[Minghui Net] Nota de los editores: Tanto en la cultura occidental como en la china, el principio de la retribución del yeli (karma), es decir, responder por las acciones de uno, es ampliamente aceptado. La enseñanza fundamental de Falun Gong es la característica del universo, “Verdad-Compasión-Tolerancia”. El universo recompensará las acciones que están en armonía con este principio, mientras que las acciones como golpear, torturar y asesinar a personas producirán retribución del yeli. Dicho de otro modo, los actos buenos serán recompensados con el bien, mientras que los actos malos recibirán la retribución debida. Los artículos como éste tienen el sentido de ser un recordatorio compasivo de este principio para aquellos que cometen fechorías. Mientras muchos de los que persiguen a Falun Gong están meramente “cumpliendo órdenes”, la ley universal requiere que ellos también se responsabilicen de sus acciones, y que únicamente cambiando el curso de sus malas acciones podrán escapar de la retribución.
Desde que el partido comunista chino comenzó a perseguir a Falun Gong en julio de 1999, mucha gente, por su deseo de cuidar de sus propios intereses egoístas, cometió graves crímenes contra los practicantes. El principio de que el bien es recompensado y el mal sufre castigo existe y muchas de estas personas se han encontrado con retribución, y a veces sus actos malos implicaron a sus familias.
Un ejemplo es Sun Jianli, quien nació en 1952 en la aldea de Qiaotou, Rongcheng, ciudad de Weihai, provincia de Shandong. Se mudó a la aldea de Beigela en 1984, y comenzó a operar una cantera de piedras. El negocio prosperó, y pronto se convirtió en un hombre rico y construyó casas en la aldea.
El hijo mayor de Sun sufría de epilepsia, y la familia hizo lo imposible para ocultar la enfermedad. Sin embargo, después de casarse, la epilepsia regresó y su esposa lo dejó. El hijo de Sun no pudo soportar este golpe y se hundió en una gran depresión. Fumaba en la casa y estaba siempre en un letargo. Un día dejó caer una colilla de cigarrillo en la alfombra y causó un gran incendio.
Después que la persecución a Falun Gong empezó, el PCCh lanzó una campaña de difamación para engañar a la gente e incitar el odio hacia la práctica. Las autoridades colectaban cualquier calumnia o noticias inventadas para usarlas contra Falun Gong. Sun fue elegido por los funcionarios locales para difamar a Falun Gong en público. A pesar de que nadie en la familia de Sun practicaba Falun Gong, los funcionarios le dijeron: “Dile a todos que Falun Gong causó que tu hijo se volviera y prendiera fuego a la casa”.
Sun sabía que esto era una mentira, pero para proteger sus intereses personales, hizo lo que las autoridades le pidieron. Sin embargo, sus vecinos, sabían la verdad. Viéndolo mentir en la TV, todos dijeron con un suspiro: “Sun se encontrará con su debida retribución por las mentiras”.
Poco después de que Sun habló por TV, su esposa se divorció de él. Su hijo mayor murió, y su hija menor rompió todos sus lazos afectivos con él. Luego Sun tuvo una enfermedad al hígado y murió en mayo del 2013.