(Minghui.org) El Comité de Asuntos Exteriores del Parlamento de los Estados Unidos (HFAC por sus siglas en inglés) debatió la resolución H Res. 343 el 16 de marzo de 2016. La resolución insta al gobierno chino a ponerle fin a la práctica de sustracción de órganos de prisioneros de consciencia.
Según reportes de organizaciones de derechos humanos, los practicantes de Falun Gong representan la proporción más grande de prisioneros de consciencia en China, y enfrentan un riesgo elevado de morir o ser asesinados bajo custodia.
Voice of America (VOA por sus siglas en inglés) informó el 17 de marzo que la resolución 343 expresaba la preocupación de la Cámara de Diputados sobre “informes persistentes y creíbles de la sistemática sustracción de órganos perpetrada por el estado, de prisioneros de consciencia sin su consentimiento en la República Popular de China”. A continuación, presentamos el informe traducido del reporte de VOA:
“El diputado Eliot Engel (D-NY) condenó la sustracción de órganos de prisioneros de consciencia en China. Agregó que, “la sustracción de órganos sin consentimiento representa una grave violación a los derechos humanos. Y como si estos horribles abusos no fueran suficientes, son víctimas perseguidas por su creencia religiosa, y de las prisiones chinas, de donde sacan ganancias exorbitantes con la sustracción de estos órganos”.
“La resolución afirma que “mientras que el consenso voluntario e informado es la condición previa para la donación ética de órganos, y los organismos médicos internacionales afirman que los prisioneros, privados de su libertad, no están en posición de dar su consentimiento libremente, y que la práctica de recurrir a órganos de prisioneros representa una violación a los lineamientos éticos de la medicina”;
“Mientras que el gobierno de la República Popular de China y el partido comunista de China continúan negando los reportes de la procedencia de muchos órganos que son tomados sin consentimiento de los prisioneros, aun así, al mismo tiempo evitan la verificación independiente de su sistema de trasplante”;
“La resolución también señaló que las autoridades chinas habían anunciado que “China terminaría con su práctica de sustracción de órganos de prisioneros ejecutados el 1.° de enero de 2015, pero no abordó el asunto de la sustracción de órganos de prisioneros de conciencia”;
“Un artículo del New York Times del 17 de noviembre de 2015, reportó que “la clasificación de prisioneros ha permitido a los funcionarios chinos incluirlos en un nuevo sistema de “donación” nacional que China está construyendo para reducir su larga dependencia a los órganos de prisioneros”. El informe citó al Secretario General en la Asociación Médica Mundial, quien llamó a esta situación un “truco administrativo” ya que “no hay manera de confirmar que dichas donaciones son realmente voluntarias”.
“La resolución 343 citó una investigación de 2006 que concluye que: “los prisioneros de Falun Gong eran la única fuente plausible de órganos para los 41.500 trasplantes que se realizaron entre el año 2000 y 2005”.
“Otra investigación muestra que aproximadamente 65.000 seguidores de Falun Gong pueden haber resultado asesinados por sus órganos entre 2000 y 2008, y que una proporción de otras minorías religiosas y éticas pueden haber sido víctimas también”.
La diputada Ileana Ros-Lehtinen, ex presidente del Comité de Relaciones Exteriores, presentó esta resolución, e instó a la Secretaría de Estado a realizar un análisis más profundo de la sustracción de órganos del régimen comunista en su informe anual de derechos humanos y reportar al Congreso sobre las visas denegadas a funcionarios extranjeros que han estado involucrados en trasplante forzado de órganos y tejidos humanos”.
“Dijo que “La macabra sustracción de órganos en China no se ha detenido, y cuando las estadísticas oficiales de trasplantes en China no coinciden con los hechos según relatos de testigos y con el aumento considerable de la contratación de personal de trasplante, debemos ver las afirmaciones del régimen como las mentiras y la propaganda que en realidad son”.
“El diputado Dana Rohrabacher (R-CA) dijo: “Está mal que cerremos nuestros ojos, permitamos que nuestros doctores compren un riñón de algún prisionero de China que resulta ser un practicante de Falun Gong. Está mal que permitamos que un doctor de aquí realice ese trasplante porque entonces nosotros estamos participando en un crimen, en un horroroso crimen que no puede ser justificado”.
“La resolución alienta a la comunidad médica de los Estados Unidos a ayudar a generar consciencia de las prácticas de trasplante de órganos que no son éticas en China”.
“Según un artículo publicado en el Americal Journal of Bioethics en febrero de 2010, titulado “Turismo de trasplante en China: Una historia de dos trasplantes”: “la extremada escasez de trasplante de órganos en los Estados Unidos hace que un trasplante de órganos en China sea una opción atractiva para algunos pacientes con enfermedad en etapa terminal”.
“El presidente del Comité de Relaciones Exteriores, diputado Ed Royce dijo que la resolución instaba a los doctores estadounidenses a informar a sus pacientes sobre el peligro del turismo de traspante”.
“Actualmente, la resolución cuenta con 166 patrocinadores bipartidarios”.