(Minghui.org) Algunos días atrás otro practicante y yo estábamos hablando a los aldeanos sobre Falun Dafa y la persecución y un hombre nos reportó a la policía.
Le dijo al oficial que estaba en tal y tal lugar. “¡Hay dos practicantes de Falun Dafa que están realizando actividades anti-partidarias. ¡Vengan y arréstenlos ahora!”.
Le pedí que me dejara hablar con el policía directamente, por lo que me pasó el teléfono móvil. Le dije que era practicante, y que lo animaba a renunciar al partido comunista chino (PCCh) para protegerse de futuros desastres.
Le expliqué: “El partido ha cometido numerosos crímenes contra la humanidad, como la revolución cultural, la masacre en la Plaza Tiananmen y la persecución a Falun Dafa. Ochenta millones de personas han muerto de causas antinaturales desde que asumió el poder en China. Un día será desintegrado, y aquellos que forman parte, perecerán con ése. Serás protegido si renuncias al partido….”
El oficial me interrumpió: “No diga nada más. Lo sé todo”. Devolví el celular al hombre, me agarró de la ropa y no me dejaba ir. Esperamos un rato a la policía, pero nadie apareció.
La llamó nuevamente. Aguardamos por largo tiempo, pero ninguno vino.
El otro practicante envió fuertes pensamientos rectos mientras esperábamos. En el ínterin, le hablé sobre Falun Dafa y la persecución. Una docena de personas estaban de pie alrededor escuchando, y entendieron que Falun Dafa era una buena práctica.
Entonces uno le manifestó al hombre: “Ellos están haciendo esto en su beneficio. ¿Por qué les hace pasar este mal momento?
Y a nosotros nos dijo: “Sabemos que los practicantes de Falun Dafa son buenas personas. Vayan a su casa”. Ambos retornamos a nuestros hogares a salvo.
Espero sinceramente que aquellos quienes aún son engañados por el PCCh entiendan las bondades de Falun Dafa, y elijan para ellos un brillante futuro.