Hola, me llamo María. Comencé a practicar Falung Gong en 2001 en Umea cuando estudiaba en la Universidad. Entonces tenía una vida muy estresada y una rodilla muy mal. Esto hizo que me interesara por los movimientos lentos de Falun Gong que suponían un contraste con el resto de mi vida tan ocupada. Me fui al sur cuando terminé mis estudios y hace cinco años conseguí un trabajo en Örebro, donde todavía vivo.

Un momento crucial de mi vida

Hace dos años tuve un momento crucial en mi vida que me gustaría contárselo. Si tuviera que describir mi situación con palabras de la gente común, diría que estaba "destrozada, hecha un desastre". Siempre había sido lista y una persona con energía y hacía bien las cosas tanto en los momentos de éxito como en los de fracaso. Entonces, hace dos años, comencé a tener apenas sentimiento de seguridad y confianza en mi misma. Había trabajado mucho durante la primavera y no había sido capaz o no me había atrevido a enfrentarme a mis apegos cuando salieron a la superficie. Cuando llegaron las vacaciones y mi trabajo ya no era el centro de atención, sólo me quedaba "un poco". Como pudo suceder esto?. Cuando echo una mirada atrás, entiendo que había confiado más en los otros que en mí misma y había escuchado más a los otros que a Shifu. He pedido perdón tanto a Shifu como a mí misma. Lo que pasó no me sorprendió porque nunca había aprendido a mirar en mi interior y reflexionar sobre mis sentimientos, pensamientos y comportamiento que había estado cosechando a lo largo de todo el sendero de mi vida.

Ahora, el camino hacia mi interior ha comenzado. Cuando me siento a reflexionar sobre mí misma, me vienen a la cabeza un montón de imágenes. Durante este tiempo, se jugaban muchas historias dentro de mí y yo siempre era la protagonista y veía todo desde mi punto de vista. Una vez, llegué hasta un muro de piedra alto y largo, lo seguí con mis ojos, hasta donde yo podía ver no tenía ventana ni puerta. Pensé en cómo debería seguir avanzando. De repente, el muro se derrumbó, y dentro era un lugar oscuro donde todo estaba cubierto por una gruesa capa de polvo. Sentí que me había metido en el muro que yo había construido alrededor de mi propio ser. Un muro que me protegía de las atrocidades del mundo como las desilusiones, los fracasos. Entré en una habitación y entonces una brisa barrió todo el polvo y todo quedó limpio y bonito. Estuve mas tiempo paseando por esta habitación. Este viaje aún continúa desde entonces - Un viaje que me dirige hacía mí misma, a mi verdadero ser.

Fuerte conciencia principal

Un día mientras iba en bicicleta a trabajar, me vino el pensamiento de que tenía que recuperar las partes de mí misma que había dado a otras personas. De repente, vi un cuadro, era una serie completa de gente que conocía que estaban delante de mí. Mi padre vino y me devolvió el derecho de elegir. Antes, mi padre siempre tenía la última palabra en más o menos casi todo lo que yo hacía. Si yo no estaba de acuerdo con su idea, nada haría que estuviera a favor de ella. Recibí la habilidad, de forma simbólica de ponerla en mi mano y llevarla hasta mi corazón. Se mezcló con todo mi cuerpo. No sabía cuando la había dejado marchar pero era pequeña porque podía contenerla en mi mano. Sentí como crecía dentro de mi cuerpo hasta que estuvo en todas partes del cuerpo. Entonces ocurrió lo mismo con mi madre, hermana, mis abuelos, abuelas, amigos y mi ex novio. Me devolvieron compasión, seguridad en mí misma, paciencia conmigo misma, seguridad, etc. Fue una experiencia maravillosa saber que todos estas cosas encontraron el camino de regreso a mi ser. Lentamente pero sin pausa, pude encontrarme a mí misma, y supe que mi conciencia principal se había hecho más y más grande.

Esto que fue un "desastre" hace dos años me convirtió en la persona que soy ahora, en María con una base sólida. Me he conocido a mí misma, disfruto estando conmigo misma y me respeto. Estoy muy agradecida por esto. Estoy muy agradecida a los años en que sentía como todos mis apegos que había acumulado en esta vida y en vidas anteriores estaban haciendo cola, esperando simplemente a ser pulidos para permitir que mi verdadero ser apareciera. Esta fue una época de muchas lágrimas, temores y escrituras intensivas en mi diario. También fue un tiempo de experimentar muchas liberaciones cuando abandonaba mis apegos y un tiempo de fortalecerme más y más a medida que estos iban desapareciendo. Cuando miro al pasado, doy las gracias por ese momento. Agradezco a Shifu por su tremenda paciencia y por haber estado siempre guiándome. También quisiera aprovechar esta oportunidad para agradecer a todos los que están sentados aquí y me han apoyado.

