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Padres ancianos lloran la muerte de su hija, la Sra. Lu pide la liberación de su hija (foto)

Ene. 31, 2010

[Minghui Net] La Sra. Lu Shuqing, una mujer mayor de la ciudad de Shijiazhuang en la provincia de Hebei, tiene dos hijas, la Sra. Feng Xiaomei, su hija mayor y la Sra. Feng Xiaomin. Ambas mujeres y sus esposos eran practicantes de Falun Gong. El esposo de la Sra. Feng Xiaomin, el Sr. Wang Hongbin, fue torturado hasta la muerte en el 2003.
(Ver: http://www.clearwisdom.net/emh/articles/2003/10/21/41491.html)
Menos de un año después, en el 2004, la Sra. Feng Xiaomin fue también torturada hasta la muerte.
(Ver: http://www.clearwisdom.net/emh/articles/2004/10/27/53916.html).
El esposo de la Sra. Lu no pudo sobreponerse a la tristeza abrumadora de perder a dos hijos uno tras otro. Después de haber sido acosado en varias ocasiones por la policía, murió a principios del 2005. La Sra. Feng Xiaomei está muy enferma como consecuencia de haber sido torturada en un campo de trabajos forzados, pero aún la siguen obligando a trabajar.


La familia de la Sra. Feng Xiaomei era muy feliz hasta que la persecución del partido comunista chino (PCCh) la destrozó.

Antes que el PCCh comenzase a reprimir a Falun Gong en julio de 1999, tanto la Sra. Feng Xiaomei como su esposo eran ingenieros en la fábrica de equipamiento de la Oficina de Telecomunicaciones y Correos de la provincia de Hebei. Ella y su esposo, el Sr. Wang, se habían graduado de la Universidad de Correos y Telecomunicaciones de Changchun. La Sra. Feng era una experta en su campo y era muy competente. Tomaba su trabajo muy enserio y era responsable. Ya era ingeniera en jefe en su fábrica cuando tenía 30 años. Su esposo era un hombre callado y académico. Nunca tuvo un interés activo en los asuntos mundanos pero ayudaba silenciosamente a otros que estaban en necesidad. Su familia, amigos y compañeros de trabajo, todos sabían que Falun Gong había traído felicidad a su familia.

A continuación la declaración personal de la Sra. Lu.

Mi nombre es Lu Shuqin, tengo 67 años de edad, y vivo en la carretera Huaibei en la ciudad de Shijiazhuang, provincia de Hebei. Soy la madre de Feng Xiaomei. El 27 de abril del 2009, oficiales del departamento de policía de la ciudad de Shijiazhuang, del departamento de policía del sub-buró de la ciudad de Shijiazhuang, del departamento de policía de Gaocheng, del departamento de policía del sub-buró de la zona de desarrollo de Liangcun y del departamento de policía de la zona de desarrollo arrestaron ilegalmente a mi hija por practicar Falun Gong. Más tarde fue sentenciada a un campo de trabajos forzados por un año y medio.

Ahora ella está en un campo de trabajos forzados. Su salud se está deteriorando rápidamente y se ha visto sangre en sus deposiciones durante los últimos meses. El primer diagnóstico del terapeuta fueron nódulos en el intestino grueso, con la posibilidad de cáncer. Sin importar su condición, me dijeron que el campo de trabajos forzados aún la obliga a realizar arduos trabajos debido a que este campo tiene que cumplir con una cuota elevada. Después de un día de trabajo, mi hija está tan exhausta que se hecha en la cama con grandes dolores, siendo casi incapaz de moverse. Siendo su madre, estoy muy preocupada por mi hija, y le ruego a las autoridades relevantes que consideren la difícil situación de mi familia y le permitan a mi hija salir con un permiso médico.

