[Minghui Net] Vivía en una pequeña aldea cercana a un pueblo con solamente unas 100 familias. Antes de 2004 éramos muy pobres, y muchos hombres no tenían solvencia económica para contraer matrimonio. En 2004 los aldeanos se aliaron con bondad para rescatar a los practicantes de Falun Dafa. Desde esa fecha nuestro pueblo mejoró.
El 3 de junio de 2003 la policía local nos detuvo a mi esposo y a mi debido a nuestra firme creencia en Falun Dafa. Nos llevaron al centro de detención local. Me declaré en huelga de hambre durante 37 días, fui liberada y regresé a casa. La oficina de policía de la ciudad condenó a mi esposo a tres años de trabajos forzados, utilizando pruebas falsificadas. En ese momento, uno de nuestros hijos estaba en el colegio. Nos convirtieron en personas sin hogar y tuvimos que renunciar a la agricultura y buscar otra manera de ganarnos la vida. En ese tiempo, todo el pueblo, incluyendo mis familiares fueron engañados por las mentiras del partido comunista chino (PCCh). No podían entender lo que estaban haciendo los practicantes, incluso se opusieron a ellos.
Los practicantes locales y yo formamos un cuerpo, constantemente mejoramos nuestra comprensión del Fa y cooperamos bien entre nosotros. Fuimos a las autoridades locales para esclarecer la verdad y pedimos la liberación de mi marido. Nuestros esfuerzos en rescatarlo fueron interferidos por funcionarios de la oficina 610 local. Ellos dijeron: "que los practicantes no eran buena gente. Y por eso los detuvieron". Me preguntaba: "¿cómo podríamos revelar las mentiras y poder salvar los seres que habían sido engañados?". Se me ocurrió una idea: "que todos en nuestro pueblo firmaran un documento como testigos de nuestros grandes cambios después de comenzar a practicar Falun Dafa. Verían claramente si éramos buena gente o no. No es el malvado PCCh el que tiene la última palabra. También aclararíamos la verdad de Falun Gong a la gente mientras les pedíamos que firmaran el documento. De este modo, ellos podrían elegir su propio futuro".
Una vez segura de que esta sería la manera de hacerlo, compartí el plan con los compañeros practicantes. Todos estuvieron de acuerdo conmigo. Mi hijo menor y yo íbamos de puerta a puerta y les pedíamos a todos firmar el papel después de aclararles la verdad sobre Falun Gong. Más del 90% de las personas firmaron el documento.
Debido a la cooperación de los practicantes como un cuerpo y el apoyo de los aldeanos locales, mi esposo fue liberado en octubre de 2005, fecha anterior a la de su liberación.
En los años siguientes este pequeño pueblo experimentó grandes cambios. En el pasado, los hombres rara vez se casaban durante el año, pero ahora era muy diferente. Los anteriormente no podían darse el lujo de iniciar una familia comenzaron a casarse uno tras otro. Además, nuestro nivel de vida mejoró mucho. Mientras que en otros pueblos experimentaban pérdidas de cosechas, nuestro pueblo tuvo un aumento en los cultivos, algo que nunca había sucedido antes.
Hay una familia en la aldea con tres hijos y todos saben que Falun Dafa es bueno. Durante los tiempos de persecución, ellos protegieron y sostuvieron a practicantes. Todos fueron recompensados con bendiciones. Es cierto que los dioses traen paz y felicidad a quienes apoyan a Dafa.
Durante los últimos 13 años, los practicantes han sufrido una persecución sin precedentes del PCCh. Sin embargo, ellos persistieron en el esclarecimiento de los hechos sobre Falun Gong para que los que no son practicantes puedan conocer la verdad y ser salvados. Esto es en realidad el verdadero objetivo de los practicantes.
Nos encontramos con diferentes tipos de personas. Por ejemplo, en el otoño de 2006, cuando regresé a mi ciudad natal, me encontré con un anciano que tenía más de 70 años, en la tienda de peluquería de mi hermana menor. Después de obtener su corte de pelo, se sentó en el kang (una plataforma para dormir hecha tradicionalmente de ladrillos u otras formas de barro) y comenzó a conversar conmigo. Me dijo que él había encontrado muchas cosas curiosas. Yo le conté los hechos sobre Falun Dafa y le pedí que tuviera en cuenta "Falun Dafa es bueno" y "Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno". Le dije que esto le proporcionaría una buena salud y bendiciones futuras. Él estaba muy feliz y dijo: "Me encontré con algo realmente bueno hoy". Me pidió que le anotara las nueve palabras así él podría pedir a otras personas que se las leyeran en caso de olvidarlas.
Pedí a mi hermana una tarjeta con las palabras "Falun Dafa es bueno". La envolví y se la di al anciano. Se fue, pero regresó inmediatamente y me dijo: "Gracias". Le pregunté por qué. Dijo: "porque mi espalda ya no me duele". El anciano tenía dolor en la espalda, por lo que no podía mantenerse recto y tenía que depender de un bastón para apoyarse al caminar. Estaba muy sorprendido. Fue la primera vez que me encontré con algo tan milagroso desde que comencé a contarle a la gente los hechos sobre Falun Gong.
Caminé con él hasta la puerta. Después de varios pasos, el anciano se volvió y me agradeció nuevamente. Yo le dije: "no es necesario que me agradezca. Si desea expresar su agradecimiento, por favor, de las gracias a mi Maestro. Es nuestro Maestro quien enseña hacer las cosas de esta manera. Porque usted cree en la existencia de los dioses y Budas, ellos lo protegen. El Fo Fa es ilimitado".
Más tarde mi hermana escuchó del anciano que no sólo se liberó de la enfermedad, sino que también había experimentado muchas bendiciones. Recibió dinero incluso mientras estaba en casa. Cuando la gente le preguntó cómo se convirtió de repente en alguien tan sano, dijo: "Porque leí esto", mientras les mostrando la tarjeta de Dafa. Ahora no solamente él se beneficia de Dafa, sino que también cuenta a otras personas los hechos sobre Falun Dafa y les ayuda a tomar la decisión correcta en este momento crítico de la historia.
Espero que todos los seres conscientes regresen a su verdadera naturaleza de la compasión y todas las personas buenas sean bendecidas y tengan una larga vida.
Me gustaría expresar mi más sincero agradecimiento al Maestro por darme esta oportunidad. También es una oportunidad para que los seres conscientes sienten las bases para sus futuras bendiciones. Al mismo tiempo experimenté la verdadera naturaleza compasiva de la gente.