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Esto ocurrió en el verano de 2011. Para permitir que un ex practicante occidental reanude la práctica de Dafa, nuestro misericordioso Shifu lo llevó con nosotros. Estoy escribiendo esta experiencia para compartirla y, espero, también para animar a los practicantes veteranos a que regresen a la práctica de cultivación.
Un joven practicante le clarificó la verdad sobre Falun Gong a su profesor de inglés, después de terminar la clase. Este profesor le mencionó que él también solía practicar Dafa. Había dejado la práctica porque había cometido un error y se sintió avergonzado para continuar. Al enterarme sobre esto, me sentí feliz por la oportunidad de conocer a un practicante occidental, pero también estaba preocupado acerca de su condición actual. Después de discutirlo con los compañeros practicantes, decidimos reunirnos con él, porque yo podía comunicarme con él en inglés.
Llegamos a la escuela por la tarde. La recepcionista nos informó que el profesor estaba enseñando una clase y que teníamos que programar una cita a través del director de la escuela. Fuimos a la oficina del director, le clarificamos la verdad sobre Falun Gong y le dimos un DVD de Shen Yun, que aceptó con gusto. El director hizo los arreglos para que nos encontremos con el profesor de inglés durante el descanso de 10 minutos, después de su clase.
Una empleada nos llevó a una sala de reuniones. Estábamos contentos de poder reunirnos finalmente con el profesor. Este ex practicante occidental tenía unos 30 años. Nos sonrió cuando entró en la habitación. Vamos a llamarlo el practicante K. Me di cuenta de que la empleada todavía estaba con nosotros y nos estaba escuchando, así que le dije: "Lamentamos la molestia. Puede continuar su labor. Sólo necesitamos hablar con él. Ella respondió: "Pero esto es parte de mi trabajo. No puedo irme". Mientras me estaba preguntando cómo podía comunicarme con el practicante K en estas circunstancias, el descanso de 10 minutos ya había pasado y el profesor mencionó cortésmente que tenía que regresar a las aulas.
Salimos de la sala de reuniones y nos sentamos en un área de descanso para discutir cómo podríamos encontrarlo de nuevo, porque no podíamos salir sin lograr hablar con él. Le pedimos al joven practicante que le pregunte al practicante K si nos podríamos encontrar en un restaurante para cenar. Estuvo de acuerdo en reunirse con nosotros a las 8:00 p.m., una hora antes de que comience de nuevo su clase.
Nos encontramos con él en el restaurante, pedimos algunos platillos y después le pregunté: "Un estudiante nos mencionó que usted solía ser practicante de Falun Dafa. ¿Es eso cierto? Todos somos practicantes de Falun Dafa". Él se sorprendió mucho y dijo que había renunciado a la práctica hace muchos años porque había cometido un error. Le dije: "La persecución de Falun Gong es muy brutal en China y muchos compañeros practicantes incluso han perdido sus vidas preciosas por negarse a renunciar a Dafa. Nosotros seguimos practicando Dafa y seguimos esclareciendo la verdad y tratando de despertar a los seres conscientes. Es muy afortunado de haber obtenido ya el Fa y es realmente triste que dejó Dafa sólo por un error del pasado".
El practicante K mencionó que su hermano mayor era también practicante de Dafa y que había distribuido materiales de clarificación de la verdad. Miró hacia abajo y dijo: "Pero cometí un gran error." Yo le respondí: "¿Quién puede ser tan perfecto que no cometa errores en su camino de cultivación? No tengas miedo de cometer errores. Vas a estar bien, siempre y cuando te des cuenta y lo corriges. No cometas otro error enorme al dejar de practicar Dafa".
Entonces le pregunté si alguna vez había visto a Shifu en persona. Cuando nos dijo que sí, todos estuvimos muy emocionados y le preguntamos: "Nosotros nunca hemos visto a Shifu. ¿Puedes contarnos cómo era cuando lo viste?". El practicante K nos dijo que había asistido a una conferencia del Fa en el extranjero, que Shifu habló en esta conferencia y que él estaba allí cuando Shifu estaba hablando con uno de los practicantes después de la conferencia. En ese momento, sólo tenía un pensamiento en su mente y era: "Quiero ir a casa". Con lágrimas en los ojos, le dije: "¿Sabes que este pensamiento venía de tu lado que sabe y que querías volver a tu hogar original?".
