(Minghui.org) Me mudé de otra área a mi residencia actual y comencé a practicar Falun Dafa en el noreste de China en 1997. Me mudé devuelta con mi esposo en enero de 1999 a un área remota donde viví cinco años y volví al noreste de China, mi segundo hogar, a comienzos de 2004. 

Para ese momento, la persecución estaba en pleno funcionamiento, muchos compañeros practicantes locales fueron arrojados a la prisión con duras sentencias. Los practicantes locales no habían obtenido una copia de Minghui Weekly por varios meses, tampoco los materiales de clarificación de la verdad para la gente común.

Cargando con la responsabilidad

Con la ayuda de practicantes, establecí un sitio de materiales de clarificación de la verdad en otoño de 2004. Aprendí las habilidades requeridas poco después. Mi sobrino, también practicante, me ayudó. Comenzamos a producir los Nueve Comentarios sobre el Partido Comunista a gran escala, como también otros DVDs y folletos.

A medida que entrábamos en contacto con más practicantes, la demanda de materiales creció. Recuerdo que para producir un lote de materiales necesitaba de 40 a 50 cajas de papel.

El trabajo en un sitio de producción de materiales es bastante complicado. Estaba muy ocupada cada día: visitando Minghui.org, descargando archivos, imprimiendo, ensamblando materiales, grabando DVDs, imprimiendo mensajes sobre la persecución en los billetes y distribuyendo material a otros practicantes.

En una semana normal, imprimimos 250 copias de Nueve Comentarios, 800 a 1000 folletos de aclaración de la verdad, y 70 copias de los nuevos jingwen. Teníamos que hacer todo nosotros, desde comprar suministros a reciclar papel usado y cartuchos de tinta.

Si arrestaban a practicantes, el trabajo crecía. Normalmente juntábamos información de sus familiares, exponíamos los crímenes de las autoridades lo más pronto posible en Internet, distribuíamos en tiempo y forma notificaciones, avisábamos a practicantes en otros distritos a que se unieran al esfuerzo del rescate, enviábamos pensamientos rectos estando cerca de las instalaciones de detención, y compartíamos con los practicantes inmediatamente después de que fueran liberados de detención.

Con el propósito de rescatar a los compañeros practicantes, comencé a editar los materiales locales de aclaración de la verdad en 2006. Acostumbré a trabajar hasta las 2 a.m. cada día. Durante 10 años, he llevado a hombros la compilación y producción de todo tipo de materiales de Dafa en mi área.

Sin importar que tribulaciones atravesadas, no he demorado ni una emisión de Minghui Weekly. Siempre hice que las nuevas conferencias del Maestro estén disponibles tan pronto como fuera posible para los practicantes. Mi área de distribución cubre un radio de 40 km.

A veces mi viaje entre diferentes locaciones de practicantes tomaba cinco horas por día. Persistí durante tres años y los mantuve en contacto.

Sin importar cuán ocupada estaba, ponía énfasis en estudiar el Fa y cultivarme sólidamente. Me medía según los requerimientos del Fa e intentaba mantener la calma.

Ver el estado de cultivación de practicantes arrestados también me servía como recordatorio: Usualmente aflojaban en su estudio del Fa por largo tiempo antes de ser arrestados. Se dormían en el estudio del Fa o en el envío de pensamientos rectos. Algunos pasaban mucho tiempo intentando hacer dinero. El no tener suficiente tiempo de estudiar el Fa y hacer las tres cosas los llevaba a la persecución.

Todo esto me servía de alerta de tiempo en tiempo: tenía que estudiar el Fa y cultivarme a mi mismo bien para no dejar ninguna brecha para que la maldad me arrastre hacia la persecución. Absolutamente no debía causar pérdidas a Dafa porque mi seguridad no era solo un asunto personal. Tenía que ser responsable de proveer materiales a practicantes en mi área. Tenía que ser responsable de la salvación de seres conscientes en mi área. Esta es mi misión y mi deber.

Negando la persecución

La policía allanó mi ciudad durante tres días y noches consecutivos al comienzo de abril de 2002. Más de 100 practicantes fueron arrestados. Más de 300 fueron enviados a un campo de trabajo forzado en un lapso de tres días.

