(Minghui.org)

Shifu enseña:

“Sólo después que Sakya Muni, Lao Zi, y Jesús vinieron, pudo la gente hoy saber realmente qué es la fe recta y qué es la cultivación, qué es un fo, un dao, y un dios, y así sucesivamente este tipo de cosas. A través de la historia el pensamiento de la humanidad actual estaba siendo enriquecido, y esto ha permitido que la gente reconozca y entienda el Fa, y que obtenga el Fa. El curso entero de la historia de la humanidad estaba creando este cimiento. En otras palabras, fue para enseñar Dafa que los seres humanos y la cultura humana se crearon…”. (Viaje por Norteamérica para exponer el Fa)

Shifu enseña:

“En efecto, la religión tiene dos objetivos: uno es hacer verdaderamente que aquellos que se cultivan bien y pueden ascender a través del xiulian obtengan el Dao; el otro es poder hacer que la moral de la sociedad humana se mantenga en un estándar comparativamente alto. Éstas son las dos cosas que las religiones procuran hacer”. (“Enseñando el Fa en la montaña Dayu”, Zhuan Falun - Volumen II)

Una educación tradicional cristiana

Nací en la comunidad de una pequeña aldea de no más de 50 hogares, en el centro de Inglaterra. La comunidad se fundó en torno a la iglesia. Todos los nuevos bebés se bautizan en la iglesia y casi todos los aldeanos van a la iglesia, al menos en ocasiones especiales, como la Semana Santa, la Navidad y el Festival de la Cosecha. Hay una fiesta del pueblo cada verano y todo el mundo se reúne para que la fiesta sea exitosa –generalmente hay un espíritu de buena comunidad.

Mi abuelo era un agricultor y mi abuela era una esposa típica de un agricultor. Ella cocinaba y horneaba mucho, se implicaba en las actividades de la aldea y tocaba el órgano en la iglesia.

Así que fue natural para mí ser introducido al cristianismo desde una temprana edad. Cada domingo, mi madre, mi hermana y yo íbamos a la oración de la mañana y, con el paso de los años, asumí la tarea de “bombear aire al órgano" para ayudarle a mi abuela. Más tarde, cuando se instaló un sistema eléctrico, me integré al coro de la iglesia. No es que tenía muy buena voz, pero el canto atraía a más niños a la iglesia, los integraba en la escuela dominical y hacía que aprendan más sobre el cristianismo.

Yo era un estudiante diligente, un creyente. Nos dijeron que Jesús era nuestro salvador y que, si íbamos a ser buenos durante toda la vida, tendríamos la oportunidad de ir al cielo. Nunca he tenido un concepto claro del cielo pero entendí que era mejor ser bueno que malo y siempre tuve un genuino impulso de ser amable y de ayudar a los demás. Le ayudaba a mi madre con las tareas domésticas y pasaba mucho tiempo con mi padre en la granja.

Al graduarme de la escuela, me trasladé a la ciudad grande más cercana y comencé mi formación profesional en un gran conglomerado de ingeniería. Este nuevo entorno me dio libertad, pero canalizó mis energías en el estudio y el deporte. Siendo un chico trabajador del campo, tenía un cuerpo fuerte y era bueno sobre todo en cricket, jugando dos partidos cada fin de semana, y también practicando en las noches de lunes a viernes, por lo que mi vida de la iglesia se vio afectada. Sin embargo, todavía mantenía mi creencia y seguía tratando de vivir de acuerdo a las enseñanzas del cristianismo.

Después de muchos años de estudio logré obtener el título profesional de Ingeniero y, en 1970, me uní a una compañía de consultoría de gestión. Seguí teniendo una firme creencia en el cristianismo y, a mediados de 1980, iba a la iglesia con bastante fidelidad.

Siempre he estado interesado en el mundo y el universo, preguntándome acerca de cómo apareció y si hay algo más allá de este universo. Estaba pensando mucho acerca de esto, pero simplemente no podía lograr hacer un avance importante.

