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Fahui de China | Falun Dafa bendijo a toda mi familia

Nov. 19, 2015 |   Por un practicante de Falun Dafa en China

(Minghui.org)

¡Saludos Maestro! ¡Saludos compañeros practicantes!

Comencé a practicar Falun Dafa en 2010. He tenido muchas experiencias de cultivación a lo largo de los últimos cinco años, algunas felices y otras tristes. Me gustaría compartirlas con ustedes.

Encuentro con Falun Dafa

Desde que era pequeña, siempre tuve el fuerte sentimiento que estaba esperando algo importante. Me enviaron a un centro de detención en 2008, por algo que no había hecho. Allí encontré a un practicante de Falun Dafa. Estaba profundamente conmovida cuando me presentó la práctica. ¡Me di cuenta que Dafa era lo que había estado esperando, y el Maestro Li era el maestro que había estado buscando!

A pesar de la campaña de propaganda a nivel nacional realizada por el PCCh, no había escuchado nada negativo sobre Falun Dafa antes de ser detenida. Creí todo lo que aquella practicante me dijo. A menudo me repetía: "¡Falun Dafa es bueno! ¡Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno!”. Estaba decidida a practicar Falun Dafa.

De repente, las personas a mi alrededor comenzaron a hablar negativamente sobre Dafa. De acuerdo a ellos, Dafa causó que practicantes estuvieran en prisión. Pese a lo que dijeron, nunca vacilé. Pensé que me gustaría defender a Dafa si alguna vez iba a prisión por practicarlo.

Luego de ser liberada, no sabía dónde encontrar el libro Zhuan Falun, o dónde conocer a otros practicantes de Falun Dafa.

Un día encontré una artista en una muestra de arte. El practicante que conocí en el centro de detención la había mencionado, elogiando su noble carácter y agraciada personalidad. ¡Estaba feliz que mi relación predestinada con Dafa fuera a través suyo!

La artista me dio un DVD de la Gala de Año Nuevo del 2008. Tuve un hermoso sueño la noche que lo vi. ¡Soñé que estaba en el cielo y veía magníficos palacios dorados, hadas celestiales y una gran flor Udumbara de oro! Fue tan real que aún lo recuerdo claramente.

Le rogué a la artista una copia de Zhuan Falun. Estuvo de acuerdo. Con entusiasmo llevé el libro a casa. Era tardeen la noche del 31 de diciembre de 2009. Al momento de abrirlo, escuché la campana y los saludos por la llegada del nuevo año. Sentí la alegría por celebrar un nuevo capítulo en mi vida.

Estaba tan fascinada que continué leyéndolo al día siguiente. Me quedé dormida cuando estaba por terminarlo. Mi mente se encontraba despierta, no así mi cuerpo. Vi tres ruedas rotando sobre mi abdomen. Sus fondos eran blancos. Rotaban tan rápido como los ventiladores.

No había palabras que pudieran describir mi emoción. Supe su importancia. Era la razón de por qué vine a este mundo. ¡Parecía que lo había estado buscando vida tras vida, y finalmente lo encontré! En mi sueño, vi miles y miles de Budas solemnemente descendiendo a este mundo, con fuerte determinación. ¡Ningún lenguaje humando podría describir esta magnífica escena!

Mi padre cacheteó mi cara

Un par de meses después comencé la cultivación, mi familia intentó detenerme. ¡Era una gran prueba!

Mi padre fue siempre el pilar de mi familia. Debido a la pobre salud de mi madre, mis hermanos y yo crecimos bajo su cuidado. Era muy cercana a él, y siempre hablábamos. También era su hija favorita. Siempre me daba lo que quería, y nunca me regañaba por nada.

Por primera vez en mi vida, me retó, hasta me cacheteó, por practicar Falun Dafa. ¡Mi madre estaba de su lado también! Nadie en mi familia podía entender por qué elegí esta práctica, que estaba siendo perseguida por el PCCh.

Estaba profundamente triste e indignada por cómo me trataron. Recordé las palabras del Maestro:

“Dije que solo manteniéndose inamovibles podrían manejar todas las situaciones”

(Exponiendo el Fa en el Fahui de Canadá en 2005)

Hice lo mejor por reprimir mi resentimiento y quité todo pensamiento negativo de mi mente. Un lado mío sabía claramente que si me daba por vencida, mi familia perdería la oportunidad de la salvación. El único camino para salvarlos era transitar con valor mi camino de cultivación.

