. Sun levantó el puño para golpearla antes de que su hija lo detuviera. La Sra. Zhang dijo tranquilamente: “Por favor, primero escúchame. Soy una voluntaria y te lo digo por tu bien. Ustedes son los primeros que me han hecho esto, pero ¿han pensado por qué seguimos aquí parados y haciendo esto? Es porque estamos preocupados por usted y nos preocupamos por su futuro”.

El tono del Sr. Sun se suavizó: “Sigue hablando, entonces”. Una de mis amigas creyó en la propaganda del gobierno y dejó de visitarme después de la persecución declarada en 1999. Luego, se fue de China con su hijo y más tarde le diagnosticaron cáncer uterino. Su médico dijo que sólo le quedaban 3 meses. Fue su hijo quien contactó a los practicantes de Falun Gong y la ayudó a aprender los ejercicios. Su salud mejoró rápidamente y su cáncer desapareció en un mes”.

Continuaron hablando y la Sra. Zhang explicó cómo el partido comunista difamó a Falun Gong usando casos inventados, como el engaño de autoinmolación en la Plaza de Tiananmen. También discutieron sobre el asesinato de practicantes por sus órganos en China, sancionado por el estado. El Sr. Sun se conmovió hasta las lágrimas y dijo: “¡¿Cómo puede suceder algo así en China?!”.

Al enterarse de que la Sra. Zhang tenía casi 70 años, el Sr. Sun y su familia se sorprendieron. “Ahora he visto con mis propios ojos lo bueno que es Falun Gong”, dijo. Su familia accedió a abandonar el partido comunista. El Sr. Sun se inclinó y dijo: “Esto es una bendición para mi familia. ¡Gracias!”.


Un practicante de Falun Gong habla con un turista chino.

Estudiantes chinos difunden el mensaje

Luan y Gao, dos estudiantes chinos que estudiaban en la Universidad de Toronto, conversaron con los practicantes y ambos decidieron retirar su membresía en el partido comunista. Gao pidió una copia de los Nueve Comentarios sobre el Partido Comunista y tomó algunos trípticos. “Conozco a otros estudiantes chinos en el campus y se los daré”, dijo.

La Sra. Wang, una canadiense china que trabaja en el centro de Toronto, grabó un video de la escena y todos los carteles que los practicantes mostraron. Anteriormente había hablado con sus padres sobre las violentas campañas del partido comunista chino, pero aún no han aceptado abandonar el partido.

“Ambos son miembros del partido y no quiero que se hundan con el régimen. Espero que estos videos ayuden a cambiar su actitud”, dijo. “Son mis padres, así que tengo que hacer esto”.