[Minghui Net] Cuando el PCCh lanzó abiertamente su persecución a Falun Gong en julio de 1999, yo era coordinador de la Sub-división de Falun Gong en la Asociación de Qigong local. Inmediatamente me convertí en un objetivo principal y fui arrestado ilegalmente. Trancurrido medio mes de mi encarcelamiento en el centro de detención, la policía le ordenó a mi empresa que me retiren y que continúen intentando transformarme en el trabajo. Poco después de ser liberado, el Vicesecretario del comité de asuntos legales y políticos (CALP) de mi empresa me dijo: “Acaba de llegar un grupo de investigación y el cabecilla quiere conversar contigo. El es un oficial de alto rango al nivel de vice ministro, y te sugiero que aproveches esta oportunidad para limpiarte, de otro modo tu futuro será nefasto.
Tuve una larga charla con este cabecilla, un señor de casi 70 años. Me hizo muchas preguntas acerca de Dafa y de la cultivación, y le di respuestas satisfactorias. Abajo transcribo las cuestiones mas significativas que compartí con él.
Verdad, Compasión, Tolerancia ayudan a mejorar la salud física y mental
Nací de padres campesinos que trabajaron lo más duro posible para poder llevar a sus hijos a la escuela. Luego de graduarme de la universidad yo mismo obtuve un buen trabajo, sin depender de conexiones o dinero. Mis capacidades hicieron que rápidamente obtenga muchas promociones, primero como supervisor y luego como oficial de medio rango. También me casé y tuve una hija adorable.
Justo cuando estaba saboreando el éxito de mi carrera, las extensas horas que invertí en mi trabajo se llevaron una cuota de mi salud. Desarrollé anemia aplásica, y pronto contraje Hepatitis-B en una transfusión de sangre. Todos los hospitales que visité me dijeron que no tenía esperanzas, y que mi familia debería prepararse para lo peor. Desesperado, acudí a la medicina tradicional china, y parecía mejorar luego de tomar cuantiosos remedios herbales. Sin embargo, a medida que el tiempo pasaba, tuve más y más complicaciones y tuve que tomar mas medicinas para calmar mi dolor.
Un día de mediados de septiembre de 1994, me topé con un folleto introductorio de Falun Gong. Me atrajeron profundamente los tres principios, Verdad, Benevolencia, Tolerancia, y pronto comencé a cultivarme. Medio mes después mi esposa preguntó por qué ya no me veía tomando píldoras. Me retraje al principio y luego dije sin pensar: “Si, creo que tienes razón. Bueno, como ya no tuve malestares me olvidé de tomar mis píldoras”. De hecho, no he tomado más medicamentos desde que comencé a practicar Falun Gong. Siguiendo los principios de Verdad, Benevolencia, Tolerancia en cada aspecto de mi vida, rápidamente me despojé de mi mal temperamento y gané una nueva perspectiva de la vida. El mejoramiento de mi xinxing provocó enormes cambios en mi mente y en mi cuerpo.
Años atrás cuando sufría por mis enfermedades, no podía realizar ningún trabajo físico. Tenía que descansar por lo menos dos veces para subir hasta mi departamento en el sexto piso todos los días. Poco después de comenzar mi cultivación, comencé a subir corriendo hasta arriba como una brisa sin perder mi aliento. Al cabo de tres meses de practicar, mi unidad de trabajo le otorgó a cada empleado 50 Jin (25 Kg) de arroz y yo me ofrecí para entregarles el arroz a diez personas de mi oficina. Todos vivían en pisos altos de departamentos, y subí fácilmente las escaleras cargando las bolsas de arroz. Todas las enfermedades que me acosaron por tantos años desaparecieron sin rastro. No podría describir con palabras cómo me sentí al estar libre de enfermedades y cuán agradecido estaba hacia el Maestro por permitirme darme cuenta del verdadero significado de la vida. Me decidí seguir a Dafa para cultivarme, sin importar qué sucediera en el camino.
El líder de investigación interrumpió mis palabras, preguntando: “¿Podrías decir que tus enfermedades se diagnosticaron incorrectamente?”. Yo le dije que esa pregunta era válida, pero que era imposible que toda mi familia haya estado mal diagnosticada, dado que sus problemas de salud también desaparecieron luego de comenzar a practicar Falun Gong. Le conté que mi madre sufría de artritis, migrañas y problemas pulmonares; probablemente ella no estaría con vida si no hubiese comenzado esta práctica milagrosa. Más aún, mi padre, que tenía trombosis cerebral, mi hermana menor cuya familia entera sufría de hepatitis B, y mi esposa que tenía un tumor intrauterino, todos se curaron luego de comenzar Falun Gong.
