[Minghui Net] Desde niña, siempre aparentaba ser educada en la superficie pero dentro era irascible. Mientras nadie me ofendía, estaba tranquila y relajada. Sin embargo, si alguien me ofendía, me comportaba irracionalmente.
Cuando mi hijo tenía sólo 8 meses de edad, mi suegra dijo algo que me molestó enormemente. Me llevé al niño y corrí a la casa de mi madre, donde permanecí durante casi dos años. Mi esposo y su madre vinieron a verme y me pidieron que vuelva, pero les di la espalda. Mi suegra de ochenta años de edad se fue llorando.
Trabajaba en la oficina del gobierno local. Mucha gente me admiraba y, por lo tanto, sentía que era mejor que la mayoría de la gente. Por ser oficiales, siempre nos invitaban a comer gratis. Mi comportamiento empeoraba con cada día que pasaba, a la par con el ambiente podrido del trabajo.
Afortunadamente, en 1998, después de un año de haberme mudado con mi hijo a la casa de mi madre, empecé a practicar Falun Gong y mi vida cambió.
Mejorando mi vida
En la primavera de 1998, junto con mi madre visitamos a un pariente. Este pariente describió las hermosas escenas que vio en otras dimensiones después de que empezó a practicar Falun Gong. Al ver su expresión emocionada, me conmoví mucho. Regresando a casa, comencé a leer Zhuan Falun. Mientras más leía, más quería leer, así que leí sin parar. Era una maravillosa sensación, difícil de describir. Me di cuenta en qué me había convertido y que me había deslizado hacia abajo, como el ambiente, en general.
Shifu dijo:
"...hay algunos que aún se juzgan a sí mismos con el estándar moral caído y se consideran mejores que otros; esto es porque incluso el criterio para evaluar ha sufrido cambios". (Lección Primera, Zhuan Falun)
A partir de aquel momento, me esforcé mucho en trabajar diligentemente. Ayudé a mis compañeros de trabajo cuando se confrontaron con dificultades. Traté amablemente a mis clientes y les ayudé a resolver sus problemas. Sentí que me estaba volviendo cada vez más pura. Si alguien me hacía "regalos", se los daba a mi jefe. Mi comportamiento tuvo un impacto positivo y algunos de mis compañeros de trabajo también comenzaron a leer Zhuan Falun.
A principios de 1999, salí con mi hijo de la casa de mi madre y me mudé con mis suegros. Si surgía algún conflicto, podía resolverlo basándome en los principios del Fa. Traté a los ancianos con respeto. Nuestra familia vivía feliz.
Comienza la persecución
La persecución comenzó el 20 de julio de 1999. Mis supervisores me pidieron que renuncie a la práctica de Falun Gong. Les dije: "Falun Gong me purifica y me eleva desde adentro". Mis supervisores siguieron hablando conmigo, pero me negué a renunciar. Mis compañeros de trabajo vieron mi firme creencia y algunos incluso comenzaron a leer Zhuan Falun. Ulteriormente mi jefe dejó de tratar de impedirme practicar Falun Gong.
Sin embargo, mientras se difundían rumores y calumnias acerca de Falun Gong, mi familia comenzó a distanciarse de mí. Al final del 2000, fui a la Plaza Tiananmen llevando un cartel para aclarar la verdad. Me arrestaron junto a varios practicantes y nos llevaron a un centro de detención en algún lugar en Beijing.
Para protestar por este secuestro ilegal me negué a comer durante ocho días y me enviaron al campo local de trabajo forzado. Al principio, me negué a colaborar con los guardias y no acepté vestir el uniforme de prisión o memorizar sus reglamentos. Me golpearon con picanas eléctricas. Me dieron de comer un alimento líquido a la fuerza, con un tubo que me metieron por la nariz y no me permitieron dormir ni usar el baño. Cada día, me rodeaba un círculo de personas que calumniaban a Shifu y a Dafa.
Yendo en la dirección equivocada
En final cedí y comencé a caminar en la dirección equivocada.
Mi esposo usó sus conexiones para pedir prestado mucho dinero y me sacó del campo de trabajo forzado. También contactó a mi jefe para que me permita recuperar mi trabajo. Después de regresar a mi casa, escondí mi dolor y viví la vida de la gente común.
Tan pronto como mi familia acumuló algo de ahorros, empecé a vestir y comer bien. Compré todo tipo de mercancías para cuidar mi salud, mucha ropa para vestir mejor y maquillaje muy caro para embellecerme. También aconsejé a mi esposo que use el coche de su trabajo para asuntos de familia.
