[Minghui Net] He estado practicando Falun Gong por 13 años y me he beneficiado física y mentalmente de ello. A menudo le digo a otras personas que si ellos creen en Dafa, tendrán buena recompensa. Algunos reconocieron que “Falun Dafa hao” (es bueno) y realmente fueron recompensados. Sin embargo, algunos no lo creyeron y calumniaron a Dafa. Fui testigo de cómo ellos experimentaron la retribución del ye; algunos de ellos eran familiares míos. Después de practicar Falun Gong, mi esposo se recuperó de una enfermedad incurable y mis parientes todos estaban de acuerdo con que Falun Dafa es bueno. Sin embargo, después de escuchar las mentiras del PCCh y ver cómo nosotros éramos perseguidos, tuvieron tanto miedo que algunos comenzaron a odiar a Falun Gong.
Mi padre solía ser secretario del partido de una aldea en la ciudad de Macheng, provincia de Hubei. Un día, dijo algo malo sobre Dafa en mi casa. Inmediatamente tuvo dolor de espalda. Tenía tanto dolor que no se podía parar. Sin embargo, no se disculpó por lo que dijo. Después de regresar a su casa, no podía dormir ni sentarse. Fue a un hospital, pero no lograron curarlo. Un mes después, me llamó y se disculpó. Entendió que no debió decir nada malo sobre Dafa. Le dije que se arrepintiera sinceramente. Por eso, cada noche, contando con sus dedos, recitaba “Falun Dafa hao” y “Zhen-Shan-Ren hao” cien veces. Muy rápidamente su dolor se fue. Luego, dijo malas palabras nuevamente. Su cocina se prendió fuego y se quemó todo en la cocina. Desde ese entonces, se dio cuenta que este era un asunto serio y no se atrevió a decir malas palabras sobre Dafa nuevamente.
Cuando yo estaba siendo perseguido, mi hermano mayor insultó a Dafa dos veces. Ambas veces recibió retribución. La primera vez, su camioneta chocó con un árbol y quedó destruida. La segunda vez, su auto nuevo, que tenía poco menos de 7 días, de repente se prendió fuego. Él entendió que Dafa es sagrado y comenzó a repetir “Falun Dafa hao”. Desde entonces, su negocio ha progresado.
Un día, estaba hablando con una persona sobre las maravillas de Dafa frente a mi cuñado. La persona no me creyó lo que le contaba y se rió de mí. Mi cuñado me gritó y me detuvo. Él se dedica a producir doufu (queso de soja). Cuando regresó a su casa para operar la máquina, se cortó el brazo y tuvieron que hacerle varios puntos. Su brazo quedó hinchado. Se dio cuenta de lo que había hecho y se arrepintió de haberme dicho que parara de hablar sobre Dafa. Le pidió a su hijo que me llamara; yo le dije que se disculpara con el Maestro Li. Al día siguiente, su brazo estaba bien. Vino a verme para decirme que creía en el poder de Dafa.
Un día estaba hablando con la gente sobre los hechos de Dafa cuando una señora que vendía vegetales dijo algo malo sobre Dafa. Le dije que no dijera eso porque no era bueno para ella. Al día siguiente me dijo que le dolía la espalda tanto que no se podía parar. Sin embargo, después de recitar “Falun Dafa hao”, se recuperó.
La actitud de uno hacia Dafa realmente determina el futuro de uno. Por eso, atesorar Dafa es lo mismo que atesorarse uno mismo. Tales casos de retribución de yeli verdaderamente son advertencias compasivas, ya que el destino del alma de uno está en juego.
Versión en inglés: http://www.clearwisdom.net/html/articles/2011/2/26/123477.html