[Minghui Net]
Una audiencia especial sobre la sustracción de órganos a personas estando aún vivas, fue organizada en el parlamento británico el pasado 29 de abril de 2013, por iniciativa de los la ONG “Doctors Against Forced Organ Harvesting” (Médicos contra la sustracción forzada de órganos), para denunciar los crímenes de la sustracción de órganos en China y discutir acerca de los esfuerzos de la sociedad internacional para el desarrollo de procedimientos legales para acabar con este crimen. Las partes interesadas animaron al gobierno británico a seguir los buenos ejemplos de Australia y de los gobiernos estadounidense e israelí, para adoptar un enfoque activo y poner fin a este crimen inhumano. Diputados de todos los partidos, asistentes políticos y estratégicos, representantes gubernamentales y activistas de derechos humanos asistieron al evento.
Cinco invitados especiales fueron los anfitriones de “Tomando acciones concretas para detener la sustracción forzada de órganos.
Hubo cinco exponentes invitados especialmente a la audiencia: David Kilgour ex secretario de Estado (Asia-Pacífico) de Canadá y miembro del Parlamento; David Matas, prestigioso abogado canadiense de DDHH (su discurso fue presentado por alguien en su nombre); Ethan Gutmann, un periodista de investigación con sede en Londres; el Dr. Huige Li, miembro de DAFOH en Alemania y Anne Yang una practicante china de Falun Gong quien sobrevivió a torturas sin precedentes en una prisión de China. Con evidentes pruebas recabadas sólidamente durante muchos años de investigaciones, expusieron cómo el régimen chino persigue y tortura a practicantes de Falun Gong, cómo masacra a practicantes de Falun Gong a gran escala y cómo se beneficia de un sistema de trasplante de órganos robados.
Durante la sesión de preguntas y respuestas, en un animado debate los diputados se comprometieron a la vez que el público pedía más detalles sobre este crimen. Luego los expositores dieron su opinión sobre las medidas detalladas que podrían ser tomadas para detener este crimen, a saber: poner obstáculos jurídicos como Israel impidiendo a los británicos ir a China para trasplante de órganos; prohibir a los autores de tales crímenes entrar en el Reino Unido añadiendo la pregunta: ¿Has estado implicado en los trasplantes forzados de órganos? en los formularios de inmigración, como así se ha hecho en los Estados Unidos; inspirarse en el gobierno australiano y negarse a entrenar a médicos chinos en el área de trasplantes. Por otro lado, el comité tocó el tema de las investigaciones sobre productos importados fabricados en los campos de trabajo forzado chinos.
La mayoría de las preguntas planteadas durante la presentación y posteriormente, giró en torno al mismo tema: Cómo detener los crímenes de la sustracción de órganos sobre presos de conciencia de Falun Gong por el régimen chino.
La organizadora de la audiencia: "Esto es un genocidio, el gobierno británico no puede ignorar este problema"
Sra. Ingrid Cranfiled, parlamentaria de Enfield, presentó la sesión.
La diputada de Enfield, Ingrid Cranfield, presidía la sesión. Dijo, que en particular debido a sus orígenes judíos, comprendía que la persecución y la tortura a los practicantes de Falun Gong por el régimen chino era realmente un genocidio y reafirmó su opinión de que el gobierno británico no puede dejar que esos crímenes se produzcan dondequiera que sea.
A lo largo del debate, la Sra. Cranfield destacó que la persecución a los practicantes de Falun Gong, en particular el crimen de la sustracción de órganos por el régimen chino no era nada más que un signo típico de genocidio: “Es una cuestión de derechos humanos y tiene muchas características en común con el genocidio y los asesinatos en masa en otros países del mundo. Primero convierten a estas personas en sus enemigos, o los consideran como una amenaza y no los trata más como seres humanos, utilizando para ello una campaña propagandística. Y claro, si no los considera seres humanos, no hay problema en matarlos ¿verdad?".
Después de la reunión, la Sra. Cranfield declaró en una entrevista que no tenía ninguna duda sobre la realidad de este crimen y que sabiendo lo que el régimen chino ha hecho en otras partes del mundo, se sabe que es capaz de todo.