El admitió que Falun Gong parecía ser muy efectivo en cuanto a la curación de enfermedades y el mejoramiento de la salud. Entonces le conté un par de experiencias reales de otros practicantes. En los primeros dos años de mi práctica, otro practicante y yo nos ofrecimos voluntariamente para enseñar los ejercicios en un sitio de práctica grupal. Un día vino una señora de mediana edad, así que nosotros demostrábamos los ejercicios y ella nos seguía. Cuando llegamos al tercer ejercicio, me di cuenta que su mano derecha siempre se detenía cuando llegaba a la altura de su cara. Ya que el ejercicio requiere que uno lleve el brazo hasta arriba, sostuve su mano e intenté estirarla hasta arriba. Ella pegó un grito y todo su cuerpo se echó hacia atrás para que evitar que haga esto. Le pregunté que sucedía, y ella me dijo que su brazo derecho había estado así por más de doce años; hasta tenía que usar el brazo izquierdo para cepillarse el pelo todos los días. Dudaba jamás poder hacer el tercer ejercicio correctamente. La motivé para que haga todo lo que pueda y estuvo de acuerdo. Al tercer día, cuando hacíamos el tercer ejercicio, ella gritó sorpresivamente: “¿Quién está levantando mi brazo?”. Todos miraron fijamente a su brazo derecho, que estaba extendido arriba de su cabeza. Varias personas se conmovieron tanto que derramaron lágrimas. A ella también le corrían las lágrimas por su rostro. Luego conocí a una señora mayor que había estado legalmente ciega por 40 años, sin embargo recobró su vista luego de un año de practicar la cultivación.
Falun Dafa me libera de las mentiras del ateísmo
Siempre me pregunté cuál sería el significado de la vida y como es que los espíritus animales pueden poseer a un cuerpo humano. Si los seres humanos ciertamente evolucionaron de los monos, ¿por qué nunca se ha visto a un híbrido mitad humano mitad mono a lo largo del proceso de evolución? Luego de comenzar mi cultivación, todas estas preguntas que parecían imposibles de responder, ya dejaron de intrigarme, porque encontré las respuestas en Zhuan Falun. A menos de una semana de práctica, sentí que algo giraba en mi entrecejo y dentro de mi abdomen. Esta sensación se hacía más fuerte de noche. Intenté tocar la rueda giratoria, pero mis manos no podían sentir nada. Tenía miedo de haberme desviado, entonces fui a verificarlo con un practicante veterano, quien había sido el exsecretario del partido de mi oficina.
Antes él sufría de un severo problema cardíaco que lo obligaba a descansar luego de un par de pasos, pero su dolencia desapareció luego de participar del seminario del Maestro por primera vez. Y, animado por esta experiencia, asistió a otros tres seminarios más. Él me dijo: “Será que tienes una gran relación predestinada con Dafa. Por más que no hayas asistido a los seminarios del Maestro, ya has obtenido un Falun”. Yo me preguntaba quién podría darme un Falun si Shifu no estaba cerca, y él me dijo que eran los Fashen del Maestro. Le pregunté entonces por qué era que yo nunca había visto al Fashen del Maestro, y me dijo que los Fashen existen en otra dimensión. Yo no tenía idea acerca de dónde podrían estar estas otras dimensiones, y él me explicó que los Fashen existen en otras dimensiones que coexisten con nuestra dimensión material; de este modo solo podemos sentir a los Fashen pero no podemos tocarlos. Luego de leer Zhuan Falun varias veces, tuve un entendimiento más profundo acerca de cómo existen los Dioses y Budas, y el motivo por el cual no podemos verlos.
El cabecilla del equipo de investigación me preguntó qué significaba “abrir el tercer ojo”. Le conté acerca de la idea equivocada de “ver es creer” que tenía antes de cultivarme. Cuando comencé a practicar, me di cuenta de que los ojos carnales realmente eran obstáculos que no nos permitían ver a los seres y sustancias más microscópicas. Aunque mi tercer ojo estaba cerrado, le presté atención a lo que decían otros practicantes con el tercer ojo abierto que habían visto en otras dimensiones. La cuestión era que los no practicantes, engañados por el ateísmo, no creían en la existencia de otras dimensiones porque no podían ver más allá de este mundo material. Tal tipo de descreencia intensificaba el bloqueo del tercer ojo impidiendo que pueda abrirse. Como resultado, se les hacía más difícil creer en la existencia de otras dimensiones.
Falun Dafa me conduce a convertirme en una persona considerada
El cabecilla del equipo de investigación me preguntó por qué, después de practicar, me rehusé a obtener un departamento que me habían asignado. Yo le dije: “De hecho, la cuestión no era que yo no necesitaba ese departamento, sino que nuestro Maestro nos enseña a ser buenas personas. Muchos empleados querían departamentos más grandes y estaban usando todas sus posibles conexiones para poder obtener uno. Aunque mi departamento de un sexto piso era bastante moderado en cuanto a tamaño y tenía un par de goteras, me di cuenta que algunos colegas mayores tenían mayores necesidades que yo, y sus hijos casados aún vivían en el mismo espacio pequeño junto con ellos. Consulté con mi esposa, que también es practicante, acerca de entregarle el departamento asignado para mí a otra persona y ella estuvo de acuerdo. Mi jefe me pidió que lo piense dos veces y me advirtió para que no me arrepienta después, y le aseguré que estaría bien”.
Cuando concluimos nuestra conversación, el cabecilla del equipo de investigación me tomó las manos diciendo: “Me beneficié enormemente de nuestra conversación hoy. Espero que puedas persistir en tu cultivación, y te deseo éxito para que pronto alcances la perfección”.