Cuando llegó el momento para que el practicante volviera a clase otra vez, le pregunté por qué tenía un horario tan ocupado, incluyendo una clase a las 21 h, me respondió que a propósito lo dispuso así, para evitar la sensación de vacío interior en su tiempo libre. Lamenté profundamente que el profesor de inglés hubiera dejado de practicar Dafa. Le dije que teníamos un grupo de estudio del Fa semanal y esperaba que pudiera unirse a nuestro grupo, pero no respondió. Intercambiamos información de contacto y puso fin a la conversación. Aunque tomó casi ocho horas, estaba contento de haber tenido esta oportunidad de conocer a este ex practicante occidental.
Después de la reunión, le envié un correo electrónico diciendo que no es fácil obtener Dafa, que era muy afortunado y ¡que por favor lo cuide! Tenía la esperanza de que fuera a seguir practicando y que iba a unirse a nuestro grupo de estudio del Fa. Pasaron dos semanas sin ninguna respuesta al mensaje, hasta que un día, cuando estaba hablando con los compañeros practicantes sobre cómo lidiar con esto, me llegó su e-mail diciendo que después de examinar a fondo había decidido seguir practicando y que podría participar en nuestro grupo de estudio del Fa. Estaba muy contento con su decisión. Descargué la versión en inglés de Zhuan Falun junto con otras conferencias de Shifu. Finalmente, el practicante K se unió a nuestro grupo de estudio del Fa. Todavía recuerdo claramente aquel momento y estoy seguro de que él también.
El grupo de estudio se reunió en la casa de un compañero practicante. Se estudiaron dos nuevas conferencias de Shifu: "Qué es un Dafa Dizi" y "Los Dafa dizi tienen que estudiar el Fa". Esta fue la primera vez que tuvimos un practicante occidental en nuestro grupo de estudio. Todos tomaron turnos: nosotros leíamos un párrafo en chino y el practicante K leía uno en inglés. No estábamos acostumbrados a esto al principio porque, salvo yo, nadie más sabe hablar inglés pero, mientras pasaba el tiempo ya nos acostumbramos. Después de estudiar el Fa enviamos pensamientos rectos. El anfitrión nos sirvió albóndigas hechas en casa en honor al practicante K. Mientras estábamos comiendo, un compañero practicante le preguntó en chino: "¿Es bueno?". Él respondió que no hablaba chino. "Es bueno". Todos se rieron. El practicante K dijo: "Ya he visto esta escena antes. Yo estaba comiendo albóndigas en casa de una persona de origen chino. Yo también pregunté: "¿Es bueno? y me respondió que era bueno. También me acordé de que era chino en mi vida anterior”.
Después del almuerzo, le enseñamos los ejercicios, el ponía mucha atención y sonreía con dos grandes hoyuelos en la mejilla. Su rostro sonriente se veía tan brillante como el de un niño. Todos los seres dentro de su cuerpo estarían encantados de que él había vuelto a practicar Dafa. Después de hacer los ejercicios, compartimos experiencias de cultivación y yo se las traducía en inglés. Él escuchaba atentamente con lágrimas en los ojos.
De regreso a casa, el practicante K dijo: "¡Gracias! Hoy he aprendido mucho", y yo le respondí: "No me des las gracias a mi. Le debes agradecer a Shifu. Él te ha traído a nosotros. Shifu no quiere renunciar a ninguno de sus discípulos".
El practicante K se unió a nuestro grupo de estudio del Fa varias veces antes de regresar a su país. Yo le recordaba que asistiera regularmente al grupo de estudio del Fa local cuando llegara allí. El contestó que seguramente asistiría y, según supe después, lo hizo.
Sinceramente le deseamos lo mejor a él y a su familia también. Es una bendición que podamos cultivar Dafa bajo la protección compasiva de Shifu.
Si hay algo inapropiado, por favor, señálenlo amablemente.
Versión en inglés: http://en.minghui.org/html/articles/2012/10/25/136029.html