[Minghui Net] Enviando pensamientos rectos recientemente en un grupo de estudio del Fa, vi aparecer una cantidad de deslumbrantes luces blancas encima de mi cabeza. Medían unos quince centímetros de ancho y alcanzaban la cumbre del cielo y éste también se veía deslumbrante, hermoso y vibrante. Todo era tremendamente maravilloso. El Maestro estaba sentado en un pasillo extremadamente solemne y muy, muy alto. Los ríos gritaban con entusiasmo y las olas clamorosas arremetían contra la costa.
A este salón donde enviábamos pensamientos rectos unidos, llegaron ocho grandes jingang y muchas bellezas voladoras flotando por el aire. El Fashen del Maestro permanecía sentado encima de un gran Falun, mientras que otro gran Falun en posición vertical, giraba rápidamente.
Los practicantes se sentaron en un círculo y tras un corto tiempo, apareció una enorme flor de loto en el centro. Sus pétalos rosados, las hojas verdes, y los capullos podían verse claramente.
Muchas luces dentro del campo de su dimensión, aparecieron alrededor de la flor de loto, cada una medía alrededor de un metro de longitud. Las luces conectaban a todos los que enviábamos pensamientos rectos en el salón con la enorme flor de loto.
Entonces, a la indicación del Maestro, vi una escalera que ascendía al cielo. Muchos practicantes subían por ella. Un practicante, que subía por un lado de la escalera, trepaba tan velozmente que saltaba tres peldaños con cada paso que tomaba.
También vi otra escena. En esta escena, algunos practicantes trepaban por el lado más empinado de una montaña, algunos caminaban hacia adelante elevándose por una rampa ancha, algunos subían por escalones, otros caminaban por un camino plano empujando y jalando artículos, mientras otros sostenían niños y traían equipaje, y así sucesivamente. Me iluminé a que todos estos practicantes están practicando Dafa, pero el estado de su cultivación y grado de diligencia son bastante diferentes. Como practicantes de Dafa, debemos abandonar nuestras cosas de la gente ordinaria y no dejarnos bloquear por la fama, ganancia y las emociones del mundo humano en nuestro camino hacia el estado de un Dios verdadero.
También vi una escena alarmante: una cantidad de gente prolijamente vestida caminaba por un camino rumbo abajo. Parecían estar adormecidos, sin ninguna comprensión de que se dirigían hacia abajo. Pude entender que la moralidad del ser humano en la actualidad va descendiendo mil millas por día. También vi cómo la tierra se abrió formando un gran agujero dentro del cual algunas personas cayeron y desaparecieron para siempre.
En la actualidad los seres humanos son incapaces de apreciar el peligro que enfrentan pero los practicantes de Dafa sí lo saben muy bien. Si los discípulos de Dafa no rescatan al común de la gente, entonces esa gente se quedará sin esperanza alguna. El salvar a los seres conscientes es un caso urgente. Tenemos que ser más diligentes y avanzar mucho más para cumplir con nuestras misiones sagradas y no permitir que se esfume la única esperanza de salvación de la gente.