[Minghui Net]
¡Saludos, venerado Shifu! ¡Saludos, compañeros practicantes!
Soy de China continental. En mayo de 1996, cuando tenía sólo tres años, me diagnosticaron encefalitis viral (inflamación del cerebro). Me hospitalizaron, pero mi salud no mejoró. Un día, me quedé dormido mientras escuchaba las cintas con las lecciones de Shifu y, cuando desperté, mi condición había desaparecido y ya estaba bien. Después de eso, todos en mi familia comenzamos a cultivarnos.
Shifu vio mi deseo e hizo arreglos para mí
En 2011 fui admitido en una universidad de los Estados Unidos. Antes de ir al extranjero, mi familia me recordaba a menudo que, llegando allí, recordara contactar a los practicantes locales, hacer bien las tres cosas y mantenerme al día con los avances de la rectificación del Fa —cada vez que llamaba a mi familia, siempre me recordaban leer el Fa, hacer los ejercicios y participar en actividades de aclaración de la verdad, para salvar a los seres conscientes. Sin embargo, en aquel momento no estaba familiarizado con el nuevo ambiente y también tenía un fuerte apego al miedo. Ahora me doy cuenta de que eso pasaba porque no tenía suficiente fe en Shifu y en el Fa.
Mi compañero de cuarto era también un estudiante de primer año de China. Yo temía que él pudiera verme haciendo los ejercicios y, por lo tanto, raras veces hacía la práctica o leía el Fa y apenas leía las nuevas conferencias de Shifu. Solamente escuchaba las lecciones del Fa en mi teléfono y, poco a poco, me quedé fuera del Fa. Finalmente encontré en Internet la ubicación de un sitio de práctica local. Fui varias veces, pero nunca encontré a ningún practicante. Aunque había encontrado el número de teléfono para contactar al practicante que asistía el sitio local, nunca lo llamé. Temía que mis llamadas telefónicas podrían ser monitoreadas como en China.
En 2012 me cambié a otra universidad de los Estados Unidos. Talvez porque tenía el deseo de unirme a un grupo de práctica local, Shifu arregló que estudie a una universidad donde no tenía que ir muy lejos a practicar, ya que había un sitio justo en el campus. A pesar de tener una gran oportunidad, dudé una vez más. Mi corazón estaba lleno de contradicciones, y me preocupaba que mi familia en China pudiera ser perseguida si iba a practicar abiertamente en los Estados Unidos. Sin embargo, también sabía que, como un practicante de Dafa, tengo la misión de salvar a los seres conscientes.
A finales de 2013, cuando mi familia se enteró de que no había usado el tiempo extendido por Shifu para salvar a los seres conscientes de este país libre, se sintieron muy tristes. Con el apoyo de mi familia, finalmente encontré el valor para contactar a los practicantes locales.
Eliminando el apego al miedo
Aunque había decidido practicar abiertamente, aún tenía el apego al miedo. Un día, encontré en Internet un vídeo. Era un documental titulado "La onda electrónica eterna" que relataba la historia de varios practicantes de Changchun que habían interceptado la red de televisión por cable de esta ciudad en 2002, para transmitir programas de aclaración de la verdad. Ocho de los practicantes involucrados en el proyecto murieron como consecuencia de las torturas.
La última frase en el video me causó una fuerte impresión: "El 5 de marzo de 2012 es el décimo aniversario de la interceptación de la televisión en Changchun. Sólo tuvimos una pregunta para aquellos practicantes que participaron en este acontecimiento que conmovió al mundo: ¿Por qué lo hicieron? Su respuesta se puede resumir en cuatro palabras: “Se hizo para ustedes".
Después de conocer sus historias, me quedé impresionado por su altruismo. ¡Sacrificaron sus vidas, con el fin de que el pueblo chino sepa la verdad! ¿Cuán benevolente es eso? ¡Ellos son realmente grandiosos! De repente, me di cuenta de que la distancia entre sus niveles de cultivación y el mío era inmensa, y no pude contener mis lágrimas.
