[Minghui Net] ¡Saludos Shifu, saludos practicantes!
Estoy escribiendo para compartir mi entendimiento y experiencias ayudando con la promoción de Shen Yun.
Cuando recuerdo el periodo de dos meses que estuve en el centro comercial para vender entradas de Shen Yun, me doy cuenta de que cada punto de venta es en realidad una ventana para salvar seres conscientes y una plataforma para que los practicantes se cultiven. Todas las diferentes tipos de personas y diferentes cosas que hemos encontrado en el centro comercial son oportunidades para que nosotros los practicantes mejoremos nuestro xinxing.
Librándome del apego a la ostentación
Un día, vendí 19 entradas en el shopping. Cuando llegué a casa le dije a mi cuñada no practicante, mientras limpiaba: “¡Vendí 19 entradas hoy!”. Ella contestó sin expresión: “¿Merece eso estar tan contento? ¿Acaso no estabas ahí para vender entradas? Sería raro que no vendieras entradas”. Le dije: “Vendí 19 entradas en un día, y siento que vendí tantas; por eso estoy contento”. Luego ella contestó: “Deberías pensar así: si no hubieras estado ahí hoy, otra persona estaba, seguramente ella hubiera vendido 19 entradas también, o tal vez más que tú. ¿Por qué estás tan complacido?” Las palabras de mi cuñada fueron como un palo en la cabeza, y me desperté. Mi apego a ostentar y de exultación eran tan fuertes, y Shifu me lo estaba recordando a través de la boca de mi cuñada. Vender entradas en el shopping es para asistir a Shifu a rectificar el Fa y salvar seres conscientes; deberíamos mantener un corazón puro. Todo es hecho por el Fashen de Shifu. Cuando tenemos un corazón puro, el Fashen de Shifu traerá a las personas con relación predestinada a nuestro puesto para comprar entradas. ¿Cómo puedo estar complacido y ostentar? Luego de eso, mi corazón ya no se movía con la cantidad de entradas que vendía.
Cultivando compasión mientras vendo las entradas
Encontré toda clase de personas en el shopping. A menudo, juzgaba a las personas con la mentalidad de una persona común. Por ejemplo, me gustaba juzgar a la gente basado en cómo se vestían; entonces hacía mi propio juicio de cuán ricos eran basado en eso. Luego decidía si la gente podía o no comprar entradas con esa mentalidad. Un día un cliente vestido muy casualmente vino a nuestro puesto y miró el tráiler en la TV. Después que un practicante le presentó el show, él empezó a mirar el libro de Shen Yun cuidadosamente una página tras otra. En ese momento tuve un pensamiento. ¿Tendría que decirle algo más? Luego tuve otro pensamiento; el otro practicante ya le había hablado bastante. No parecía tener mucho dinero. Supuse que no compraría entradas aún si le gustaba el show. Concluí que no necesitaba decirle nada más, y que siguiera leyendo el libro solo.
Después de terminar de ver el libro, me pidió el mapa de las ubicaciones y los precios. Dijo que compraría dos entradas para sus padres. Le pregunté por qué no compraba una más y así acompañaba a sus padres a ver el show. Dijo que nunca había visto unos colores tan brillantes y hermosos y que la melodía de Shen Yun lo había conmovido profundamente hasta el alma. Me mostró que se le había puesto la piel de gallina. Dijo que el show debía ser algo especial: “Mis padres tienen más de 80 años de edad, así que no sé cuántos años más estarán en este mundo. Quiero que ellos vean el show primero, pero mi situación financiera es limitada. Esperaré a que mis padres lo vean y me cuenten cuán bello es después que lo vean. Luego yo iré el año que viene”. Mientras lo ayudaba a escoger los asientos, no podía retener mis lágrimas. Me culpé a mí mismo por mis pensamientos previos, sintiéndome apenado por mi apego a juzgar a otros, y estaba muy conmovido por su respeto a Shen Yun. Después que compró las entradas, dejó su correo electrónico y teléfono de contacto, recordándome que le avisara cuando Shen Yun regresara el año que viene. Cuando se fue, no podía dejar de derramar lágrimas.
Mientras leía a la mañana siguiente, el Fa de Shifu sobre la compasión me conmovió profundamente:
“hablo de la misericordia, que es un tipo de característica de los dioses rectos. No es que querer hacer algo bueno ya es misericordia; recién haces algo cuando te gusta por capricho, eso no es misericordia, eso se origina de tus gustos personales. Hablando más bajo, es un apego. La misericordia verdadera no tiene adentro ningún corazón egoísta; no importa a quién, a los seres conscientes, se los debe mirar con pensamientos rectos, a todos con benevolencia”. (Qué es un Dafa dizi)
Cuando Shifu difundió Dafa en los primeros años, Shifu nos sacó del infierno y nos limpió; nunca sintió aversión por nosotros, ni nos evitó. Hoy, estamos ayudando a Shifu a rectificar el Fa y salvar seres conscientes, ¿cómo podemos escoger los seres conscientes? No deberíamos bloquear la salvación de seres conscientes con nuestros pensamientos humanos. Por otro lado, he visto la compasión y paz de otros practicantes de Canadá que vinieron a ayudar. Una era una practicante nueva de Canadá que obtuvo el Fa en 2009. Cuando estaba ayudando con la venta en el shopping, siempre presentaba Shen Yun a todos, sin importar qué tipo de apariencia tenían y sin importar sin compraban o no entradas. Esto me conmovió enormemente.
