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Cuando el partido comunista chino (pcch) inició la persecución a Falun Dafa, mi hija se encontraba estudiando en la secundaria. Las mentiras y la difamación constante a Falun Dafa por parte de sus profesores hizo que no leyera Zhuan Falun. Sin embargo, le enseñé los principios de Falun Dafa y cómo aplicarlos a su vida diaria. Le dije que no evitara hacer sus tareas de la escuela aun cuando otros estudiantes lo hacían; le pedía que fuera temprano a la escuela para ayudar a limpiar la nieve en los días de invierno; ayudar a limpiar el salón el primer día de clase; respetar la propiedad pública como si fuera suya; no evitar sus deberes y ayudar a los demás; y estudiar con mucho esfuerzo.
A través de estudiar Zhuan Falun, me di cuenta que algunas de las malas tendencias en la sociedad habían tenido una influencia negativa en ella. No podía concentrarse en sus estudios. Cuando le hablaba, si se presentaba la oportunidad, compartía con ella lo que había aprendido de Falun Dafa y le explicaba la diferencia entre lo bueno y lo malo. Un día me preguntó: “¿Mamá cómo es que sabes tanto?”. Le respondí: “No es que yo sepa mucho. Hay mucho más que aprender en Zhuan Falun y lo que te he dicho es sólo lo que yo he podido entender. Deberías tomarte el tiempo de leer el libro, puedes aprender más que yo y tener más sabiduría”.
Gradualmente y con mi ayuda, pudo ser capaz de estudiar con mucho esfuerzo. Estaba dispuesta a ayudar a los demás y donar sus ahorros para una buena causa. Era simpática y considerada. Cuando se graduó de la escuela secundaria, fue al mejor liceo en el condado. Hasta su profesor estaba sorprendido que le había ido tan bien.
Cuando estaba en el liceo, un día fui llevada a un campo de trabajo forzado debido a mi creencia en Falun Dafa. Desde allá le escribía para motivarla y consolarla. Luego que fui liberada, era monitoreada constantemente y no podía salir a clarificar los hechos. Ella asumió esta tarea. Un día vino a la casa y me dijo: “La gente llama a los practicantes de Falun Gong 'Las Madres de Tiananmen” y aquellos que saben la verdad sobre la persecución los respetan mucho”. También se tomó el tiempo para leer Zhuan Falun y los Nueve Comentarios sobre el Partido Comunista.
En estos años recientes, nos ha ayudado a enviar artículos al sitio web Minghui, publicar declaraciones de gente que renuncia al PCCh y a hacer DVDs de Shen Yun.
Cuando presentó el examen de admisión a la universidad, contenía preguntas que difamaban a Falun Dafa, pero ella no las respondió. Cuando sus compañeros de clase le preguntaron si estaba preocupada porque su profesor quería hablar con ella, les respondió: “El profesor no estaba allí cuando sucedió la auto inmolación en Tiananmen. Él no sabe a ciencia cierta qué fue lo que sucedió verdaderamente”.
Luego de graduarse de la universidad, encontró un trabajo en una compañía gerenciada por una persona de Hong Kong. Se llevaba bien con los otros empleados y nunca tomó nada que no fuera suyo. Uno de los familiares de su jefe siempre le causaba problemas. Pero ella pudo enfrentar los conflictos con un corazón tranquilo y resolverlos pacíficamente.
Su jefe se conmovió con su comportamiento y le preguntó: “¿Cómo es que eres tan diferente de otras personas jóvenes hoy en día?” Ella dijo: “Lo aprendí de mi madre”. Entonces su jefe le preguntó: “¿Qué es lo que hace tu madre? Quisiera conocerla cuando esté aquí”. Ella dijo: “Mi madre es un granjero común que practica Falun Dafa”. Su jefe dijo: “Por favor traeme un libro de Falun Dafa, quiero leerlo”. Cuando regresó a casa y me contó la historia, le di una copia de Zhuan Falun para que se la diera a su jefe.
Estoy muy feliz que mi hija ha podido validar Falun Dafa y que gracias a esto su jefe fue salvado.