Trabajé muy duramente para criar a mis dos hijas. Eran realmente muy buenas niñas y recibieron una buena educación. Tenían muy buenos modales y les gustaba trabajar bastante. Mi hija mayor, Feng Xiaomei, era ingeniera en jefe en su trabajo. Después que empezó a practicar Falun Gong, era amable con las personas y se llevaba bien con sus compañeros de trabajo. En el trabajo, nunca se quejó y contribuyó enormemente con su empleador, quien la tenía en muy alta estima. Ella cultiva Falun Gong, que está basado en los principios universales de Verdad-Benevolencia-Tolerancia. Los practicantes miran hacia adentro cuando tienen problemas en casa, y son tolerantes y considerados con las necesidades de otros colocándolas por delante de las suyas. Nuestra familia entera era muy feliz. Mis dos nietos, ambos tenían muy buen comportamiento, y esto se reflejaba en nuestra, una vez, armoniosa vida familiar. Mis dos yernos eran muy buenos conmigo. Incluso cuando había tenido que soportar dificultades mi vida entera, sabía que mis parientes se ocuparían de mí cuando fuera mayor.

Nunca pensé que Jiang Zemin, el ex líder del PCCh, usaría su poder para perseguir ilegalmente a Falun Gong. Desde el inicio de la persecución en 1999, nuestra familia ha estado en una terrible situación. El esposo de mi hija mayor, Wang Hongbin, fue torturado hasta la muerte el 9 de octubre del 2003, en el campo de trabajos forzados por practicar Falun Gong. Mi hija menor murió como resultado de la tortura en mayo del 2004 porque no quiso renunciar a practicar Falun Gong. Su esposo, Wang Xiaofeng, es también víctima de la persecución. Por practicar Falun Gong, ha sido forzado a dejar su hogar y su paradero es desconocido hace ya muchos años. Ni siquiera sabemos si está vivo o muerto.

Ahora mismo, mi hija mayor está en un campo de trabajos forzados debido a que no quiere renunciar a practicar Falun Gong. Se le ha negado su libertad. Me han dejado a cargo de mis dos nietos, uno que tiene 19 años y el otro solo siete años. El salario de mi hija solía cubrir todos nuestros gastos familiares. No tengo dinero para pagar la educación de mi nieto, y tenemos dificultades incluso para poder alimentarnos. Realmente no sé cómo vamos a sobrevivir.

Tengo casi 70 años y he tenido que soportar el dolor de ver a dos de mis hijos morir antes que yo. Realmente no entiendo cómo han podido ser torturados hasta la muerte, y todo debido a que practicaban Falun Gong. Las personas que practican Falun Gong son saludables. Ellos le ahorran al gobierno el dinero en gastos médicos, están calmados cuando se encuentran con problemas y son amables con las personas. Mis hijas mejoraron tremendamente tanto física como mentalmente después de practicar Falun Gong. ¿Qué tenía eso de malo? ¿Por qué el gobierno no nos deja practicar? ¿Por qué las golpizas y las matanzas? ¿Cómo pueden tratar a sus ciudadanos así? Ahora mismo, mi hija mayor, Feng Xiaomei está sufriendo en un campo de trabajos forzados.

He escuchado que el año pasado, el 80 por ciento de los prisioneros del campo de trabajos forzados para mujeres de Hebei eran practicantes de Falun Gong. ¡No tiene sentido, un campo de trabajos forzados es para ladrones, drogadictos, prostitutas, y personas que han cometido crímenes! ¿Cómo es que los departamentos de policía no van tras esas malas personas en la sociedad, pero en cambio persiguen a las personas buenas que practican Verdad-Benevolencia-Tolerancia? ¡¿Qué clase de mundo es este?! Si mi hija menor, Feng Xiaomei, muere, no seré capaz de soportarlo. No sé si seré capaz de poder seguir adelante. Pero no puedo rendirme porque tengo a mi cargo a mis dos nietos. ¿Quién cuidaría de ellos?

Los oficiales en cada nivel, sin importar quienes sean, pienso que también deben tener familias y quieren que sus familias sean felices. Por favor imagínense que ustedes están en esta situación, aún existen familias como nosotros, sufriendo tremendas dificultades y persecución. Les ruego a los oficiales relevantes que consideren las difíciles circunstancias de mi familia. Salven a mi familia, salven a mi hija, Feng Xiaomei, y libérenla para que reciba tratamiento médico. Dejen que mi familia viva.

Lu Shuqin, madre de Feng Xiaomei.

10 de enero del 2010