(Minghui.org) Mi nombre es Lei Wang, soy una practicante de Suecia. Vine de Beijing a Suecia en el año 1991. En 1994, participé en un seminario de 10 días dirigido por el Maestro en Jinan y fue entonces cuando inicié el verdadero viaje de mi vida. Llegué a conocer el significado real de mi llegada a Suecia. El pueblo sueco tiene una conexión muy estrecha con Dafa. En 1995, el Maestro vino a Suecia en persona para difundir Dafa y dirigir actividades. Posiblemente debido a que yo ya había obtenido el Fa, me convertí en la persona de contacto así como también coordinadora en Suecia lo cual resultó ser una muy buena experiencia de cultivación para mí.
Tratando con compasión a los compañeros practicantes
Soy diligente al hacer cosas para Dafa. Sin embargo, cuando las cosas se acumulaban me ponía ansiosa y mi actitud cambiaba lo que hacía que yo fuera dura con los demás. Recuerdo con claridad cuando el Maestro llegó a difundir el Fa a Suecia, fue muy paciente al dar las conferencias, al enseñar los ejercicios y al contestar las preguntas de los occidentales.
Un día, el Maestro me llamó a un lado y me dijo con mucha seriedad: “Todos son discípulos de la misma escuela de cultivación que tú. Algunos de ellos se cultivan mejor que tú. Debes tratarlos muy amablemente. De lo contrario te arrepentirás después de cien años”. Me sentí muy avergonzada después de escuchar las palabras del Maestro. Yo estaba simplemente ocupada haciendo trabajos e ignorando completamente mi actitud. Esto me conmovió profundamente. Llegué a apreciar verdaderamente la oportuna advertencia del Maestro. Muchos años después, cada vez que empiezo a ponerme impaciente con los compañeros cultivadores, casi de inmediato empiezo a lamentarlo. La voz del Maestro resonaría en mi corazón muy a menudo.
El Maestro dijo:
"Falun Dafa es xiulian y no es un trabajo. Todo nuestro personal voluntario debe ser ante todo cultivadores genuinos con un alto nivel de xinxing, que sirven como modelos para la cultivación del xinxing. No necesitamos dirigentes al estilo de la gente común" (No es trabajo, es xiulian, Escrituras esenciales para mayor avance),
Muy a menudo, hacía una lista de cosas para hacer por Dafa y esperaba de esta manera poderlas hacer un poco más y más rápido. Aunque estas cosas son todas por Dafa, a menudo las manejaba con la mentalidad y muchas nociones de una persona común.
Recuerdo que al comienzo de la persecución del malvado PCCh en contra de Falun Gong, no sabía cómo hacer las cosas con los cultivadores occidentales. Un día un cultivador sueco me preguntó: "¿Por qué no te sientas y compartes con nosotros, por ejemplo durante unas 6 horas y luego vemos cómo hacerlo juntos? ¿No podemos lograr mejores resultados de esta manera?". Mi primera respuesta fue: ¿seis horas?, ¡tanto tiempo! Sin embargo, posteriormente lo pensé y me pareció razonable así que decidí probarlo.
Poco a poco llegué a entenderlo: cuando hago las cosas solo pongo atención en el resultado, pero descuido el proceso de hacerlas. Sin embargo, ¿no es el proceso de hacerlo cultivación también? Durante este proceso, llegué a ver la belleza de los compañeros cultivadores y observar mis defectos. Me tomó un período de tiempo muy largo para llegar a formar el hábito de compartir más con mis compañeros cultivadores occidentales, así como trabajar y cultivar juntos y mejorar. De vez en cuando, recordaba las palabras de Maestro:
“Estudia el Fa y obtén el Fa,
comparte en el aprendizaje y comparte en la cultivación,
haciéndolo todo de acuerdo a Él,
si puedes hacerlo así, cultivación será”
(Cultivación sólida, Hong Yin).
La salvación de las personas es la responsabilidad de los discípulos de Dafa
Desde el 30 de julio de 1999, he sido y continúo siendo la responsable en comunicación en el Ministerio de Relaciones Exteriores de Suecia. Como practicantes hemos estado en contacto con ellos en los últimos 18 años. Durante este período el personal ha cambiado varias veces. Una pregunta común sigue siendo la misma para los recién llegados: ¿Qué es Falun Gong? ¿Por qué el PCCh persigue a Falun Gong? Recuerdo que durante los primeros años permanecí en contacto con una diplomática. Le hablé sobre mis experiencias personales, sobre lo que había presenciado y oído. Ella me escuchó con mucha atención y se conmovió hasta las lágrimas. Sin embargo, después de años de esclarecer la verdad apenas se veían los resultados.
