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¡Saludos, Shifu! ¡Saludos, compañeros practicantes!

Tengo una hermana de 80 años de edad. Cuando vio por primera vez la foto de Shifu en 1997, dijo: “¡Es un Fo verdadero!” Sin embargo, después que empezó la persecución, por miedo, no se atrevió más a dar la cara por Dafa. Fui detenido por los malhechores en 2001, mi madre de 92 años de edad estaba aterrada, y cayó enferma. No pude volver a verla antes de que muriera. Mi hermana mayor me echó la culpa y sintió odio por mí. Durante los últimos años intenté escribirle cartas y enviarle materiales de aclaración de la verdad, pero su actitud no cambió. Cuanto más quería convencerla, más problemas me causaba.

A principios de mayo me llamó, me dijo que se sentía muy mal y quería verme, así que tomé el tren a Changchun. Después de mi llegada, me enteré que tenía cáncer de tiroides y que la habían operado el mes anterior. La quimioterapia le estaba causando dolor. Al ver su expresión tan llena de dolor por el tratamiento, me sentí culpable y con un profundo pesar, le dije con lágrimas en mis ojos: “Querida hermana, siento mucho no haber venido antes. No tengas miedo, estarás bien”.

 “El verdadero Shan es el genuino Shan cultivado durante el proceso de cultivación y el proceso de cultivar bondad. Cuando interactúas con los seres conscientes, no es posible desplegar por completo el lado divino exitosamente cultivado, ya que todavía tienes un lado humano que aún no está cultivado. Cuando se requiere, debes ser racional y lúcido como un cultivador, permitiendo que tus responsabilidades y pensamientos rectos te dirijan, y solo entonces tu verdadero Shan puede ser manifestado. Esto es lo diferente entre un cultivador y un dios.” (Enseñando el Fa en el Fahui Internacional de Washington DC 2009)

Me sentí tan avergonzado. Me movió el qing, ¿cómo podía salvarla? Recordé el Parque del Triunfo en Changchun que Shifu menciona en Zhuan Falun. Me dirigí al parque y encontré la puerta posterior. En ese momento, sentí como si viera a Shifu y escuchara sus pasos. Me acerqué a un anciano y dije: “Vengo de otra ciudad, pero escuché que el Sr. Li Hongzhi enseñó una vez los ejercicios y dio conferencias aquí…” Antes de que pudiera terminar, el señor dijo: “Es cierto, es cierto, hacían los ejercicios aquí y allá. Incluso ahora, algunas mujeres mayores todavía hacen aquí los ejercicios en la mañana”. “¿La policía no las arresta?” “Sí, pero después de liberarlas, regresaban y hacían otra vez los ejercicios. Ahora ya nadie interfiere”. Obviamente a las personas les repugna la persecución. Luego hablé con otras personas en el parque, incluso con un conductor, trabajadores de sanidad, jardineros y varios turistas. Al hablar de Falun Gong, la mayoría de ellos estaban muy animados y seguían hablando. Algunos me dijeron que muchos de sus familiares, amigos, o vecinos practicaban Falun Gong. Fue realmente alentador y sorprendente. ¡Lo bueno que era! Se había sembrado la raíz de Dafa profundamente en los corazones de la gente.

Le llevé a mi hermana su fruta favorita y le ayudé a limpiar la casa. Me dio un vaso de agua y dijo: “Has cambiado. ¿Todos los practicantes de Falun Gong son buenos?” Respondí: “Shifu de Falun Gong nos pide que seamos buenos, desinteresados y altruistas”, También le conté mi experiencia de la tarde en el Parque del Triunfo. Me escuchó con mucha atención, se dirigió a la sala, se sentó en el sofá. Luego, me dijo: “¡Voy a renunciar!” ¿Cómo puede una persona tan obstinada renunciar al PCCh tan fácilmente? Tal vez había estado esperando esa frase tanto tiempo, que en ese momento, me quedé atónito. Después de renunciar, su esposo, hijo, nuera, hija, y yerno; todos renunciaron al partido. Realmente, me sentí muy feliz por ellos.

A finales de junio, mi hermana me llamó de nuevo para decirme que se estaba recuperando muy bien. Supe que el benevolente Shifu había empezado a hacerse cargo de ella.

Los compañeros practicantes, en general, descubren que al tratar de persuadir a los familiares o amigos a renunciar al PCCh, es mucho más difícil que hablar con extraños. En realidad, es porque nuestros corazones se conmueven por nuestros sentimientos hacia ellos. Salvar seres conscientes es un asunto muy serio, tenemos que estudiar el Fa para cumplir con nuestras prehistóricas promesas de ayudar a Shifu a rectificar el Fa.

Bienvenidos los señalamientos de los compañeros practicantes a cualquier cosa inapropiada.

Fecha de publicación: 17/11/2011