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Emplearía a practicantes de Falun Gong si administrara una empresa.

Trabajo en un gimnasio de propiedad privada y soy el responsable de la contabilidad y vigilancia de los cobros, sin ninguna supervisión. El gimnasio está siempre ocupado, lo cual me permite estar en contacto con diferentes tipos de personas. En el mundo de hoy, lleno de deseos materiales, las personas ponen énfasis en la fama y las ganancias y no piensan en los demás. Soy un practicante de Falun Gong que se comporta de acuerdo con Zhen-Shan-Ren (Verdad, Benevolencia y Tolerancia) y me gustaría compartir mis experiencias sobre esto.

Una vez un cliente, después de hacer ejercicios durante muchas horas, me pidió que le cobrara una tarifa por dos horas. Me dijo que él lo había hecho antes. Pensé: "No importa lo que le hayan cobrado antes, no debo hacerlo así. Soy un practicante de Falun Gong, y cualquier comportamiento incorrecto no está de acuerdo con Zhen-Shan-Ren. Yo soy empleado por mi jefe, gano un sueldo de él y debo pensar en él. Si le cobro al cliente menos de lo que se supone que es, el me lo agradecerá, pero el jefe sufrirá pérdida de ingresos. Esto no es una buena costumbre, y nunca lo haré. Entonces le expliqué al cliente pacientemente: "Si sólo paga una cuota de dos horas, yo voy a pagar el resto por usted. No puedo traicionar mi conciencia y ocasionarle pérdidas a mi jefe. Soy un practicante de Falun Gong y me conduzco según Zhen-Shan-Ren, por lo tanto no puedo engañar a mi jefe". Después de un rato, el cliente dijo: "Eres una buena persona. Si tuviera una empresa, emplearía gente que practica Falun Gong como tú".

Los clientes pagan un depósito antes de usar el gimnasio, y de vez en cuando, algunos clientes olvidan reclamar el resto de su depósito cuando salen. Cada vez que pasa esto, guardo el dinero y se los devuelvo cuando regresan. Un día, una maestra entregó un depósito de 100 yuanes, practicó ejercicios sólo por un tiempo y salió a toda prisa. No podía abandonar mi lugar en ese momento y traté de detenerla llamándola, pero no me escuchó. Cuando regresó, después de un largo tiempo, le entregué el resto de su depósito que era más de 90 yuanes, lo que realmente la conmovió. Dijo: "Incluso no recuerdo que usted me debía. Ustedes practicantes de Falun Gong son diferentes de los demás, y tú eres una auténtica buena persona. El partido comunista es tan malo que persigue la gente buena". Más tarde aceptó hacer las "tres-renuncias".

Soy estricto en mi trabajo, lo que se supone aleja  los clientes, pero por el contrario, más y más gente viene a hacer ejercicios aquí. Ellos han sido testigos de mi comportamiento y de que Falun Dafa es bueno, incluso algunos han hecho las "tres-renuncias".

La conciencia de la gente está reviviendo

Un cliente habitual me dijo una vez: “Nunca pagué aquí después de hacer ejercicios, pero desde que usted vino nunca dejé de pagar porque ahora sé cómo ser un buen hombre". Luego dijo: "Soy jefe de una sección de seguridad. No voy a seguir las instrucciones de las autoridades superiores, si nuevamente me piden vigilar y denunciar a los practicantes de Falun Gong". Me dijo emocionado más tarde: "Hice algo muy bueno anoche". Le pregunté qué hizo. Dijo: "Anoche vinieron dos practicantes de Falun Gong a nuestra empresa para distribuir materiales de aclaración de  la verdad. Uno fue capturado por los guardias y me lo trajeron. Los guardias dijeron que el otro practicante había escapado y me preguntaron si lo vi. Sin pensarlo, les dije que había visto una persona que iba hacia el sur e inmediatamente después de decir esto, se fueron a perseguirlo. Dejé ir al practicante y le pedí que tuviera cuidado. Más tarde, los guardias regresaron con las manos vacías y se sorprendieron de que el practicante capturado ya no estuviera. Me preguntaron por qué. Dije que me habían  llamado y este huyó cuando regresé. Uno de los guardias dijo: "déjelos ir, ellos no son mala gente, y no es asunto nuestro. Estamos para atrapar gente mala". Tras sus palabras me sentí muy feliz por él y su buena acción.

Un extraño llegó una vez, me dijo algo irrelevante e incluso habló mal de Falun Dafa. Lo detuve de manera amable, pero no lo aceptó y me gritó. Colocó mi nombre en una libreta y me pidió que lo acompañara. Pronto una multitud lo rodeó y lo increparon: "¡No haga eso! Los practicantes de Falun Gong son buenas personas. ¡Váyase! No haga problemas aquí". Seguidamente, esta persona guardó su libreta y se fue inmediatamente.

Me siento feliz por esos seres que han comprendido la verdad, y estoy decidido a mejorar, seguir las enseñanzas del Maestro y validar la excelencia de Dafa. Con mi propio comportamiento, espero poder conmover a la gente, despertar sus conciencias con mi bondad y salvar más seres conscientes.

Soy serio en el trabajo y entusiasmado con los clientes. Algunos solamente me sonríen y dicen: "Falun Dafa es bueno". Observando mi conducta, mi jefe ha cambiado de actitud hacia Falun Gong. Ha entendido qué es la bondad auténtica. Un día incluso me pidió le prestara Zhuan Falun e hizo las "tres renuncias" para su familia. Más tarde me protegió en una situación crucial.

Lo anterior son mis experiencias de las cosas que se supone debo hacer con la guía del Maestro. Hoy es el vigésimo aniversario de la difusión de Falun Dafa en el mundo, y escribo esto para validar la grandeza de Dafa. Sólo quiero permitir que más gente lo conozca, en este mundo lleno de caos y su creencia de que "cada hombre por sí mismo y el Diablo toma la retaguardia", los practicantes de Falun Gong se esfuerzan en ser desinteresados y considerar a otros en cada pequeña cosa en su trabajo ordinario. Son nobles, como flores de loto saliendo del barro sin contaminar su pureza.