Reflexioné: “Esto está más allá del sacrificio y resistencia individual. Este no es un asunto de si un individuo tiene miedo o no. Esto tiene que ver con la seguridad de un gran grupo de seres conscientes. ¿Cómo podemos entonces evitarlo y negar la persecución?”.

El nuevo libro del Maestro, Viaje por Norteamérica para Exponer el Fa, había sido publicado en ese momento. Lo estudié repetidas veces y logré muchos nuevos entendimientos.

Me di cuenta de que no debía soportar pasivamente la persecución. Si podía liberarme de la vida y la muerte y ser firme como el diamante, debía ser capaz de negar la persecución. La maldad no iba a ser capaz de dañarme.

Tres hombres policía entraron a mi casa en julio de 2003. Una practicante y su nieta estaban de visita, y una serie de casetes de lecciones del Maestro se encontraban en mi habitación. Estábamos ayudando a la niña a hacer las tareas de matemática en el living.

Dos policías ya habían entrado a mi casa cuando los noté. El tercero estaba en la puerta de mi living. Él pretendía estar hablando por teléfono y me preguntaba si se tenía que sacar sus zapatos antes de entrar a mi casa.

Mi primer pensamiento fue: “¡Nadie puede tocar nada en esta casa!”. Le hablé fuertemente con una voz severa: “¿Por qué? ¿Estás preocupado de ensuciarlo pisándolo? ¡Ustedes incluso se atrevieron a pisar la Constitución! ¿Qué hay de malo con Falun Gong? ¿Qué hay de malo con Verdad-Benevolencia-Tolerancia? ¿Qué hay de malo con la libertad de creencia?”.

Estaban estremecidos. Intentaron embarazosamente convencer a mi marido. Me despedí de los practicantes con voz normal. Ella y su nieta se fueron, y me dijo que enviaría inmediatamente pensamientos rectos para mí cuando llegara a casa.

Un policía me sonrió y apuntó a mi habitación: “Déjame echar una mirada dentro”. Respondí: “¿Tienes una orden de arresto?”. Ellos no se atrevieron a poner un pie dentro.

Otro joven policía tomó una pieza de papel arrugado y dijo: “Esta es la orden de allanamiento”. Pero no le presté atención. Los tres se fueron sin hacer nada. Por la ventana del fondo de mi habitación los vi conversando felizmente mientras se iban.

Me di cuenta de que eran felices porque no habían cometido crímenes en contra de Falun Dafa. Luego entendí lo que el Maestro quiso decir con “los pensamientos rectos de los discípulos de Dafa son poderosos” (Los pensamientos rectos de los discípulos de Dafa son poderosos de Escrituras esenciales para mayor avance II).

Más de 10 policías vinieron a mi casa en 2003 y me llevaron a la estación de policía local. Su líder me preguntó a quién conocía de la ciudad y a quién conocía de otras ciudades. Simplemente miraba al techo y enviaba pensamientos rectos: “Que me hayan traido a la estación de policía ya es humillante. No puedo compartir ni una pieza más de información”.

No era afectada sin importar lo que el oficial dijera. Me dije que tenía que alcanzar lo que el Maestro nos dijo en Viaje por Norteamérica para Exponer el Fa:

“Cuando sus acciones son rectas, el Maestro puede hacer cualquier cosa por ustedes. Si sus pensamientos rectos son realmente fuertes, si son capaces de desprenderse de la vida y la muerte, y si son sólidos e inquebrantables como diamantes, entonces esos seres perversos no se atreverán a tocarlos, porque saben que a no ser que los maten, ningún tipo de persecución funcionará contra ustedes. En ese caso, la única cosa que el mal puede hacer es dejarlos en paz”.

El hombre vio que no tenía miedo, y luego dijo: “Falun Gong es así. No dicen nada. Llévenme devuelta a la agencia y encárguense de esto”. Después supe que esta persona era la cabeza de la oficina 610 en mi ciudad.