El gobierno sueco todavía insiste en un diálogo a puertas cerradas con el PCCh en lo que se refiere a la cuestión de los derechos humanos. Comencé a quejarme con ellos. Un día ella me llamó y me dijo: "Estoy a punto de cambiar mi lugar de trabajo a la embajada de otro país. Me siento tan impotente con respecto a mi capacidad para manejar los problemas de derechos humanos en China. ¿Hay alguna noticia sobre el profesor Changxin Yu (un discípulo de Dafa de Beijing)?". Comprendí que ella conocía muy bien la verdad de Dafa, pero no podía hacer mucho. Pude sentir el sentimiento de culpa que tenía. Me di cuenta cuán equivocada había estado yo. Soy una cultivadora y tengo la misión de salvar a la gente. ¿Cómo podía culpar a la gente que queremos salvar? Las cosas no se hacían bien y era mi responsabilidad, pero no la suya.
Salvar a los seres conscientes es la responsabilidad de nuestros discípulos de Dafa. Lo que una persona común puede hacer es posicionarse. Nuestra mente recta puede ayudarles a deshacerse de las diferentes dudas que tienen, así como sacar a flote sus buenos pensamientos y el sentido de justicia para que puedan con entereza hablar por Falun Gong.
En el año 2002, invitamos a la Viceprimera Ministra de Suecia a nuestro mitin frente al Parlamento. Al principio, ella solo aceptó firmar nuestra petición, pero luego sí vino a nuestro mitin, tomó la iniciativa de tomar el micrófono y habló. Nos apoyó de una manera muy positiva.
La exposición anual de libros en Gotemburgo es una buena oportunidad para aclarar la verdad a los políticos. Cada año, el parlamento sueco tiene allí un estand de exposición. Cada 2-3 horas, hay un parlamentario de una región diferente que se reúne y habla con el público. Yo he sido una de sus visitantes habituales durante los últimos 10 años. Varias de mis conexiones con los parlamentarios se establecieron allí. Antes de asistir revisaba el calendario para saber quiénes irían ese día, luego revisaba sus biografías para decidir con quién hablaría.
Cuando llegué a la exposición del libro, la primera persona que vi fue el parlamentario con el que prefería hablar. Él ya conocía la verdad sobre Falun Gong y había visto el documental sobre la sustracción de órganos. Estuvo también involucrado en la moción para enmendar la legislación. Sin embargo, yo sentía que él todavía necesitaba saber más acerca de Falun Gong. Ese día llegó una hora antes de lo previsto. Se puso contento de volvernos a ver y quiso saber más sobre Falun Gong. Me hizo muchas preguntas y hablamos sin parar durante más de una hora. Más tarde, cuando fue entrevistado por la televisión sueca con respecto al tema de la sustracción de órganos a los practicantes de Falun Gong, habló muy bien y yo estaba feliz de que se posicionara bien.
Deshacerse del apego al miedo
En circunstancias normales no temo aclarar la verdad a los parlamentarios. Pero una vez me encontré con un parlamentario de edad y gigante de altura, tenía una expresión muy seria en el rostro. Me entró un poco de miedo en el corazón. Caminé dos veces por donde se encontraba pero no tuve el coraje de acercarme. Estaba a punto de renunciar cuando en ese momento, me encontré con una compañera practicante y le pregunté si iría conmigo para esclarecerle la verdad a ese parlamentario. Normalmente en otras ocasiones me tocaba alentarla, pero ese día lo aceptó sin dudarlo. Al final, tuvimos una muy buena conversación con ese parlamentario, mostró felicidad en el rostro y nos agradeció mucho.
A menudo prefiero elegir a la persona a la que me gustaría esclarecerle la verdad y elijo a aquellas con las que puedo tratar fácilmente. Sin embargo, este pensamiento puede bloquear a muchas de las personas que están supuestas a ser salvadas y hacer que una gran cantidad de ellas perdieran la oportunidad de ser salvadas.