Purificándome a mí mismo mientras vendo entradas
Los corazones puros de los practicantes de Canadá también me conmovieron. Me di cuenta profundamente que cuanto más puro es mi corazón, más fuerte el campo de energía que se forma alrededor de mí y las imágenes y música en la TV, y más gente con relación predestinada con el Fa vendrán a comprar entradas. Las personas que vienen a comprar las entradas todas tienen relaciones predestinadas, pero no son necesariamente ricas. Shifu dijo en Enseñando el Fa en la conferencia de Suiza”
“Como mencioné anteriormente, cuando hablas a otros pensando en tu propio interés, deseando cambiarlos o persuadirlos, sin importar qué razonables sean tus palabras, otras personas tendrán dificultad aceptándolo por completo, ni tampoco podrán las palabras conmover el corazón de la gente. ¿Por qué? Déjenme que les diga: en realidad es debido a que las palabras que dices llevan todos tus pensamientos. Todas tus frases llevan pensamientos complicados, tales como tus diversos sentimientos y deseos entre la gente común, e incluso tus numerosos apegos. Esto hace que tus palabras no sean muy poderosas y que estén bastante dispersas. Además, uno frecuentemente mantiene su propio punto de vista al decirles algo a otros, lo cual quizás no se ajuste al Fa del universo, por lo tanto, en este aspecto, carece del poder de la Verdad. Adicionalmente, al hablar con otros, uno también añade cosas para protegerse a sí mismo para evitar ser herido, es decir, la intención detrás de tus palabras ya no es pura, como resultado, las palabras habladas se vuelven sumamente frívolas. Pero cuando tu mente es realmente capaz de alcanzar la tranquilidad, cuando tus apegos se vuelvan cada vez menos o cuando los pensamientos que te distraen se vuelvan cada vez menos, encontrarás que tus palabras tienen poder. ¿Por qué es que cuando les hablé del wuwei mencioné que ustedes no deben interferir a la ligera con cosas en las que no se debe interferir? Es precisamente porque tus palabras ya empiezan a tener poder y palabras con poder pueden cambiar a la gente. Sea que parezca correcto o incorrecto que cambies a alguien, puede que estés haciendo algo malo. Ya que lo que tus ojos ven es la superficie y no puedes percibir la relación predestinada del pasado, no sabes la verdad. Tu mente se volverá cada vez más pura conforme alcances niveles más altos, lo que tus pensamientos produzcan y lo que digas será sumamente limpio. Cuanto más limpios y simples sean, tanto más se ajustarán a los principios de ese nivel del universo. Las palabras que dices pueden instantáneamente penetrar el corazón de la gente, impactar lo profundo de los pensamientos de la gente y tocar la parte más microscópica de sus vidas. Díganme, ¡¿cuán grande es su poder?! Por lo tanto, la habilidad de volverse tranquilo es un reflejo de haber alcanzado cierto reino”. (Exponiendo el Fa en el Fahui de Suiza)
Dejemos nuestras preferencias personales, eliminemos nuestras distracciones, y mantengamos un corazón puro para salvar seres conscientes presentando Shen Yun a todas las personas con relación predestinada. Recuerdo muchos clientes que compraron entradas el año pasado. Cuando los vi en el shopping, podía reconocerlos entre la multitud. Aún me acordaba de su dirección y profesión e incluso de qué asientos compraron. Algunos de ellos compraron entradas para el show de este año después de que los reconocí.
Tomando el diseño de los avisos con seriedad
Este año, la cantidad de trabajo para diseñar los avisos de nuestra área fue enorme. Había tantos periódicos diferentes y tantas diferentes versiones. Además, el coordinador tenía tantos requisitos para el diseño de los avisos, muy detallados. Sin embargo, soy del tipo que no le gusta usar la cabeza para entrar en demasiados detalles. Siempre fui de pensar que solo necesitábamos agregar la información local al diseño que Shen Yun nos daba. En realidad, era la pereza la que me bloqueaba, y yo intentaba evitar las molestias. Entonces cuando el coordinador me decía que tenía que cambiar esto o aquello y que no tenía otra opción más que seguir sus directivas y satisfacer sus requisitos, lo hice, pero con sentimientos muy fuertes de infelicidad. Una vez que un aviso salió en un periódico, el coordinador descubrió que el número de teléfono para comprar entradas estaba mal. Me llamó y me pidió que lo corrigiera; no me culpó a mí, sino que se echaba la culpa a él. Varios miles de periódicos se imprimieron así. Esto no podía ser la culpa de una sola persona. Ese día estaba muy molesto conmigo mismo y me culpaba diciéndome en mi corazón: “¿cómo pude haber hecho el diseño del aviso de Shen Yun con mi mal humor? Esto ha causado grandes pérdidas”. Luego intenté calmarme y me dije: “Tengo que tratar el diseño de Shen Yun más seriamente, imprimirles energía positiva a los lectores, y hacer que compren entradas después que vean el aviso”. Después de esta lección, cada vez que el coordinador me pedía que modificara el diseño, intentaba entender su pensamiento. Especialmente el diseño del aviso de tapa, ya que Shen Yun solo nos daba una versión de la tapa. Pero el coordinador me pidió que cambiara todo el contenido de la página. Tuve que usar mi cabeza para pensar qué cosas tenía que cambiar y qué fotos usar. Me tenía que calmar y leer cuidadosamente el calendario de Shen Yun y cooperar con el coordinador para crear un nuevo diseño para cada tapa. A través de la cooperación con el coordinador, entendí que nunca tengo que negar las ideas de otros con mis propias nociones.
Shen Yun 2013 está llegando. Hagamos que cada uno de nosotros atesore esta oportunidad preciosa, despertemos a los seres conscientes, y cumplamos con nuestro voto histórico.