La policía local comenzó a hacerme preguntas. Sacaron un casete de audio y dijeron que esta grabación de las conversaciones de mi teléfono serían la “evidencia”. Dije que el que llamaba era mi sobrino y condené la intervención ilegal de mi teléfono.

Fui a casa después de eso, a tiempo de cocinar el almuerzo para mi familia como lo hacía usualmente.

Tres sitios de producción de materiales en mi área fueron saboteados antes de las Olimpiadas de Beijing del 2008. Un practicante no podía soportar las torturas y proveyó información sobre más de 10 de nosotros involucrados en hacer materiales de aclaración de la verdad.

Una tarde de julio de 2008, volví a casa después de entregar material de aclaración de la verdad a practicantes. No le di mucha importancia cuando vi a un auto de policía cerca. A poco de llegar a casa, la policía vino a golpear la puerta. Luego vi tres autos de policía en el patio del complejo. Estaban verificando las identificaciones unidad por unidad.

Otro practicante estaba conmigo en ese momento. Nos sentamos en el piso y enviamos pensamientos rectos. La policía se fue después de media hora. Vinieron algunas veces más los días siguientes, pero la atmósfera de terror había desaparecido.

Supe a comienzos de agosto que la policía me había puesto en la lista de buscados. La recompensa era de 10.000 yuanes. Los practicantes me dijeron que habían visto las noticias publicadas en tal y tal lugar de la ciudad.

Sin embargo, mis pensamientos rectos se volvieron cada vez más fuertes. Supe que tales noticias fueron publicadas precisamente porque la policía no podía rastrearnos. Continué haciendo lo que debía hacer, de manera normal. Usualmente me acercaba a las instalaciones de detención local para enviar pensamientos rectos.

Mi nombre fue mencionado frecuentemente en los casos de practicantes pasando por juicios ilegales mientras yo estaba cerca de allí enviando pensamientos rectos para desintegrar a la maldad que persigue a practicantes de Dafa.

Estable en medio de los disturbios

Aunque nuestro sitio de producción de materiales parecía funcionar sin problemas, diferentes tipos de disturbios e interferencias no tardaban en aparecer. Algunos extraños golpearon la puerta; el administrador de propiedades vino por el papeleo; la policía controlaba las identificaciones… Yo simplemente enviaba pensamientos rectos a pesar de estas formas de interferencia.

Aunque podía interactuar con compañeros practicantes de manera recta y ser elocuente con mi entendimiento del Fa, seguí sintiendo una tremenda presión cuando volvía al sitio de producción de materiales. La presión en otras dimensiones era enorme.

Usé un calentador antiguo en febrero de 2009. Fui directo al baño para lavarme después de terminar los ejercicios de la mañana. Volví en cinco minutos y estuve estremecida por lo que vi: ¡mis sábanas y colchas estaban prendidas fuego! Las llamas eran muy altas; la habitación estaba llena de grueso humo. El calentador había caído en la cama.

Inmediatamente fui a buscar agua para arrojarla sobre las llamas. Envolví el calentador con sabanas mojadas. Luego, ¡encontré que el calentador todavía estaba conectado! Incluso la pared estaba negra. Me calmé y miré para adentro, ¡esto es tan peligroso! ¡No sé que podría haber pasado sin la protección del Maestro!”.

Caminé a casa después del trabajo un día de verano de 2012. De repente sentí que estaba siendo empujada por una fuerza de aproximadamente 5 metros y luego caí a la tierra. Me di cuenta que un jeep me había noqueado. ¡De nuevo, el Maestro me protegió!

El conductor quedó estupefacto. Le dije que era un practicante de Falun Dafa y que estaba bien. Me di cuenta de que mi traje blanco ni siquiera se había ensuciado. Una deuda de ye había sido resuelta con la protección del Maestro.

Distribuyendo la Verdad por toda el área

Recibí ayuda de otros practicantes en 2013 para distribuir los DVDs de Shen Yun en persona. Un compañero practicante quería hacerlo en el mercado matutino, así que me sumé. Solo llevé 50 DVDs la primera vez. Luego llevé 100 cajas cada vez. Distribuimos los DVDs a medida que introducíamos Shen Yun Performing Arts y sus espectáculos de danza clásica y música del DVD. Fue tan placentero y sagrado.

