[Minghui Net] Soy un estudiante universitario en China. Durante más de siete años estoy practicando Falun Gong. Me he dado cuenta claramente que el Maestro nos ha dado todo lo suyo sin ninguna excepción. Hoy estoy escribiendo todos mis sentimientos acerca de lo precioso de Falun Dafa, de la compasión de nuestro Maestro y de lo grandioso de los practicantes de Dafa. Todo esto ha sido testificado y grabado por la historia.
Obteniendo el Fa
En 1998, en mi primer año de la escuela media, mi vida fue protegida por el más grande fenómeno de la historia. Aprendí acerca de "Verdad, Compasión, Tolerancia", ¡eso quedó profundamente enraizado en mi corazón! Mi primera vez en el sitio de práctica de Falun Gong estuve rodeado de una atmósfera de paz y serenidad, lo cual me hizo sentir fantástico.
El cambio más obvio que experimenté fue la purificación de mi cuerpo. Al comienzo, sufrí mucho debido a alguna enfermedad del karma, y de las tal llamadas "nuevas enfermedades" que fueron difíciles de diagnosticar causándome mucho sufrimiento. Pero no tuve ninguna duda ni deje de confiar en Falun Dafa. Ninguna de las pruebas en forma de enfermedad de karma pudo bloquear el poder de la fe recta. Tan pronto mis pensamientos fueron rectos, la enfermedad desapareció. Esto incrementó mi fe en la cultivación y me sorprendieron los muchos milagros que experimenté.
Después de convertirme en un practicante de Falun Gong, la nobleza y carácter moral de un practicante se manifestaron en mi trato hacia otros y el mirarme a mí mismo en todo momento, me hizo el foco de atención y gané la confianza de profesores igual que de compañeros de escuela. No fui un estudiante particularmente bueno antes de practicar Falun Gong, pero después de eso mejoraron constantemente mis calificaciones. Dafa purificó mi cuerpo y alma y lo más importante, decidí seguirle al Maestro hasta el final de la rectificación del Fa, en el sendero de mi cultivación. La fe recta de un ser que se asimila al Fa me trajo un gozo indescriptible.
En el segundo año en calidad de practicante, la maldad y la horrible persecución cerraron el corazón de la gente. El 20 de julio, 1999, comenzó la campaña con propaganda llena de mentiras que confundieron a la gente. Enfrentando estos problemáticos tiempos, me preguntó mi madre, "¿Crees que lo que la TV dice es verdad?" Le contesté firmemente, "¡No!" Más tarde mi madre me dijo que era el procedimiento estándar del Partido Comunista Chino (PCCh) fabricar historias y mentir en las noticias. Cuando ellos quieren incriminar, allí no habrá falta de "evidencias".
En la escuela media
Mi padre es un policía. Debido a que mi madre es una practicante de Falun Gong firme, nos echó de casa más de una vez. A pesar de esta obscura y terrible situación, mi madre y yo viajamos a pie hasta Beijing para apelar por justicia a favor de Falun Dafa.
Caminamos hasta la Plaza Tiananmen, tratando de acordarnos cómo llegar allá. Inesperadamente, fuimos ilegalmente arrestados y llevados a la estación de policía. Les dijimos abiertamente la razón de nuestra apelación: "Liberen incondicionalmente a todos los practicantes de Dafa detenidos, restauren la reputación del Maestro, y ofrézcannos un ambiente de cultivación pacífica". Dondequiera que estaba, levantaba en alto mi cabeza y actuaba en forma abierta y honorable.
Después que regresamos a casa, mi madre fue detenida. Debido a que yo era menor de edad, mi padre tomó la responsabilidad por mí y me trajo a casa. La carta que escribí en Beijing fue enviada de regreso a mi escuela. Los profesores y oficiales de la escuela tomaron turnos para hablarme. Debido a que ellos no sabían los hechos, pensaron que los practicantes de Falun Gong eran justo como decía la TV. A pesar de que sus palabras fueron sarcásticas, malvadas, y extremadamente insultantes, les dije bondadosamente que no es lo que ellos habían escuchado y corregí sus opiniones equivocadas. ¡Decidí que mis acciones debían ser un ejemplo para mostrarles que la gente practicante de Dafa es buena!
Debido a que hice bien en mis estudios, mis profesores no creían que yo era un practicante. Ellos decían, "¿Cómo puede tan buen estudiante, de conducta excelente, y que lo hace bien académicamente, practique Falun Gong? Siempre les dije que era un buen estudiante de excelente conducta precisamente porque practicaba Falun Gong. Debido a la sabiduría superior que me daba Dafa y la protección del Maestro, mis profesores y compañeros comenzaron a comprender gradualmente a Dafa, para darse cuenta de quién era el culpable de las mentiras, y creer que los practicantes de Dafa eran genuinamente buena gente.