Durante el tiempo más difícil con mi familia, casi me envían a una sesión de lavado de cerebro. También restringieron mi libertad, pensando que había sido engañada porque estaba tan firme en mi cultivación. El camino que tomaron me recordó la gran revolución cultural, cuando marido y mujer, madre e hija y familiares luchaban unos con otros, y se denunciaban. Personalmente fui testigo cómo las personas que habían pasado por un lavado de cerebro por la cultura del PCCh se rehusaban a ver la verdad y no podían distinguir el bien del mal. Me sentí muy dolida. ¡Después de tantos años de amor y sacrificio por mi familia, ni siquiera tenía permitida mi libertad de creencia!

Pensé profundamente sobre esto, y decidí nunca renunciar a mi cultivación en Dafa. Planeé mudarme, sin importar que dificultades tuviera que enfrentar.

Asumiendo mi responsabilidad

Unos pocos días después que dejé mi casa, escuché que mi madre tuvo un derrame cerebral. Una de las mentiras del PCCh sobre Falun Gong era que los practicantes ignoraban a sus familias. De hecho el Maestro nos enseñó:

“En todos los ambientes hay que ser bueno y benevolente con los demás, y más aún, ¿cómo no vas a serlo con tus parientes?”. (Zhuan Falun)

Regresé a mi casa a cuidar de mi madre. Decidí contarles a mis padres que haciéndolo así, estaba siguiendo las enseñanzas del Maestro. Luego de comenzar la práctica,me convertí en una mejor persona. Las familias de los practicantes deben estar orgullosas de ellos.

Solía discutir mucho. Ahora dejo que mi rectitud hable por mí, y pongo las necesidades de los otros por delante de las mías. Como el tiempo pasó, la relación con mi familia mejoró. También hice lo mejor por ayudar a mis vecinos. Saludaba y conversaba con personas mayores, y alentaba a los jóvenes a respetar a sus padres. Tuve una gran reputación en nuestra comunidad. La gente admiraba a mis padres por haber educado a su hija tan bien. Mi padre estaba contento, pero todavía en contra que practique Falun Dafa.

Un año pasó, y la salud de mi madre mejoró mucho. Mi padre fue testigo de cómo fui menos argumentativa, pero cada vez más firme en mi cultivación.

Un día, mi padre me vino a hablar. Había transcurrido un largo tiempo desde que no conversábamos. Cuando trajo el tema de mi cultivación, no le respondí de inmediato. Pensé: “Descubrirás más sobre cómo la cultivación me convirtió en mejor persona”. Después de reflexionar por un momento, dijo: “¿No piensas que no hemos estado evaluando cada día sobre cómo tratarte? Me rendí. Puedes mudarte, pero tienes que prometer ser cuidadosa”… Asentí alegremente con la cabeza.

Mi hermano comienza la práctica

Luego de comenzar la cultivación abiertamente, mi hermano menor y su familia entraron en mi vida. La belleza de Falun Dafa los bendijo, y acogió sus corazones que habían sido envenenados por la cultura del PCCh.

Se benefició mucho de Dafa. Conoció compañeros practicantes y escuchó las historias de su práctica de cultivación. Después de tener un entendimiento más profundo de Dafa, decidió comenzar la práctica.

Debido a su gran cualidad innata, progresó más rápidamente que muchos nuevos practicantes. Solía ser terco y de mal temperamento, y también era adicto al alcohol. Fue un buen hijo y cuidó muy bien a su familia. Mis padres estaban muy felices de ver sus cambios positivos. Mi madre sonrió desde el fondo de su corazón tan pronto como nos vio. A pesar que no éramos ricos, disfrutábamos de una vida familiar muy feliz. El chino dice, una armoniosa vida familiar es la base de la prosperidad.

Cambios para mi hermano mayor y su familia

Mi hermano mayor había sido la preocupación de la familia. Cuando era joven, no tuvo mucho cuidado de mis padres como mi hermano menor y yo. Cuando creció fue adicto al juego y a menudo peleaba con nuestro padre si se sentía menospreciado. Tenía una pobre relación con él, al igual que con su esposa. Su hijo e hija vivían depresivos en una familia con deficiencias. Su hija manifestó problemas psicológicos, y se rehusaba a comunicarse con la gente. A pesar de que tenía 16 años, seguíamos preocupados que pudiera perderse al tomar sola un autobús.

