(Minghui.org) Mi madre y mi suegra ambas tienen 87 años. Mi suegra se enfermó en octubre de 2016, tenía problemas de salud que llevaban ya tiempo, y no había nada que el hospital pudiera hacer.
Durante ese tiempo, mi madre se cayó, y se fracturó los huesos. Ambas están bien ahora, y les va muy bien. Quisiera compartir sus historias.
Mi suegra
Mi suegra tenía enfisema pulmonar y enfermedad cardíaca. Cuando se enfermó de nuevo en octubre y la llevaron al hospital, su salud empeoró. El hospital le recetó esteroides por dos días y le dio el alta, diciendo que era lo único que podían hacer por ella.
Desarrolló asma severa y luego de regresar a casa no podía acostarse, así que dormía en el sofá. Mi cuñada se sentía sin esperanza, y deseaba que su madre pudiera sobrevivir al Año Nuevo Chino.
Al ver cómo mi suegra sufría, le di un amuleto y le pedí que repitiera: "Falun Dafa es bueno. Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno". Le dije que hacerlo aliviaría su dolor. Ella dijo que lo haría.
Mejoró a diario y al tercer día se sentía bien. Ya no tenía asma y podía comer y dormir normalemnte.
Me dijo: "Cada vez que intentaba acostarme, pensaba que Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno, y podía sentir que mi respiración mejoraba".
Un par de meses han pasado y todavía le va bien. También se ve más joven que nunca. Sus dos hijas, que solían estar en contra de Falun Dafa debido a la propaganda difamatoria, cambiaron de opinión. Ahora motivan a su madre a que siga diciendo que Falun Dafa es bueno y Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno.
La historia de mi madre
Mi madre comenzó a practicar Falun Dafa en 1999. Poco después, empezó la persecución. Se asustó, dejó de practicar, y se dedicó a la religión. En noviembre de 2016, se cayó en la cocina y se fracturó el fémur y el cuello, y tuvo que recibir cirugía.
Antes de ser enviada a la cirugía le dije que repitiera: "Falun Dafa es bueno. Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno". No me respondió. Tuvo mucho dolor luego de la cirugía, así que le pedí que dijera: "Falun Dafa es bueno. Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno". También le conté la historia de mi suegra. Ella sabía sobre sus problemas de salud. Le dije que sólo tenía sus mejores intereses en cuenta y que confiara en mi.
"No puedo", me dijo. "He estado con una religión por muchos años. Una persona en mi grupo de religión dejó el grupo y tuvo una mala experiencia".
Entendí donde estaba bloqueada.
"No te estoy pidiendo que dejes a tu religión", le dije. "Si entiendes la verdad y lo bueno que es Falun Dafa, eso es suficiente". Parecía entender y aceptó antes de dormir.
Al despertar me dijo: "Mis piernas se sienten bien, mis piernas se sienten bien. Cuando dormía y las estiraba, se sintieron muy bien, como si hubieran crecido".
Le dije: "Tu confianza en Falun Dafa te ha curado".
Ella sonrió y estuvo de acuerdo. Ahora entiende de verdad que Falun Dafa es bueno.