Según mi entendimiento del cristianismo, hay cielo, tierra e inframundo pero no se da ninguna explicación. Y nos habla sobre el infierno sin explicación alguna, excepto que es un hoyo hirviente de fuego.

Una experiencia que cambió mi vida

En 1988, sucedió un gran cambio en mi vida. Una noche, tuve un ataque de pánico, hiperventilación y me desmayé. Después de despertar, probablemente 30 hasta 45 minutos más tarde, encontré que algunas partes de mi memoria habían desaparecido. Era ingeniero, sin embargo no podía recordar ni siquiera cómo conectar un enchufe eléctrico.

Aunque regresé a trabajar después de apenas 2 semanas de descanso, me tomó 5 años poder recuperar plenamente mi salud. Dejé de ir a la iglesia porque pensaba que Jesús ya no me estaba cuidando.

Mi "enfermedad" tuvo un efecto profundo y mi matrimonio también fracasó. Me fui de la casa sintiendo que había pecado contra el cielo. Desde aquel incidente, nunca más he asistido a un servicio de iglesia y comencé a recorrer un nuevo camino.

Para entonces estaba trabajando en proyectos internacionales para la misma empresa de consultoría. En diciembre de 1994, empecé a trabajar en un proyecto del Banco Mundial en Tianjin, China, para el cual había sentado las bases 3 años antes. Fue así como conocí a una mujer de Tianjin, quien se convirtió en mi esposa en 1998. De hecho, mirando hacia atrás, puedo ver la predestinación a lo largo de todo este trayecto y en muchos otros momentos de mi vida.

En 1999, después de terminar el trabajo en Tianjin, recibí otro proyecto de 3 años, esta vez en la provincia de Liaoning en las ciudades de Shenyang, Anshan y Dalian. A continuación, fui a Xian y Nanchang y después trabajé en un proyecto de la UE, en Kosovo.

Aunque estuve en Tianjin cuando comenzó la persecución en contra de Falun Dafa y en Liaoning cuando la persecución alcanzó el pico, siendo un extranjero en China sabía poco sobre esto. Había un colega trabajando en Sichuan, en un proyecto de contraparte, quien nos contó sobre el marido de su secretaria que había desaparecido bajo circunstancias inusuales. Él practicaba Falun Gong, pero era todo lo que sabía –como un expatriado trabajando en China, es difícil conocer la verdad.

Antes de irme a Kosovo, me lesioné la cadera derecha. Los especialistas dijeron: "No tienes cartílago, necesitas un reemplazo de cadera". Acepté hacerlo, pero el proyecto de Kosovo comenzó tan rápidamente que la operación se tuvo que posponer.

Primer contacto con Falun Dafa

En mi tiempo libre en Kosovo, estaba leyendo sobre los avances en la investigación con células madre, y mi esposa también estaba buscando en la web maneras de solucionar mi problema de cadera sin cirugía. Hacia el final de mi proyecto de dos años en Kosovo, ella encontró y leyó sobre Falun Dafa. Imprimió la versión en inglés de Zhuan Falun y me dio a leer las lecciones, una por una en las tardes de domingo.

“¡Leo, pero no entiendo!”, le dije. "Este libro trata de enseñar a la gente a ser buena, al igual que las enseñanzas cristianas". Pero, por la manera en que mi esposa me habló sobre Falun Gong, supe en mi corazón que pronto iba a cambiar nuestra vida.

Sabía que mi esposa había encontrado la solución a mi problema de cadera pero no lo reconocí. En 2008, tan pronto como volvimos a Hong Kong, me sometí a cirugía inmediatamente.

En el año en que estuvimos de regreso a Hong Kong, mi esposa contactó a practicantes locales y empezó a practicar Falun Gong. Sentí que Falun Gong era algo más para el pueblo chino. Aún vivía una existencia humana occidental normal, haciendo deporte, conversando y bebiendo con amigos. Esto continuó también al principio de mi siguiente periodo de 2 años en Kosovo.