Ambiente de cultivación

Otra cosa que quiero compartir con stedes es sobre la situación en Örebro. En este momento, somos sólo unos pocos los que regularmente vamos a hacer los ejercicios y a la lectura. Todos ellos llevan practicando Falun Gong hace varios años. También hay gente nueva que prueba Falun Gong yendo al círculo de estudio para principiantes junto con una asociación educacional. Parece que ahora tenemos una buena base para asentarnos. El hecho de que trabajamos juntos, que todo el mundo se siente involucrado y que todos contribuyen con su conocimiento está ayudando mucho. Hay una gran diferencia con como era hace algunos pocos años. Cuando vi la conferencia de Shifu a los pacticantes australianos, el 4 de agosto de 2007, de nuevo me veo muy bien a mí misma en esa situación. Öbrero fue un reflejo de lo que Shifu nos ha dicho sobre la confianza en cada uno, la insatisfacción, la desorganización e inquietudes entre los practicantes.

Durante casi una año y medio, hemos trabajado para mejorar la situación en Örebro. Leemos en el libro Falun Gong los requisitos para un centro de asistencia, para los asistentes y para los cultivadores. Vemos en DVD los ejercicios de Shifu juntos y nos corregimos unos a otros y así poder seguir a Shifu, y ser capaces de practicar consecuentemente. Después de leer los lunes, compartimos experiencias, así, aquellos que lo desean, tienen la oportunidad de decir algo o hacer alguna puntualización. Esto significa que cada vez somos más capaces de abrirnos a los otros y mejorar cada vez más a la hora de escuchar a los demás. Cuando decidimos atrevernos a decirles a los demás nuestras debilidades, tenemos la fuerza para ello. También da fuerza saber que alguien más está trabajando en esta tarea. Nos hemos dado cuenta de que en ocasiones necesitamos recordarnos cómo cuidar de nuestro sitio de práctica y de nuestro grupo de estudio del Fa.

Inspirados en practicantes de otra ciudad, hablamos y llegamos juntos a conclusiones y acuerdos que ahora utilizamos. Por ejemplo, acordamos compartir experiencias justo después de leer una vez a la semana. Continuamos recordándonos no empezar a hablar de actividades ni bien terminamos de leer, sino hacerlo después de haber compartido experiencias. Puede que al principio el hecho de compartir experiencias sea un poco lento, pero tan pronto como empieza uno, continua el intercambio.

Cooperación

Algunas veces, he sentido que la responsabilidad de contactar con una persona es muy dura. Me he sentido ansiosa por querer controlarlo todo y a todo el mundo, y entonces me he cansado y sentido descontenta. Al principio, cuando era nueva en Öbrero, no hacíamos muchas actividades, pero a medida que pasó el tiempo, estas fueron aumentando. Además de hacer la demostración de los ejercicios de Falun Gong con mas frecuencia, tenemos la gala, el periódico La Gran Epoca, etc. Me acostumbré a asumir responsabilidades y cuando ahora hay más practicantes, entonces sí que puedo abandonar el apego de controlar las cosas. Esto no era bueno ni para mí ni para el resto de los practicantes. Una noche hablamos sobre la cuestión de nuestra práctica y llegamos al acuerdo de tener una sesión de estudio y una de práctica de ejercicios, semanal, y las charlas sobre actividades tendrán lugar en reuniones especiales.

Una vez nos juntamos y comenzamos a escribir una lista de diferentes actividades que nos gustaría hacer. Estaba algo equivocada sobre el sentido de esta lista y vi con angustia que esto significaría trabajo y responsabilidad. Era todo para realizar en ferias, mercados, actividades en parques de la plaza de la ciudad. Para cada actividad, anotamos lo que queríamos hacer, desplegar la flor de loto, enseñar los ejercicios, recoger firmas y repartir folletos en los partidos de futbol. Escribimos la fecha y hora de la actividad y nombramos a una persona responsable de cada una. Decidimos enviar este documento con los datos a todos los practicantes para que así todos tuviésemos la misma información. En un momento, todo el mundo que estábamos reunidos se hizo responsable de varias actividades y yo sentí que era responsable de tantas actividades como era capaz de hacer. Lo bueno es que todo el mundo se había involucrado y estaba satisfecho con lo que le había tocado. El hecho de que todo el mundo se comprometa y esté detrás de varias actividades supone fuerza para el grupo. También con esto se demuestra que tenemos buenas bases para realizar y continuar con las actividades. Es poderoso cooperar!

Gracias Shifu, Gracias a todos!