Minghui.net] Después de la publicación del nuevo jingwen de Shifu “Tengan cuidado con que del propio corazón nazcan demonios”, creía que no necesitaba preocuparme de este asunto ya que siempre había tenido una mente clara en mi cultivación. Menospreciaba a aquellos practicantes que tomaron un camino desviado del Fa y pensaba que el Fa de Shifu era muy claro. ¿Cómo pueden estas personas aún ir en contra de los principios del Fa? (este pensamiento ya era, de hecho, una manifestación de carencia de humildad). Más tarde, cuando comparé mi comportamiento con los requisitos de Shifu, me di cuenta de mis defectos.
A pesar de que no había tomado un camino desviado, ni tampoco tenía el problema de que de mi propio corazón nacieran demonios, aún tenia este pensamiento; cuando lograba algo, me consideraba mejor y superior que los demás. Ser arrogante, muy orgulloso, y querer ostentar, mostraba que no era humilde. Esta conducta era peligrosa, porque sentía que los demás deberían escucharme y que yo debía decirles qué hacer. Esto es muy similar al tema del nacimiento de demonios del propio corazón, que se menciona en Zhuan Falun:
“«Yo soy fo, y ustedes no necesitan aprender de otro; yo soy fo y les diré cómo hacer esto y cómo hacer lo otro ». Él hace esto”. (Lección Sexta: Del propio corazón nacen demonios)
Después de leer el jingwen “Tengan cuidado con que del propio corazón nazcan demonios”, llegué al entendimiento de que durante el proceso de cultivación, como practicantes debemos ser siempre humildes. No importa cuan diligente o cuan capaz seas, no hay que desarrollar ningún tipo de complacencia o arrogancia. Si eres siempre humilde, no vas a crear demonios en tu propio corazón. Por consiguiente, ser modesto y humilde es muy importante para los practicantes.
Antes de empezar a practicar Falun Gong, sabía de la importancia de ser humilde. Le había dicho a mi hija: “Incluso si eres una estudiante excelente, debes seguir siendo modesta y humilde. Nunca menosprecies a los demás. No seas arrogante sólo por que hayas conseguido algo. Sigue el ejemplo de las mazorcas de maíz: Aquellas hechas y maduras son muy pesadas, mantienen siempre su cabeza baja; por el contrario, aquellas mazorcas inmaduras se mantienen siempre erguidas, esto es porque están vacías por dentro”.
Como practicantes, lo deberíamos saber aun mejor. Sólo cuando somos humildes, podemos examinarnos y mirar hacia dentro cuando aparezcan conflictos. Si eres engreído y siempre estás pensando que estás en lo correcto y los demás están equivocados, vas a culpar a los demás y olvidarás examinarte. Por lo tanto no podrás mejorar en la cultivación. He estado teniendo este problema. Mi comportamiento era como el de alguien que no se cultivaba, pero intentaba mejorar a los demás. Siempre estaba criticando a los demás sin entender que necesitaba examinarme y mirar hacia dentro. Es por eso que no me era posible mejorar.
Una persona egocéntrica y arrogante tiende a mirar hacia afuera y descuida cultivarse. Cuando otros practicantes le señalan este problema, él no lo acepta, e intenta por todos los medios enmascarar sus defectos.
Una apersona arrogante y egocéntrica tampoco conoce las normas básicas de cortesía. Ellos se comportarán de diversas maneras, que se desvían de los principios del Fa, y esto se manifestará en su trato con las otras personas. Estrictamente hablando, todos estos asuntos pertenecen a nuestra cultivación y debemos manejarlos bien.
Versión en inglés: http://clearwisdom.net/html/articles/2012/3/19/132268.html