Sin embargo, Shifu dijo:
“No me gusta cuando se culpan a sí mismos, carece completamente de sentido. Repetiré lo que acabo de decir: si has caído, no te quedes allí tumbado, ¡levántate en seguida!”. (Exponiendo el Fa durante el Festival de la Linterna, 2003)
Tras darme cuenta de que tenía fuertes apegos al miedo y a la comodidad, decidí que, a partir de ese momento, iba a ser más diligente e iba a compensar el tiempo que había desperdiciado. Por lo tanto, me uní al grupo de estudio local todos los miércoles y domingos. También empecé a practicar los ejercicios, entregar volantes y participar en las actividades de aclaración de la verdad en nuestra universidad, cada martes.
Hay muchos estudiantes de China en nuestra universidad. La mayoría están aquí para licenciatura o posgrado y el mayor número de ellos no conoce la verdad de Dafa. Me di cuenta de que están aquí para ser salvados, y que tenemos que salvarlos.
Traté de empezar a hablar con mis compañeros y amigos. Al principio, estaba muy nervioso cuando les hablaba. Sin embargo, cuando comencé a hablar con una amiga sobre la verdad de Dafa, se emocionó mucho. Me dijo que sabía que Falun Dafa es bueno. Cuando viajó a Corea, uno de los practicantes locales le ayudó a descubrir la verdad. Entonces mi amiga también me ayudó a contarle los hechos a otro amigo a su lado. Me hicieron algunas preguntas y, después de que les contesté, estaban asombrados y dijeron: "Entonces de eso se trata".
Algún tiempo después, cuando estaba recabando firmas para una petición en contra de la sustracción forzada de órganos en China, conocí a un estudiante universitario. Era mi primer día ayudando con la petición. Le dije que la sustracción forzada de órganos a practicantes de Falun Gong está realmente sucediendo en China en este momento. Me emocioné mucho y no pude contener mis lágrimas. Él se quedó sorprendido y no podía creer que tales cosas malvadas todavía estén ocurriendo en China. Me dijo: "Firmaré".
A través de estas dos interacciones, me di cuenta de que Shifu me estaba animando para salvar seres conscientes. De hecho, sólo vamos a hablarle a la gente y el que salva a estas personas es Shifu. Nosotros sólo tenemos que cumplir con lo que Shifu nos pide, y hacer lo que debemos hacer.
El 13 de mayo, asistí a la Conferencia de Intercambio de Experiencias de Cultivación de Falun Dafa de Nueva York. Fue la primera vez que vi a nuestro Shifu en persona y me sentí muy afortunado. En China continental, hay tantos compañeros practicantes que nunca han visto a Shifu, pero son todos muy diligentes. Por lo tanto, no hay ninguna razón para aflojar en mi cultivación de ahora en adelante. Frente a Shifu, tomé una decisión: "En este nuevo entorno, haré bien las tres cosas, salvaré a los seres conscientes, asistiré a Shifu en la salvación benevolente de los demás y no defraudaré a los seres conscientes que cuentan conmigo. Debería recordar mis votos y seguir a Shifu de vuelta a mi verdadero hogar".
El 14 de mayo, me uní al desfile con todos los otros practicantes que habían participado en la conferencia de intercambio de experiencias. Mientras caminaba en el desfile, me sentí enormemente orgulloso. Quería que todo el mundo sepa que "¡Falun Dafa es bueno!" y "¡Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno!". Todos los que tienen conciencia en este mundo deben reconocer la maldad del partido comunista chino (PCCh) y ayudarnos a detener inmediatamente la persecución.
La cultivación es seria
Cuando vine a los Estados Unidos, mis apegos al miedo y a la comodidad y muchos otros apegos, me hicieron mantenerme lejos del Fa. Raras veces hacía las tres cosas. Cada vez que me encontraba con una prueba o me sentía ofendido, no miraba hacia adentro o pensaba primero en los demás. Por el contrario, siempre intentaba buscar excusas para mí. Cuando perdía por algún interés material, me volvía frustrado. Me olvidé por completo que “si algo te pertenece, no lo perderás, y si algo no es tuyo, no vendrá por más que luches”. (Zhuan Falun, Lección Séptima)
Me doy cuenta de que nos estamos cultivando. Cuando vemos a otras personas haciendo algo malo, tenemos que usarlos como espejos y pensar si hemos hecho lo mismo. Además, tenemos que preguntarnos por qué hemos visto estas cosas. ¿Es porque hay algo que debemos cultivar?
