El 3 de octubre, los practicantes de Falun Gong austríacos realizaron una actividad en las inmediaciones de un antiguo mercado de Salzburgo (Altmarkt) para despertar las conciencias sobre la persecución a Falun Gong y las atrocidades cometidas sobre la sustracción de órganos, por el partido comunista chino (PCCh) a practicantes vivos de Falun Gong. Recogieron firmas apelando para que los organismos internacionales hagan un esfuerzo y se ponga fin a esta tragedia inhumana.

Firmando la petición que condena las atrocidades en la sustracción de órganos perpetrada por el Partido Comunista de China a practicantes vivos de Falun Gong

Al enterarse de los crímenes por la sustracción de órganos, las personas firmaban inmediatamente la petición. Entre ellos, había no sólo austríacos, sino también personas procedentes de Alemania, Francia, Suiza, Canadá, Rusia, España y Sri Lanka.

Un joven chino, estudiante de medicina, firmó la petición. Dijo, que referente a la auto-inmolación en la Plaza Tiananmen, se había enterado hace unos años leyendo por internet una gran cantidad de documentos que clarifican la verdad sobre Falun Gong. Dijo que cuando estudiaba en China, el presidente de su departamento, a menudo le pedía a él y a otros estudiantes que vigilaran a un compañero que era practicante de Falun Gong. Sin embargo, por su propia experiencia en contacto con él, vio que era una buena persona. "Admiro su perseverancia", dijo a los practicantes.

Una familia escocesa firmó la petición. La mujer de esta familia dijo: "Es muy importante que el mundo occidental tenga conocimiento sobre este asunto".
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Dittrn es de Munich y dijo que la ventana de su oficina daba a un sitio de práctica de Falun Gong. Ella agregó que también había leído información sobre la persecución. Después de firmar la petición, dijo: "Todo el mundo tendrá que rendir cuentas de sus acciones, incluso, si no nos juzgan en tribunales. Dios lo ve todo".

La Sra. Brandstaetter trabaja para el Partido Verde. Ella dio a los practicantes varias direcciones de organismos de derechos humanos con el fin de que ellos también sean informados sobre las atrocidades de la sustracción de órganos.