La Sra. Cranfield, que estaba también impresionada por los esfuerzos que el gobierno israelí y australiano hicieron para detener estos crímenes, hizo un pedido al gobierno británico para cambiar su actitud pasiva con respecto a este problema y empezar a tomar medidas. Subrayó que poco importaba que las medidas fueran grandes o pequeñas, pero que las medidas deben ser tomadas, e incluso, hacer algo pequeño es mejor que no hacer nada. En cuanto a un plan de acción detallado, estuvo de acuerdo con uno de los ponentes invitados, quien sugirió al inicio de la audiencia, establecer un comité especial entre partidos, por ejemplo, un Comité para Falun Gong o un Comité para la sustracción de órganos a personas estando aún vivas.
Un diputado: Esta audiencia es un primer paso
El diputado laborista Andy Slaughter entrevistado después del seminario.
A pesar de su apretada agenda, el diputado laborista Andy Slaughter, llegó a la audiencia por invitación de un cierto número de sus electores. Más tarde en el momento de la entrevista, expresó su horror frente al crimen expuesto por los expositores. Admitió haber oído hablar sobre la sustracción de órganos a personas vivas en China, pero jamás pensó que estos crímenes se producían a una escala grande y que por consiguiente, no puede ser ignorado. “Creo que lo que se tiene que anotar en el tema que se ha tratado hoy, es el gran alcance que tiene esta práctica, no estamos hablando de algo que ha ocurrido en una o dos ocasiones o de un tráfico criminal, se trata de una empresa controlada por el estado, por lo tanto es otro nivel", manifestó.
El Sr. Slaughter señaló la importancia de sensibilizar al público sobre la utilización ética de órganos y de desarrollar una educación médica ética y pública: “Evidentemente, algo como los trasplantes forzados de órganos, sin hablar del asesinato de la persona cuyo órgano ha sido sustraído, sería claramente un crimen muy grave en el Reino Unido. Pero si la gente puede ir al extranjero y obtener injertos que provienen de esta fuente, aunque no lo sepan y vuelvan al Reino Unido, entonces está claro que es algo por lo cual debemos interesarnos. Primero porque es un crimen muy grave, es un crimen contra la humanidad, es una forma de tortura, es pues algo que va más allá de la jurisdicción del Reino Unido".
Para el Sr. Slaughter, esta audiencia es un primer paso para el Reino Unido, para poner fin al crimen de la sustracción de órganos a personas vivas por el régimen chino. “Realmente es el primer paso para aumentar la conciencia de los votantes que pueden hablar y asegurarse que los diputados planteen este problema con nuestro propio gobierno. Esta cuestión va claramente más allá del propio gobierno británico, pero evidentemente es importante que el Ministerio de Asuntos Exteriores y el Ministerio del interior estén presentes aquí en términos de acciones criminales y tomen en serio el problema, sólo de esta manera se puede hacer algo".
Un activista de derechos humanos: Los criminales deben ser demandados ante la justicia
Paul Barasi, activista de derechos humanos hizo uso de la palabra en el seminario.
Paul Barasi, ex miembro parlamentario elegido dos veces y activista de derechos humanos hizo uso de la palabra en el seminario. Dijo que la razón por la cual asistía a esta reunión era para pedir al gobierno británico que tome medidas para detener el crimen de la sustracción de órganos a personas estando aún vivas llevado a cabo por el régimen chino. Porque actualmente el gobierno no ha hecho lo suficiente, declaró: “Creo que no sólo se trata de realizar reuniones, se trata de realmente hacer algo, como convocar a los gobiernos occidentales, incluido el gobierno británico para hacer algo".
El Sr. Barasi ha pedido también una acción legal contra los autores de este crimen, diciendo: “¡Sabemos lo que está sucediendo y esto debe acabar! Esto no debería haber sucedido nunca y una vez que los responsables sean detenidos, lo que debe hacerse por consiguiente, es declararlos jurídicamente responsables".
Tras este encuentro, David Kilgour, Ethan Gutmann y representantes de DAFOH, viajarán al norte de Inglaterra. En su siguiente parada en Leeds, presentarán de nuevo las pruebas del crimen inhumano del régimen chino, a los electores locales y a los responsables gubernamentales.