Mi mayor apego son mis calificaciones en la escuela. Solía pensar que, mientras obtuviera buenas calificaciones, sería capaz de encontrar un buen trabajo y vivir una vida maravillosa. Sin embargo, esa mentalidad me hizo olvidar por completo mis deseos antes de que saliera al extranjero, y ni siquiera me di cuenta de que era un gran apego. Mi familia siempre me dijo que "Estudiando bien se consigue un buen trabajo" es lo que nos enseñó el PCCh.
Shifu nos dice en Zhuan Falun:
“En la religión budista se habla sobre la retribución del yeli; ellos arreglan tu vida según tu yeli; no importa cuán capaz eres, si no tienes de, posiblemente no tengas nada en esta vida. Tú ves que él no sabe hacer nada, pero él tiene gran de, entonces es un alto funcionario o le llega una gran fortuna”. (Lección Séptima)
Shifu dijo también:
“El hombre suele considerar que las cosas que uno mismo persigue son todas buenas, pero, en realidad, viéndolo desde un nivel alto, son todas para satisfacer esos pocos beneficios inmediatos entre la gente común. En la religión se dice que no importa cuánto dinero tengas o cuán alta sea tu posición, esto es sólo por algunas décadas, pues cuando naces no puedes traer nada y al morir no puedes llevar nada”. (Zhuan Falun, Lección Cuarta)
Shifu ha mencionado muchas veces en las lecciones que la cultivación es muy seria. Sin embargo, yo no entendí realmente lo que significaba esto. En la conferencia publicada recientemente, "Enseñando el Fa en el Día Mundial de Falun Dafa", Shifu enfatiza este problema otra vez:
“Ustedes han pasado el periodo más difícil, les digo a los Dafa dizi del periodo temprano, aquellos que han atado el destino conmigo, o que han venido siguiendo a Shifu, cada uno cuenta, si quisieran hacer algo en la sociedad humana, cada uno sería un multimillonario, cada uno sería famoso en esta sociedad, cada uno sería gente de alto nivel. En esta vida han venido para ser Dafa dizi, han abandonado todo eso. Si quisieran hacer fortuna, hace tiempo ya habrían hecho fortuna. No destruyan más el deseo de tu vida por un poco de beneficio”.
Sí, somos muy afortunados de ser practicantes de Dafa. Para convertirnos en practicantes, rechazamos todas esas cosas, entonces ¿para qué tener esos apegos? Debería estar determinado a hacer lo que le corresponde a un discípulo de Dafa, escuchar a nuestro Shifu y seguir el camino que Shifu arregló para mí.
Mientras escribo este artículo para compartir mis experiencias de cultivación, he descubierto muchos apegos que pensé que ya había eliminado, pero todavía los tengo. Ya que descubrí estos malos apegos, estoy decidido en eliminarlos por completo.
Me gustaría agradecerle a Shifu por permitirme aprender Dafa y ser un discípulo de Dafa del período de la rectificación del Fa. Gracias a los compañeros practicantes por animarme cuando estuve dudando, por recordarme y compartir conmigo; y gracias a mis compañeros practicantes locales por su apoyo y confianza, que me ayudaron mucho cuando me uní al grupo.
Shifu ha sufrido demasiado por nosotros. Sólo podemos ser más diligentes y no defraudar a Shifu en la salvación benevolente de los seres conscientes.
Por favor señalen amablemente si hay algo inapropiado. Heshi.
(Compartida en la Conferencia de Intercambio de Experiencias de Cultivación de Falun Dafa del Centro de los Estados Unidos, en 2014)