En 2009, desde el momento en que volvimos a Kosovo, mi esposa contactó a los practicantes en los países vecinos de Europa del Este y cuando estábamos de vacaciones ella arreglaba reunirse con algunos de ellos. También, cuando íbamos en el carro, ponía las lecciones del Maestro y las canciones compuestas por los practicantes de Dafa.

Practicando Falun Dafa verdaderamente

A principios del otoño de 2009, mi compañero de copas volvió al Reino Unido, y mi esposa me dijo que, ya que tenía tiempo por la noche, por qué no hacer juntos los ejercicios. Como un deportista, pensé que no había problema, eran unos ejercicios sencillos, así que empecé a aprenderlos. Miramos el video y tratamos de hacer los ejercicios tan correctamente como pudimos.

Aunque generalmente había sido sano la mayor parte de mi vida, en aquel momento tenía algunos problemas de salud, incluyendo un zumbido en el oído izquierdo que me estaba volviendo loco, un dolor de cuello acerca del cual un especialista me había dicho que necesitaría tomar medicinas por el resto de mi vida, acidez estomacal, un quiste en el cuello al que había tratado con punción dos veces antes pero que seguía inflamándose y supurando líquido maloliente, un dolor en el hombro derecho y algunos otros problemas.

Después de hacer los ejercicios durante unos meses, todos estos problemas simplemente desaparecieron uno por uno. Pero lo que me intrigó, era la energía que empecé a sentir entre mis manos mientras estaba haciendo los ejercicios.

Sucedieron otras dos cosas clave mientras hacía los ejercicios. Antes de empezar a practicar, tenía dolor al levantar el brazo derecho por encima del hombro. Un día, mientras estaba practicando, escuché un "bang" en la espalda justo por encima del omóplato derecho –como si un tendón se había liberado para moverse en su vaina y después ¡mi dolor de brazo desapareció!

En otra ocasión, estaba de pie haciendo el 4.º movimiento del segundo ejercicio, la estaca parada, cuando sentí en el oído derecho un dolor agudo, como una descarga eléctrica. Esto sucedió varias veces en días sucesivos. No había podido contestar el teléfono usando el oído derecho durante muchos años, porque mi audición en ese oído no era buena pero, después de estos hechos, ¡el problema de mi audición desapareció!

También noté que mi vista mejoró. De estos acontecimientos y de la energía que sentía durante la práctica, sabía que Falun Gong era algo realmente poderoso y quería aprender más acerca de ello.

Entonces, empecé a leer las lecciones y enseñanzas del Maestro más diligentemente y finalmente encontré las respuestas a mis preguntas sobre el universo y sobre infinidad de otras cuestiones. Fui introducido a un mundo completamente nuevo.

2009-2011 fue para nosotros un periodo de aprendizaje y exploración. Viajamos a muchos países de Europa para encontrar practicantes locales en sitios de práctica y de aclaración de la verdad y atendiendo en muchas ocasiones espectáculos de Shen Yun en el Reino Unido, Atenas y Bratislava –fue un gran privilegio.

Mi gran despertar llegó en noviembre de 2010, en Roma, cuando asistí a la Conferencia Europea de Intercambio de Experiencias de Cultivación de Falun Dafa. La experiencia fue muy conmovedora y lloré casi todo el tiempo. Las experiencias personales de los practicantes, acerca de la tortura en los campos de trabajo forzado en China, de la recuperación de enfermedades, las experiencias de compasión... Simplemente no sabía que había personas tan increíbles en el mundo. Supe entonces que mi vida tomaría un gran cambio; tenía que intentar ayudar de algún modo, aunque sea pequeño.

En diciembre de 2010 fuimos al Fahui de Intercambio de Experiencias de cultivación de Falun Dafa de Israel, y otra vez fue increíble.

Creo cada palabra que nos dice el Maestro. Falun Dafa es amplio y profundo, las revelaciones son más allá de la descripción.

¡Gracias, Maestro! ¡Gracias, compañeros practicantes!