(Minghui.org) Un residente de la ciudad de Kuilehe murió en 2010 mientras cumplía 4 años de prisión por negarse a renunciar a Falun Gong, disciplina espiritual que está siendo perseguida por el régimen comunista chino.
La esposa del señor Zhou Jian, la señora Tian Xiuying, presentó una denuncia criminal contra Jiang Zemin cinco años después de la muerte del marido. Sostiene que el ex dictador chino es responsable por lanzar la persecución de Falun Gong que cobró la vida de su esposo.
El hombre, de 61 años, fue blanco de la persecución que comenzó en 1999. Lo arrestaron cinco veces entre 2000 y 2002, simplemente por mantenerse firme en su fe. Cada vez que lo detuvieron fue por un lapso de 15 a 45 días.
La policía local lo detuvo nuevamente el 8 de mayo de 2007. Lo liberaron bajo libertad condicional médica 15 días después, cuando de repente, desarrolló una enfermedad cardíaca.
En enero de 2008 estuvo bajo custodia por cinco meses y luego lo sentenciaron a 4 años de prisión.
Mientras estaba en el penal de Baoanzhao, tuvo recaídas a causa de su problema cardíaco en múltiples ocasiones.
El 31 de mayo de 2010 la señora Tian iba camino a la prisión cuando recibió una llamada telefónica de un funcionario del centro penitenciario llamado Xu Jindi, que le manifestó que el hombre nuevamente había sido hospitalizado.
Zhou ya había dejado de respirar cuando la esposa llegó al hospital. Sospecha que el abuso sufrido en la cárcel y la falta de tratamiento médico adecuado, pueden haber contribuido a la muerte repentina de su marido. La prisión, sin embargo, se negó a ordenar una autopsia u ofrecer una explicación de la causa de la muerte.
Antecedentes
En 1999, Jiang Zemin, como líder del partido comunista chino, ignoró a los demás miembros del comité permanente del politburó y lanzó la violenta represión de Falun Gong.
La persecución llevó a la muerte a muchos practicantes de Falun Gong en los últimos 17 años. Más, fueron torturados por sus creencias e incluso asesinados por sus órganos. Jiang Zemin es directamente responsable de su creación y continuidad.
Bajo su dirección personal, el partido comunista chino estableció un organismo extralegal de seguridad, "la oficina 610", el 10 de junio de 1999. La organización anula a las fuerzas policiales y al sistema judicial en el cumplimiento de la directiva de Jiang con respecto a Falun Gong: arruinar su reputación, cortar sus recursos financieros y destruirlos físicamente.
La ley china permite a los ciudadanos ser demandantes en casos criminales, y muchos practicantes ahora están ejerciendo ese derecho de presentar denuncias penales contra el ex dictador.