Estaba especialmente apegada a las calificaciones de mi hijo en la escuela. Llevé a mi hijo para que asista a todo tipo de clases extra. Incluso andábamos en taxis para atenderlas. Debido a mi actitud dura, mi hijo llegó a ser reservado y no se atrevía a hablar. Si mi hijo no conseguía buenas calificaciones o no se portaba como yo quería, le gritaba.
Cada vez que me sentía infeliz, me portaba irracionalmente. Peleaba con los clientes y la gente común. Más tarde, empecé a decir cosas malas acerca de la gente, a sus espaldas, en el trabajo.
Siempre me sentía muy cansada y mi salud comenzó a deteriorarse. Generalmente trabajaba hasta las 10 de la mañana y luego tenía tanto sueño que no podía mantener los ojos abiertos. Tenía más arrugas y más canas. Apareció una bola en mi pecho y desarrollé un problema en el cuello.
Shifu me salvó después de que casi me arruino
Aunque me había alejado mucho del camino de la cultivación, Shifu no me abandonó. Al final del 2008, algunas personas me enseñaron una copia de Zhuan Falun y algunos de sus libros. Leí esto y aquello, pero aun así escogí Zhuan Falun.
Del 2001 al 2008: habían pasado siete años. Cuando leí Zhuan Falun otra vez, me sentí muy conmovida. Dejé de relacionarme con las personas que habían renunciado a la práctica y encontré a un compañero y también a parientes practicantes. Ellos me ayudaron mucho. Después de ver muchos DVDs de clarificación de la verdad, no me pude controlar y comencé a llorar. Decidí dejar de comportarme mal. Me di cuenta que necesitaba cultivarme y seguir a Shifu para volver a casa.
Empecé a leer mucho y terminé de leer todas las conferencias de Shifu antes del 20 de julio. Me di cuenta de que antes no me había cultivado verdaderamente. No me había cambiado verdaderamente desde adentro y no me había comportado de acuerdo con el Fa. Comencé a usar el Fa de Shifu para guiar mi cultivación y para corregir mi comportamiento. Hice bien mis deberes domésticos y traté mejor a mis suegros. Cuidé bien de mi hijo e hice bien mi trabajo. Viendo mi mejoría, mi marido también cambió. Él solía amenazarme, diciendo que haría pedazos mis libros pero después dejó de intervenir cuando practicaba en la casa.
Los compañeros practicantes fueron muy amables y siguieron dándome consejos y hablando conmigo. Comencé a darme cuenta que era muy importante estudiar las conferencias que Shifu enseñó después del 20 de julio.
Shifu dijo:
"Si no tomas acción para salvar seres conscientes, no habrás cumplido tu responsabilidad como Dafa dizi y tu cultivación equivale a cero, ya que no se te permite ser Dafa dizi para tu propia perfección es que cargas con una misión monumental". (Enseñando el Fa en el Fahui Internacional de Washington DC 2009)
Desperté completamente. Me di cuenta de la importancia de hacer bien las tres cosas. Después de esto, comencé haciendo lo que debe hacer un Dafa dizi de la rectificación del Fa, en lugar de sólo cultivarme.
Cómo mejoré mientras estuve salvando a la gente
Aprendí de otros compañeros practicantes cómo clarificar la verdad a la gente cara a cara. Pero, porque había estudiado el Fa menos y debido a mi estado inestable de cultivación, cuando empecé a hablar con la gente, se asustaban y huían. Así que intenté un enfoque diferente y comencé a distribuir folletos en los buzones. La primera vez, fui a dejar folletos a los edificios residenciales. En cuanto llegué, me apuré y arrojé los folletos dentro de los buzones. Mi corazón latía fuertemente, mis piernas temblaban y no me podía controlar. Luego, estudiando mucho el Fa y compartiendo con los compañeros practicantes, comencé a entender gradualmente que repartir folletos es una forma de salvar a la gente y que nosotros no deberíamos ser perseguidos.
Poco a poco vencí mi apego al miedo y Shifu eliminó muchas cosas malas para mí. Cuando no pude tranquilizar mi mente, me acordé las palabras de Shifu: "¿acaso no sabes que estás salvando a la gente?" (Los Dafa dizi tienen que estudiar el Fa - 16 de julio de 2011 - Washington DC).
Con la guía de Dafa, estuve mejorando en repartir folletos.
Cuando les expliqué los hechos acerca de Dafa a mis familiares, encontré muchos obstáculos. La familia de mi suegra es muy grande. Cuando fui perseguida, ellos también fueron afectados emocionalmente. Les dije cómo persigue el partido comunista chino (PCCh) a Falun Gong, pero se asustaron y no quisieron escuchar. Incluso destrozaron los folletos que les di. Mi esposo me insultó y aún me pegó. Entre veinte a treinta personas en mi familia me estuvieron evitando. Les escribí cartas, les di DVD's de Shen Yun, los 9 comentarios sobre el Partido Comunista y otros artículos. Finalmente, varios de ellos reconocieron que lo que dije era cierto y renunciaron al partido y a sus organizaciones afiliadas.
