[Minghui Net] En tan solo unos días del año 2013, han surgido múltiples informes de funcionarios del partido comunista chino cometiendo suicidio. El 8 de enero, Qi Xiaolin, subjefe del departamento de policía de la ciudad de Guangzhou, se colgó. La noche del 9 de enero, Zhang Wanxiong, vicepresidente de la corte del distrito de Liangzhou en la ciudad de Wuwie, provincia de Gansu, saltó de un sexto piso del edificio de la corte. Su cuerpo no fue encontrado hasta el día siguiente. La policía reporta que se encontró una nota con él. Si uno mira cuidadosamente los hechos, parece evidente que los suicidios están relacionados al inminente cierre del sistema de trabajo forzado del PCCh (laogai), y a la inmensurable deuda de sangre que el sistema judicial del PCCh debe a Falun Gong
Los ciudadanos promedio no deben saber, pero los funcionarios del PCCh saben bien que su sistema de trabajo forzado es ilegal; aún más la persecución a Falun Gong. El sistema judicial del PCCh ha violado la ley conscientemente para poder llevar a cabo la persecución a Falun Gong, y los secretos oscuros y deuda de sangre que le debe a Falun Gong son alarmantes para decir algo mínimo. Todos esos funcionarios que se han involucrado en la persecución a Falun Gong, lo hicieron con la mentalidad de un apostador. Saben que tan pronto como los secretos oscuros se revelen, la ley no los perdonará cuando la justicia les caiga encima.
La ley puede proteger la vida de la gente, incluyendo a los oficiales que hacen cumplir la ley. Uno que sigue la ley, no comete crímenes, así que no hay necesidad de que expíe por sus crímenes. No obstante el presuntuoso PCCh inclina la ley a su voluntad, apilando deudas sobre montañas de deudas por crímenes mientras pisotea caballerosamente la ley. Cuando llega el momento de ajustar las cuentas ¿quién puede cargar estas graves consecuencias?
Escuché un viejo dicho que mi madre a menudo decía: “Cuando el hombre está a punto de morir, es cuando está más ansioso por vivir”. Tengo un corazón pesado hacia aquellos que cometieron suicidio porque el Maestro Li nos dijo: “Cometer suicidio es un pecado”. (Enseñando el Fa durante el Festival de la Linterna 2003). Sin importar qué piensen aquellos que mantienen una visión ateísta, una persona no puede esquivar la responsabilidad por medio de quitarse la vida. Cometer suicidio encima de haber cometido todos esos crímenes horrorosos solo agrega deudas pecaminosas, las cuales, como yo lo veo, serán arregladas en el Infierno.
Las vidas de aquellos que cometieron suicidio no pueden traerse de vuelta. Aquí me gustaría decirles a otros funcionarios del PCCh que estén pensando en cometer suicidio: ¡No se quiten la vida! ¡No agreguen otro pecado encima de todos los demás pecados cometidos! La vida es preciosa. El que más merece ser castigado es Jiang Zemin. Si uno está pensando en cometer suicidio, es evidencia que esta persona aún tiene algo de consciencia. Hagan uso de esa consciencia para hacer público lo que saben de los secretos oscuros del PCCh en la persecución a Falun Gong. Expíen sus pecados con actos de bondad y arrepentimiento, y ayuden a los practicantes de Falun Gong que aún están siendo perseguidos. Los dioses y fo son misericordiosos: ayudarán a aquellos que se desviaron y quieren regresar al camino de la rectitud. Solo aquellos que son demasiado testarudos en cambiar su mente terminarán siendo el chivo expiatorio del PCCh.
Si algunos piensan que al cometer suicidio, está dejando riqueza a su familia, piensen dos veces. ¿Qué clase de vida llevarán vuestros seres queridos con el dinero que tú conseguiste ilegalmente y al costo de tu vida? ¿No estarían ellos viviendo de tu cuerpo? ¿Piensas que sus corazones estarán en paz? No tomen decisiones tontas. La expiación, no el suicidio, es la única salida.