Mi sobrina vino conmigo una mañana. Nos separamos para poder cubrir a más gente. La vi distribuir los DVDs muy rápidamente. Ella estaba dentro y fuera de la muchedumbre, como una doncella celestial. Le pregunté a la vuelta: “¿Cómo es que eres capaz de hacerlo tan rápidamente?”.

Me respondió: “No pienso en otra cosa que salvar a la gente”. Me di cuenta que todavía tenía asuntos por resolver y que no era pura como ella, por lo tanto fui mas lenta.

Usualmente enviábamos pensamientos rectos cada vez que distribuíamos los DVDs de Shen Yun en el mercado. La experiencia de una de las mañanas me dejó profundamente impresionada.

La gente en el mercado vio mi gran bolsa y me preguntó qué estaba vendiendo. Bajé la bolsa y comencé a contarles sobre Shen Yun, el espectáculo de danza clásica y música tradicional china y el show número uno en el mundo, agregando que su gira mundial cubre más de 100 ciudades cada año.

La gente se juntó y me rodeó capa por capa. Decían “¡dame una, dame una!”. Se negaban a irse si no tenían todos los materiales introductorios que iban con el DVD.

Todos mis DVDs fueron llevados en menos de 15 minutos. Los cuatro habíamos traído 600 DVDs. Los distribuimos todos en menos de media hora. Por nuestros persistentes esfuerzos de aclaración de la verdad, la gente en nuestra área también había aprendido la verdad. Querían todo tipo de materiales de Falun Gong; incluso un trozo de papel con información de Falun Gong estaba bien.

Los no practicantes me ayudaban a distribuir los materiales. Agarraban múltiples copias, las difundían y venían por más.

Distribuimos los calendarios 2014 en el mismo mercado. Bajé mi mochila y dije: “¡Recuerden que Falun Dafa es bueno! ¡Beneficios milagrosos de mente y cuerpo! ¡Calendarios gratis de 2014 para buena fortuna en el Año Nuevo!”. Más de 100 calendarios desaparecieron seguida.

El joven que estaba recogiendo los impuestos de los vendedores del mercado me sonrió: “¡No bloqueen el tráfico!”. lo vi y le sonreí otra vez mientras me movía al costado de la calle.

Este mismo joven había reportado a un practicante el último año. La gente está despertando a la verdad. Tenemos que recordar mantener pensamientos muy rectos en todo momento cuando distribuimos personalmente. Los pensamientos rectos deben ser suficientes para cubrir un campo de varios cientos o miles de personas.

Durante la última mitad del 2013, pensé que nadie iba a distribuir nuestros folletos y que los practicantes estaban enfocándose en hacer dinero en vez de clarificar la verdad. Luego intenté coordinar con varios para distribuir los materiales juntos.

Pensé que solo cuatro de ellos vendrían, pero la noche que iban a salir, aparecieron ocho practicantes. Me sentí conmovida y vi mis faltas inmediatamente: Las cosas no eran como pensé –no es que los practicantes no querían distribuir materiales; ¡era que yo no había hecho un buen trabajo en la coordinación!

Distribuimos nuestros materiales de aclaración de la verdad a lo largo de 50 km. A menudo volvíamos a nuestras áreas de distribución para asegurarnos que los materiales no habían sido desperdiciados o descartados.

Conclusión

Nuestro sitio de clarificación de la verdad ha estado en operación durante 10 años sin interrupción. Se lo debemos a la compasiva protección del Maestro y a la buena cooperación entre compañeros practicantes.

Todos miramos dentro cuando los conflictos surgen. No hemos dejado ninguna brecha por largo tiempo. Cada uno cooperó bien y se elevó junto como grupo.

Avanzaremos más diligentemente y devolveremos las bendiciones del Maestro para salvar más seres conscientes, a través de pensamientos rectos y acciones rectas.

¡Gracias Maestro! ¡Gracias compañeros practicantes!