A lo ancho de una gran ciudad, donde 10.000 personas firmaron "oponerse a los [términos difamantes emitidos]", se asomaron oficiales de policía y reporteros de TV. Aunque la policía estuvo supervisada y los oficiales de la escuela fueron amenazados, mis pensamientos rectos firmes de "No firmar" les causó sorpresa pero no peligro, y fui capaz de abandonar a salvo el área. Esto nuevamente muestra el poder de Dafa y de los pensamientos rectos. Nuevamente experimenté que el Maestro está conmigo y me protege.
En la secundaria
Cuando la persecución fue más severa, estuve enfocando un examen de escuela media. A pesar del caos, mantuve excelentes calificaciones. Ingresé a la secundaria que escogí. Eso fue un milagro.
Cuando comenzó la secundaria, mi vida de pronto se volvió serena. Mi padre parecía que se había olvidado completamente de pegarme. Aún más, la escuela perdió todos los archivos de los estudiantes de ese año. Por tanto, desapareció la constancia de mi apelación en Beijing.
Tuvimos que regresar a la escuela media y pedir a nuestros profesores que re escribieran sus evaluaciones. Antes de ir, envié pensamientos rectos durante toda la mañana: "Nosotros no permitimos la persecución a practicantes de Dafa. El Maestro nos ayuda y lo resuelve todo para nosotros. Los practicantes de Dafa no estamos aquí para ser perseguidos".
Tan pronto regresé al campus de la escuela media, la profesora de turno de nuestra clase me encontró y estuvo feliz de verme. Ella tuvo el agrado de volver a escribir la evaluación.
Mientras estuve en la secundaria, siempre estuve entre los estudiantes más adelantados, e incluso recibí una beca. Durante ese tiempo, mis buenos amigos que se opusieron a Dafa en la escuela media, uno tras otro, también comenzaron a practicar Falun Dafa. ¡Los milagros que ellos experimentaron incluso eran más de los que yo había experimentado! Nos reuníamos a menudo para intercambiar puntos de vista, ayudarnos uno al otro, y salvar a la gente con relaciones predestinadas.
En la universidad
Después de un difícil y largo examen para el ingreso en la universidad, fui exitosamente aceptado en la universidad de mi primera opción. ¡Dafa me ha dado todo! En ese momento, familiares y amigos estuvieron contentos al ver que todos mis esfuerzos se hicieron realidad, incluso mi padre me acreditó.
En la universidad, siempre hubo arreglos donde yo podía encontrar a mucha gente, llegar a conocerles y salvarles.
Luego se publicaron los Nueve comentarios sobre el Partido Comunista Chino. La gente debía anunciar las tres renuncias para poder asegurarse un hermoso futuro. Esto se volvió en un aspecto importante para clarificar la verdad. Ahora debía encontrar a quienes antes les había hablado acerca de la verdad, y aconsejarles que abandonaran al Partido Comunista Chino y a sus organizaciones afiliadas.
Al comienzo, me sentí fuera de mi grupo e incluso iba de ida y vuelta cuando hablaba acerca del asunto. Pero todos habíamos madurado y nuestras mentes se volvieron más racionales y despejadas. No somos cultivadores simples, somos discípulos en el período de la rectificación del Fa, y apoyamos el esfuerzo de una gran misión. Debemos ser responsables para los seres conscientes. Ofreciendo nuestros interminables esfuerzos, muchos familiares y amigos cercanos reconocen la naturaleza de la maldad del partido y lo han abandonado.
Durante el proceso de clarificación de la verdad a la gente, constantemente me iluminaba en eso, comprendía y reconocía los principios del Fa, abandonaba mis brechas, hacía progresos, y me mantenía haciendo bien lo que debía ser hecho.
Conclusión
Al recordar mis experiencias durante mis últimos siete años de cultivación, vienen a la memoria los incontables milagros que he experimentado. Con pensamientos rectos, ¡no hay nada que uno no pueda hacer! Uno debe creer en uno mismo, hacer bien lo que los practicantes de Dafa deben hacer, exhibir el comportamiento de los practicantes de Dafa, y salvar a los seres conscientes.
Nuevamente agradezco al Maestro por su misericordiosa salvación y protección. ¡Prometo que los discípulos incluso haremos mejor! ¡Gracias Maestro!
Si encuentran algo equivocado en mi artículo, por favor, ¡no duden de corregirme con compasión!
Fecha de edición: 6/1/2006
Fecha del artículo original: 29/1/2006
Categoría: Reflexiones de practicantes
(Versión en chino: http://minghui.ca/mh/articles/2006/1/18/118936.html)