(Minghui.org) La prisión de mujeres de Mongolia Interior ha sido un lugar principal para encarcelar por sus creencias a los residentes locales. Desde que el régimen comunista chino lanzó la persecución a Falun Gong, la disciplina espiritual basada en los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia, las practicantes, ciudadanas respetuosas de ley, están retenidas en esa prisión y son sometidas a intensa persecución.

Las autoridades de la prisión han desarrollado numerosas tácticas, como tortura física, administración de drogas desconocidas, manipulación psicológica, y trabajo forzado, en sus intentos de detener y hacer renunciar a su fe en Falun Gong, a las practicantes detenidas.

Muchas de las practicantes tienen heridas permanentes con complicaciones y/o tuvieron traumas emocionales. Se sabe que al menos una practicante murió debido a las torturas en esta prisión.

A la fecha, se confirmó que al menos 41 practicantes de la provincia estuvieron encerradas en esta prisión una u otra vez por ejercitar su derecho constitucional a la libertad de creencia. Cuatro de estas practicantes son las Sras. Liu Xiurong y sus tres hijas, Tian Xin, Tian Fang, y Tian Miao, quienes sirven una sentencia en la prisión. Tian Xin fue enviada allí recientemente, poco tiempo después de haber sido liberada.

Debido al bloqueo informativo del régimen, se cree que cientos de practicantes sufrieron persecución en esta prisión.

Tortura física

Kang Jianwei, guardia, a menudo dirige las torturas a las practicantes allí. Él y otros guardias también instigan a que los reclusos criminales lleven a cabo las torturas a practicantes, prometiéndoles reducciones en sus sentencias.

La Sra. Liang Lixin muere por el cáncer generado por el abuso

La Sra. Liang Lixin fue sentenciada a seis años luego de su arresto ilegal en agosto de 2004. Desarrolló cáncer después de soportar varias formas de tortura. Según la policía local, murió cuando estaba encarcelada.

La mayoría de las practicantes fueron víctimas de Kang

Casi todas las practicantes retenidas allí fueron asaltadas por Kang Jianwei, un guardia. Este incluso alardeó de sus atrocidades: “Yo soy el guardia perverso que denuncian en Minghui ¡¿Y qué?!”.

Una vez agarró a la Sra. Wang Xiufang del pelo para golpearle la cabeza con una picana eléctrica. Le dio puñetazos en el pecho durante horas, rompiéndole varias costillas. Cuando la Sra. Wang fue liberada tres años más tarde, aún le dolían sus pechos y tenía varios puntos sin pelos en la cabeza.

Kang también le rompió las costillas a la Sra. Zhai Cuixia después de golpearla. No pudo caminar por meses, y solo se podía mover arrastrándose.

Kang pateó el área genital de la Sra. Li Yuzhi, una mujer de más de 70 años, derribándola. Dos reclusos la arrastraron hasta una oficina, donde fue forzada a permanecer en una posición fija (cuclillas o parada) por varias horas.

Después de empujar al piso a la Sra. Pang Chunxiang, Kang la tomó del pelo y la arrastró por el piso.

Administración de drogas desconocidas

Los guardias alimentan a la fuerza a las practicantes que hacen huelgas de hambre. La Sra. Wang Ying no comió nada por casi un año y fue sometida al castigo de la alimentación forzada. Los guardias a menudo les insertan un líquido amarillento sin identificar, que les genera enfermedades.

La Sra. Shi Yumei también recibió drogas desconocidas en varias ocasiones. Incluso cuando no estaba en huelga de hambre, los guardias encontraron excusas para drogarla. Intencionalmente falsificaron los resultados de su presión arterial como si estuviera muy alta para poder darle unas píldoras para sus “síntomas”.

Manipulación psicológica

Para forzar a las practicantes a renunciar a su fe, los guardias las fuerzan a leer o mirar propaganda que calumnia a Falun Gong.

En una ocasión, los guardias alinearon 14 practicantes de una sesión de lavado de cerebro frente a otra fila de reclusas y ordenaron a las reclusas que gritaran insultos a las practicantes durante varias horas.

Los guardias también intentaron engañar a las familias de las practicantes y las usaron para debilitar la voluntad de ellas. Por ejemplo, la familia de una practicante dejó de visitarla después de creer las mentiras de los guardias. Mientras soportaba la traición de su familia, también tenía que aguantar estar en confinamiento solitario en la prisión. Los guardias ordenaron que todas las reclusas dejaran de hablarle o se acercaran. Ella recuerda esos años cuando casi colapsa mentalmente en ese tiempo.

Trabajo esclavo

Los guardias también sometieron a las practicantes a realizar trabajo esclavo sin pago. Ordenaban a las practicantes trabajar largas horas para hacer diferentes productos. Muchas desarrollaron problemas de salud después de estar expuestas a materiales tóxicos y condiciones insalubres de trabajo, además de la carga horaria extendida.

Lista de las 41 practicantes detenidas reconocidas

Dai Zhenyun, Ding Yanli, Duan Xueqin, Fan Jinling, Gao Zhifan, Huang Chaoxia, Ji Shurong, Li Shilin, Li Yufen, Li Yuzhi, Liang Lixin, Liu Fengrong, Liu Fengyun, Liu Xiurong, Liu Yingchun, Liu Yuping, Meng Guilan, Pang Chunxiang, Shao Guizhen, Shi Yumei, Song Yaqin, Tian Fang, Tian Miao, Tian Sufang, Tian Xin, Wang Fenghua, Wang Guihua, Wang Jiufang, Wang Suqin, Wang Xiufang, Wang Ying, Wu Aihong, Yan Shukui, Yang Lirong, Yu Fengying, Zhai Cuixia, Zhang Cuimin, Zhang Cuiping, Zheng Guizhi, Zhou Liying, Zuo Yafen

Antecedentes

La prisión de mujeres de Mongolia Interior, localizada en el distrito de Xiaoheihe, ciudad de Hohhot, era antes conocida como la primera prisión para mujeres de Mongolia Interior. Fue reubicada en la aldea de Shuaijiaying en noviembre de 2003, para combinarla con la segunda prisión para mujeres de Mongolia Interior, la cual fue también reubicada de Baoanzhao, ciudad de Xing’an.

Partes involucradas en abusar de las practicantes en la prisión de mujeres de Mongolia Interior

Guardias: Kang Jianwei, Xiao Mei, Bai Guirong, Liu Gang, Bai Guimei, Wu Rining y Zhao Pengcheng

Reclusas: Yuan Wei, Shen Bo, Li Xiaolan y Liu Yan.