Invité a mi sobrina a quedarse conmigo. Mi hermano menor y yo la alentamos mucho, y tratamos de destrabar su corazón con los principios de Falun Dafa. Finalmente se liberó de sus problemas psicológicos seis meses más tarde, y fue una feliz y extrovertida adolescente. Una vez me abrazó con fuerza y dijo: "¡Tía, otras personas piensan que no tengo una vida feliz, pero simplemente no saben lo feliz que soy!".

Ahora es muy independiente. Se hace de dinero para pagar su educación universitaria. Ya no tenemos que preocuparnos más por ella.

Mi sobrino vino a quedarse con nosotros durante el receso de verano. Influenciado por la sociedad y pobres valores familiares, pensaba que el dinero era el único camino para resolver los propios problemas. Estaba fuertemente apegado a los videojuegos. A pesar que era un chico inteligente, era muy egoísta y hostil.

Mi hermano menor y yo dábamos el ejemplo al hablar con él y le enseñamos que una buena manera de tratar a las personas era ser sincero, amable y tolerante. A menudo le contamos sobre los beneficios de Falun Dafa. Lo cuidamos y gradualmente cambió su actitud. Fue muy reacio a regresar a su casa cuando el verano terminó. Dijo: “Ya sé qué voy a hacer cuando viva aquí”. Estaba tan ocupado aprendiendo arte durante el verano que no jugó a los videos. Algunas veces mi hermano menor y yo estábamos ocupados. Él nos esperaba tranquilo porque realmente se sentía a gusto con nosotros. Esto me recordó lo que dijo el Maestro:

"¿No les he dicho que cuando una persona practica, toda la familia se beneficia? Como mínimo, el campo de energía que acarreas beneficiará a todos los miembros de tu familia, porque estás cultivando el virtuoso Fa y el benevolente y tranquilo poder que acarreas puede rectificar todos los estados anormales". (Exponiendo el Fa en el Fahui de Australia - 2 y 3 de mayo de 1999, en Sidney)

Mi hermano mayor fue testigo de los cambios positivos en su hijo cuando retornó a la casa. Tuvo una larga y amable conversación con mi hermano menor por teléfono. Admitió que había estado equivocado, y expresó su fuerte deseo de cambiar en el futuro. Quería ser un buen hijo, y buen esposo y padre. Mi hermano menor dijo estando de acuerdo: “¡Sí, gracias por la gran obra Maestro!".

El Maestro protege a toda mi familia

Muchos acontecimientos mostraron cómo toda mi familia se benefició de Dafa. El Maestro no solo cuidó de mí, sino también protegió a mis familiares de desastres.

El año pasado un gran huracán destruyó casi todos los edificios sin terminar en Hainan. La casa de mi hermano mayor estaba en el paso de la tormenta, pero un vehículo de cinco ruedas completamente cargado estaba estacionado frente a su casa bloqueando el viento. Su hogar fue el único que sobrevivió al huracán.

Mi padre accidentalmente comenzó un incendio en el bosque mientras estaba quemando césped. Mientras trataba de controlarlo, inhaló humo y tuvo una infección pulmonar. El propietario del bosque solo pidió 1.500 yuanes por el daño, viendo cuan duro mi padre había trabajado para minimizar su pérdida. Todos sabían que el resultado podía haber sido mucho peor, dada la situación peligrosa del incendio. Estábamos agradecidos que la infección pulmonar de mi padre fuera menor. ¡Estaba agradecida por la protección del Maestro!

Mi madre creyó en Dafa y en el cuidado del Maestro después del accidente de nuestro padre. Comenzó a repetir en su corazón cada día, “¡Falun Dafa es bueno!”. “¡Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno!”.

Cuando mi hermano menor les contó a nuestros padres que había comenzado a practicar Falun Dafa, mi padre primero no lo pudo aceptar. Entonces le preguntó: “¿Qué prefieres, el viejo yo o cómo soy ahora?”. Si quieres al antiguo, cambiaré ahora”. Mi padre estaba mudo. Mi madre sin ninguna duda dijo: “¡Quiero mi hijo actual!”. Mi madre, mi hermano y yo comenzamos a reír. Mi padre silenciosamente estuvo de acuerdo.

Hay tanto para compartir con mis compañeros practicantes, y tanto que informar a nuestro compasivo Maestro. ¡Gracias, Maestro, por tu cuidado! ¡Gracias, compañeros practicantes, por su ayuda! ¡No habría sido capaz de alcanzar el proceso de la  rectificación del Fa sin ustedes! ¡Es un gran honor ser un practicante de Falun Dafa!