[Minghui Net] Con la reciente exposición internacional de la sustracción de órganos a practicantes de Falun Gong vivos, ha quedado en claro que muchos campos de trabajo forzado y prisiones en China han participado en esta atrocidad inimaginable.
Mientras estaba detenida en el campo de trabajo forzado para mujeres de Heizuizi, en la provincia de Jilin, una vez me extrajeron sangre sin ninguna razón. Ahora estoy compartiendo mi experiencia para que los expertos médicos puedan usarla como referencia en sus esfuerzos para exponer aún más los crímenes de sustracción forzada de órganos.
En mayo o junio de 2009, el campo de trabajo reunió a todos los practicantes de Falun Gong que habían llegado varios meses antes. Nos ordenaron que nos pusiéramos en 7 filas. Luego los guardias daban a cada practicante dos tubos de unos 7 u 8 cm de largo y 2 de ancho. Escuchamos decir a los doctores del campo de trabajo que estos tubos habían sido importados de U.S.A. No nos dijeron para qué querían extraernos la sangre.
De alguna manera no pudieron obtener sangre de la primera practicante de la fila. Pensaron que algo estaba mal en la aguja pero no podían averiguar cómo arreglarlo. Después de agotar todas las opciones, nos dijeron que nos fuéramos. Sin embargo, poco después, nos convocaron nuevamente y empezaron de nuevo a extraer sangre. Insertaban un tubo en la aguja y luego lo sacaban cuando estaba lleno. Sin sacar la aguja de la vena, insertaban un segundo tubo en la aguja para extraer más sangre. Así tenían dos tubos de sangre de cada una de nosotras, aunque nunca nos dieron los resultados de los análisis.
Extrañamente, el campo de trabajo no recogía muestras de sangre de los detenidos que no eran practicantes de Falun Gong. En realidad nunca se preocuparon del bienestar o la salud de ninguna detenida. Los guardias normalmente hacían la vista gorda cuando alguien pedía cuidados médicos. Cuando finalmente respondían a la súplica de la persona enferma, a menudo administraban medicinas obsoletas sin estar preinscritas por los doctores. Si una detenida estaba en un estado de salud grave, tenía que tener una aprobación de los guardias y demostrar que tenía suficiente dinero en su cuenta como para cubrir los gastos, y luego esperar a que más gente se pusiera enferma para que los guardias pudieran llenar el vehículo y así llevar a la gente al hospital de una vez.
En abril o mayo de 2010, sucedió otro incidente, un día entre las 9:00 y 10:00 mientras una practicante de Falun gong de unos 30 años trabajaba con nosotras en el taller, unos guardias se la llevaron de repente y no volvió hasta las 15:00, estábamos todas muy preocupadas por ella. Cuando volvió, nos dijo que los oficiales del campo habían tratado de forzarla a ella y a un par de detenidas de otro equipo, a ir al hospital. Se negó puesto que no estaba enferma y no había solicitado cuidados médicos. Los guardias insistieron pero ella seguía diciendo que no.
Durante la confrontación, los doctores del campo de trabajo la engañaron haciéndole creer que solo era un chequeo rutinario. Según su descripción, varias de nosotras que éramos de la zona local, no figurábamos que habíamos sido trasladadas a la escuela médica afiliada al hospital ubicada en el Boulevard Jiefang. Nos dijo que los doctores del hospital le habían hecho una ronda de pruebas y finalmente alegaron que tenía que ser hospitalizada inmediatamente para tratarle una anomalía del corazón. Antes de empezar a practicar Falun Gong, unos diez años antes de este incidente, sufría de una enfermedad cardiaca, pero nunca había experimentado ningún problema del corazón después de volverse practicante.
Se negó con firmeza a la orden de hospitalización, así que los guardias del campo tuvieron que traerla de vuelta. Después los guardias pidieron que pagara más de 300 yuanes por los gastos médicos. Ella comentó que en primer lugar nunca había pedido que la trataran y que el campo de trabajo la había forzado a ir. Al final las autoridades del campo dejaron estar el tema.
¡Qué vergonzoso es para los oficiales del campo de trabajo llevar arrastras a los practicantes detenidos al hospital y luego ordenarles pagar por los gastos médicos! Con la sustracción de órganos forzada siendo expuesta, no puedo ayudar pero, creo que lo anterior mencionado de la orden de hospitalización de la practicante estaba relacionado con la sustracción de órganos. ¿Pudo ayudarle su insistencia de no ser hospitalizada a salvar su vida?