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La fe de una abuela y el poder curativo de Dafa

Oct. 16, 2014 |   Por un practicante de Falun Dafa en Toronto, Canadá

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Una mañana, la Sra. Li me llamó desde su casa y me dijo que se había caído de una silla y se había roto el brazo. Le dije que mantuviera pensamientos rectos. Llegué una hora después, y ya la habían hospitalizado y tenía una cirugía pendiente.

Hablé sobre la situación con Li y luego de reflexionar me dijo: "Cuando estaba en China, fui torturada en un campo de trabajo forzado y terminé mal herida. Me recuperé rápidamente luego que me dejaron ir a casa. Fue la decisión de mi hijo esta vez el enviarme al hospital".

Tan pronto llegó su hijo al hospital y me vio a mí  y a otros practicantes gritó: "¡Dejen a mi madre en paz!".

Vimos lo que estaba sucediendo y comenzamos a enviar pensamientos rectos.

Le pregunté si sería feliz si su madre lo forzara a hacer algo. Al comienzo no entendió mi punto de vista. Le clarifiqué la situación: "¿Por qué forzaste a tu madre a hacer algo que no quería hacer?

La Sra. Li dijo: "Cuando quedé paralizada, pude pararme en siete días sin ninguna medicina porque practico Falun Dafa".

Puede ser que sea mejor que reconsideres su punto de vista y respetes sus deseos. Entiendo totalmente que tus acciones surgen de la veneración filial y el desear lo mejor para tu madre, pero puede que sea apropiado para ti que consideres otra forma para ayudarla".

Me preguntó cómo y le dije: "Le ayudaría si pudieras decir una frase de corazón". Dijo: "¿Que frase? ¿Falun Dafa es bueno?". Le dije: "Sí, dilo un par de veces más", y lo hizo.

Su sobrina llegó y dijo: "La abuela tiene una fractura conminuta en su brazo y necesita ser amputado". Él se dio la vuelta y me preguntó: "¿Ahora qué?". Le dije: "Escucha a tu madre". Le dijo a su sobrina: "Sigamos los deseos de tu abuela".

La Sra. Li dejó el hospital una hora después con un yeso. Se lo quitó rápidamente tan pronto llegó a la casa.

Regresó al hospital un mes después para un chequeo. Un doctor examinó su brazo y dijo: "Parece que tus huesos han crecido de vuelta". Luego que la Sra. Li le contó su historia y sobre su práctica de Falun Dafa, el doctor sorprendido dijo: "¡Wow, Falun Dafa es genial!".