En una ocasión, comí con ellos. Estaban hablando sobre lo que les había sucedido a los políticos Wang Lijun y Bo Xilai, pero lo que habían escuchado ellos era totalmente falso y estaban repitiendo las mentiras del PCCh. Les dije cómo Wang llevó documentos secretos sobre Bo al consulado de los Estados Unidos, qué documentos entregó y otras cosas. Todos escucharon con impaciencia, asintiendo con la cabeza y comentaron que lo que dije tenía sentido. Entonces les dije: "Los documentos incluyen pruebas que Bo Xilai participó en la sustracción forzada de órganos de los practicantes vivos de Falun Gong". Al escuchar esto, todos se quedaron callados. Más tarde, una de mis tías que es cristiana me dijo: "Puedes seguir con tu práctica y nosotros no nos vamos a oponer". Ahora todos los miembros de mi familia apoyan en silencio mi práctica.
Ha sido muy difícil abrir la boca para aclararles la verdad sobre Dafa a mis compañeros de trabajo. Muchos sólo habían oído las mentiras del PCCh sobre Falun Gong. Comencé hablando con los que tenían una buena relación conmigo. Después de hablar muchas veces, entendieron lo que estaba diciendo. Una vez me caí por las escaleras y ellos fueron testigos. Mi barbilla se hinchó de inmediato y me lastimé los brazos y piernas. En aquel momento tuve un sólo pensamiento: "Estoy bien".
Shifu dijo:
"Decimos que lo bueno o lo malo vienen de un pensamiento de la persona, y la diferencia de este pensamiento también trae distintas consecuencias". (Zhuan Falun - Lección Cuarta)
Inmediatamente me levanté y caminé. Mis compañeros de trabajo vieron mi cara y tuvieron miedo. Me pidieron que vaya al hospital. Les dije que estaba bien y luego caminé hasta el baño para lavarme la cara con agua fría. La sangre seguía fluyendo. Dije que dejaría de sangrar el día siguiente. Volviendo a casa, hice los cinco ejercicios y, al día siguiente, la herida había sanado parcialmente. Una semana más tarde había sanado completamente. Por lo tanto, todos fueron testigos de un milagro de Dafa. Uno de mis compañeros de trabajo me pidió una copia de Zhuan Falun para leerla.
Otra compañera de trabajo tenía un hermano mayor que, de repente, no se podía mover. Le dijo que recite "Falun Dafa es bueno" y también le contó mi incidente milagroso y las cosas milagrosas que ocurren después de que la gente dice "Falun Dafa es bueno". Su hermano le creyó y dijo en voz alta: "Falun Dafa es bueno". Mientras más lo decía, mejor se sentía. Estaba tan feliz que incluso escribió varios poemas para alabar a Falun Gong. Estos sucesos me alentaron enormemente. Unos días más tarde el hermano y su esposa comenzaron a estudiar Zhuan Falun. Su esposa estaba enferma. No podía mover su cuerpo entero, pero estaba todavía lúcida. Al día siguiente, la condición de su esposa mejoró enormemente. Cada vez que le leía Zhuan Falun en voz alta, su esposa sonreía.
Les di DVD's de Shen Yun a mis compañeros de trabajo y les dije que era un show con hermosos paisajes y danza tradicional y que Shen Yun se presenta en todo el mundo. Aceptaron los DVD's encantados pero sus reacciones después de verlos fueron variadas. Algunos elogiaron el espectáculo y otros me trataron con frialdad. Para aquellos que no entendieron, seguí clarificándoles la verdad o les escribí cartas.
A veces sentía que todo el mundo me estaba despreciando, así que miré hacia adentro y me di cuenta que tenía el apego de defender mi imagen o evitar la vergüenza. Me gustaba ser aceptada por todos y también tenía otras nociones. Tan pronto como identifiqué esas nociones y las eliminé, el ambiente cambió y pude repartir los DVD's de Shen Yun más fácilmente no sólo a mis compañeros de trabajo, sino también a los clientes. Shifu arregló que encuentre a las personas con relaciones predestinadas.
Esta es la primera vez he escrito un artículo. Si hay algo que no está de acuerdo al Fa, por favor no duden en señalarlo. ¡Heshi!
Versión en inglés: http://en.minghui.org/html/articles/2014/1/11/144297.html