(Minghui.org) A través de la práctica de cultivación en Falun Dafa, debemos ser capaces de conseguir un estado en el que nuestro “ser verdadero” pueda manifestarse. Nuestro ser verdadero no tiene nociones humanas. Existiendo en el nivel más microscópico no es perceptible por los seres humanos y se manifiesta sereno. Cuando realmente podemos calmar nuestras mentes, nuestro ser verdadero será capaz de guiarnos. Porque él ha cumplido los requerimientos del Fa en diferentes niveles, puede ser muy poderoso.
Mirando desde una dimensión más microscópica, todos los elementos de la materia en la superficie de este nivel contienen gran cantidad de yeli. Cuando alguien piensa en algo, hace subir estos elementos al nivel superficial, los cuales están contaminados con yeli. Tan pronto pensamos, creamos yeli. Los pensamientos que creamos llevan nuestra imagen y nuestros mensajes; independientemente por dónde viajen, al final retornarán a nuestros propios cuerpos. Por otra parte, lo que vemos u oímos en la dimensión humana, desde la perspectiva del nivel más microscópico, todo contiene yeli.
En épocas antiguas la práctica de cultivación requería no pensar en nada, mantener un estado mental pacífico y practicar la no acción, lo que ayudaba a los cultivadores a liberarse del yeli desde el nivel superficial; a no estar contaminados y restringidos por él. Pero debido a que la cultivación de Dafa nos requiere salvar seres conscientes, mientras estemos cumpliendo nuestros votos, estamos constantemente limpiándonos a través del estudio del Fa y de cultivar activamente nuestros corazones.