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Me curé de leucemia en siete días

(Provincia Shandong)

Vivo en la localidad de Lidao, Rongcheng, provincia de Shangdong. Un día del pasado marzo me sentí muy indispuesto, me dolían hasta los huesos. Me acerqué hasta un pequeño hospital local y me dijeron que había algo que no iba bien en mi sangre. Me aconsejaron que fuera al hospital del condado para que me hicieran un análisis de sangre. En el hospital del condado me diagnosticaron leucemia. Me quedé anonadado, la leucemia es un tipo de cáncer, además incurable.

Mi familia entera se sentía consternada, y simplemente no podíamos creer que fuera verdad. Decidimos pedir una segunda opinión y fuimos al hospital 404 en Weihai. Estábamos deseando que pudieran probar que el diagnóstico anterior era erróneo, pero los resultados fueron los mismos. Perdimos toda esperanza.

En el hospital de Weihai nos dijeron que tenían la cura. Gastamos 50,000 yuanes en tratamientos, pero mi estado no mejoró. El dolor era insoportable y me quedé postrado en la cama. Tan solo esperaba morir.

Cuando miraba a mi hijo de siete años, me sentía muy afligido. Llorábamos mucho. Parecía que esta era la única manera de lidiar con nuestro dolor.

Dos de mis tías practicantes de Falun Gong, vinieron a visitarme. Dijeron: “La única manera de que te mejores es practicando Falun Gong. Ahora solo el Shifu Li puede salvarte. Si quieres vivir, toma en serio la práctica de Falun Gong”. ¿Qué tengo que perder? Mis tías me dejaron un reproductor de MP3 para que pudiera escuchar las lecciones de Shifu, y me enseñaron los ejercicios.

Milagrosamente, me recuperé en siete días. Dos meses han pasado y me encuentro saludable. Mi rostro está luminoso, y me veo bien.

Le agradezco a Shifu Li por salvar mi vida. Ahora, mi familia entera practica Falun Gong. Los vecinos fueron testigos del milagro cuando empecé a practicar Falun Gong y le comentan a todos los que se encuentran lo que me pasó. Dicen: “¡Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno!”.

Un hombre recupera la salud

(Chengdu, provincia de Sichuan) Tengo un pariente de 50 años, que el pasado verano se emborrachó una noche, y se cayó. Se rompió la pierna derecha y terminó en el hospital ortopédico del condado. Allí, empezó a echar espuma por la boca y a tener convulsiones. Luego le llevaron al hospital del condado. En el momento en que llegó allí, estaba en un estado crítico. Los médicos le tomaron una tomografía y encontraron que tenía una obstrucción en el  cerebro. Se desmayó, pero fue reanimado. 

Al día siguiente, le enviaron de nuevo al hospital ortopédico para que le trataran su pierna rota. Sin embargo, el hospital se negó a recibirlo o a tratarlo. Le forzaron a que se fuera.

Cuando escuché acerca de lo que le estaba pasando, fui al hospital y le dije que recitara: “¡Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno!”.

De camino al hospital de la provincia, empezó a tener convulsiones de nuevo. Le recordé que recitara “¡Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno!” y también le dije que solo Falun Dafa podía salvarlo. Gradualmente se calmó. Cuando llegamos al hospital, le hicieron un examen completo. Tenía una pierna rota, necesitaba una cirugía para la obstrucción en el cerebro, y tenía el estómago hinchado por acumulación de líquidos.

Los especialistas consultaron a la familia y le dijeron que el paciente se encontraba en una situación crítica y que debía ser enviado a la UCI inmediatamente. Los familiares estaban preocupados porque había estado desempleado durante mucho tiempo y solo tenía trabajos temporales. No tenía ningún seguro médico. Ellos no eran ricos y no podían pagar los gastos médicos. Si era enviado a la UCI, podían perder ambos, el dinero y a él.

Su familia no estaba de acuerdo con que le ingresaran a la UCI y le pidieron al médico que le enyesaran la pierna y le permitieran volver a casa. El médico les pidió que pensaran sobre la decisión cuidadosamente. No había ninguna garantía de que no se paralizara incluso con un yeso, y podía morir de camino a casa una vez que fuera dado de alta del hospital.

Cuando llegó a casa recordó: “!Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno!”, recitaba esto con frecuencia. Cada día iba mejorando. Después de un tiempo, las obstrucciones de la cabeza desaparecieron y también la hinchazón del estómago, y su pierna rota, sanó. Ahora puede caminar bien.

Mis parientes saben de la bondad de Falun Dafa. Por la compasión de Shifu Li, mi pariente recuperó su salud.