El Maestro dijo:
"Al que quieres, tú lo salvas, al que no quieres, no lo salvas, así, ¿cómo se puede salvar a los seres conscientes?
El Maestro también dijo:
“Esos corazones humanos, corazones de miedo, ¿cómo pueden dirigir el gong?” (Fahui de Nueva York, 2016).
Agradezco de todo corazón al Maestro por haberme enviado a los compañeros practicantes justo en el momento en el que sentía temor.
Recuperar la paciencia a través de la cultivación
Algunos de los parlamentarios se alejaban enseguida después de conocer la verdad; muchos conocen muy bien la verdad ya que les he aclarado los hechos junto con otros compañeros cultivadores. Durante muchos años no han salido a apoyarnos por lo que yo había desarrollado algo de amargura hacia ellos. A través del estudio del Fa, me di cuenta de que mi corazón necesita estar limpio y puro al esclarecer la verdad y salvar a la gente. Debemos ser genuinamente buenos con los demás y no esperar ningún resultado.
Además, la mente de la gente común no es muy estable y puede ser fácilmente interferida de varios lados. Cuando nuestro corazón no es estable y nuestros pensamientos rectos no son fuertes, podríamos afectarlos directamente. Después de compartir con otros cultivadores, conseguimos ajustar nuestras mentes y apoyar a los parlamentarios con pensamientos rectos. De ahí en adelante cuando salían para darnos su apoyo, aparecían muy rectos. La interferencia de la embajada y el consulado de China los hizo aún más decididos a apoyarnos.
Escuchar con el corazón
Al principio cuando aclaraba la verdad me enfocaba principalmente en lo que iba a decirles a las personas y no prestaba mucha atención a escucharlas. A veces incluso interrumpía la conversación de la otra persona. No me enfocaba en poner atención a lo que otros decían. Lo mismo sucedía cuando hablaba con compañeros cultivadores. Hablaba más de lo que escuchaba y apenas escuchaba a los demás con el corazón.
Un día, mi hija me envió un mensajes de texto preguntándome por el significado del carácter chino "escuchar聴". Noté que "escuchar 聴”era muy similar al carácter de "virtud德". El carácter tradicional chino de la palabra "escuchar" no solo utiliza el carácter para oreja, sino que también utiliza el carácter para corazón (hay el carácter "oreja 耳”y el carácter "corazón心" en el carácter tradicional chino "escuchar聴"). Es decir que tiene una conexión con la virtud. El carácter chino simplificado "escuchar口" no necesita oído o corazón, este solo requiere una boca y no tiene ninguna virtud en absoluto ( tiene el carácter para "boca听”).
Llegué a entender que "ser capaz de escuchar" requiere cultivación y requiere pensar menos en uno. Crecí en el ambiente de la cultura del partido el que siempre anima cierta filosofía. No había aprendido a escuchar a los demás, mucho menos a escuchar con el corazón. Si quiero salvar a la gente, debo cultivarme y debo abandonar toda la cultura del partido y mi propio ser. Poco a poco me di cuenta que sería más fácil encontrar la parte bondadosa de una persona si utilizo mi corazón para escuchar. Sería más fácil para mí encontrar el punto de partida adecuado para el esclarecimiento de la verdad. Solo haciendo las cosas de esta manera podría esclarecer la verdad en la dirección correcta y llegar al punto correcto.
He estado esclareciendo la verdad al nivel gubernamental por más de 10 años. Sin embargo, no he puesto todos mis esfuerzos y he tenido un gran apego al miedo. Por lo tanto, el proceso de clarificación de la verdad se mueve muy lentamente y está muy lejos de los requisitos del Maestro. Siento que el mayor obstáculo en la cultivación son los pensamientos humanos. El trabajo de esclarecimiento de la verdad al gobierno es un proceso de deshacerse de los diversos apegos humanos, incluyendo el apego al miedo, el apego al resultado final y no trabajar con todo el corazón, etc. Y es también un proceso de esforzarse más para lograr tener un corazón verdadero, amable y puro.
El Maestro ya ha señalado el camino. Depende de mí elevar mi xinxing. Solo cultivándome bien podré salvar a más seres conscientes.
¡Gracias Maestro! ¡Gracias compañeros practicantes!