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Se trata de la primera vez que escuchamos el Fa en la ciudad de Jinan - mis relatos de las conferencias de nueve días

Era el año de 1994. Yo sufrí por las migrañas durante casi 30 años. No podía dormir y consulté a muchos doctores occidentales y chinos, pero ninguno de ellos pudo solucionar el problema. Cuando ya no sabíamos qué hacer, un pariente de Jinan nos escribió diciendo: "El Maestro Li Hongzhi de la montaña Changbai, quien hizo muchos milagros curando enfermedades complicadas, dará conferencias en Jinan, en la provincia de Shandong el 21 de junio. ¡Por favor, apresúrense y vengan!"

Mi marido y yo volamos a Jinan desde Taiwán con algunas esperanzas y asistimos al "Segundo seminario de Falun Gong en Jinan". La sala de conferencias de 4,000 butacas estaba llena. Durante la conferencia, el Maestro Li dijo: "Hoy tenemos dos estudiantes que son de Taiwán". Y también pidió a los voluntarios que nos dieran los libros. Estábamos muy sorprendidos -¿cómo sabía el Maestro que nosotros estábamos allí?

Nuestros cuerpos fueron limpiados rápidamente durante las conferencias de nueve días. También vimos muchos milagros. El primer día un niño de tres años yacía delante de mí en el pasillo. Me pregunté por qué estaba este niño allí. Otra persona me dijo este niño tenía graves problemas psicológicos. Él todavía estaba allí el segundo día. El tercer día vi cómo este niño, anteriormente insensible, jugaba y daba saltos, lo que hizo que mucha gente de la clase viera los poderes superiores de Falun Gong.

Mi pariente me contó otra historia. Una señora que paseaba por fuera de la sala de conferencias tenía un tumor en el cuello. Ella no pudo conseguir una entrada. De pronto ella vio al Maestro entrar en el pasillo y gritó: "¡El Maestro Li, el Maestro Li!". El Maestro se dio la vuelta y echó un vistazo a esta señora. Después, mi pariente y otras personas vieron abrirse un pequeño agujero sobre su tumor. Un fluido parecido a la sangre exudó de aquel agujero, y luego el tumor desapareció.

Después de las conferencias de nueve días regresamos a Taipei. En cuanto llegamos a casa y dejamos el equipaje sentí un dolor en mi abdomen. Tuve diarrea y fiebre. Comprendí que esto era el Maestro limpiando mi cuerpo. Me recuperé después de ocho o nueve días. Desde entonces, cuando voy a comprar a la tienda de comestibles, la cesta de la compra no la siento tan pesada como antes, y también parece como si alguien me empujara hacia adelante. Mi cuerpo es muy ligero. Después de practicar Falun Dafa, muchas enfermedades que me habían molestado durante 27 años, desaparecieron. Mi vida fue renovada. Realmente aprecio la salvación del Maestro.

Otra vez de camino a Guangzhou para asistir a las conferencias - un milagro ocurrió con pensamientos rectos

En diciembre de 1994 mi pariente de China continental me llamó otra vez diciendo: "El Maestro Li dará una conferencia en Guangzhou el 21 de diciembre. Esta es la última conferencia que Él dará. Guangzhou está muy cerca de Taiwán, por favor no desaprovechen esta oportunidad".

Inmediatamente después de que reservamos el boleto de avión, mi marido fue enviado al Hospital Rongmin en Taipei, debido a un dolor agudo en su abdomen. Tenía cálculos biliares. Los doctores sugirieron una intervención quirúrgica inmediata y la programaron para el 21 de diciembre, el día de la conferencia. Nosotros lo conversamos y aún así decidimos ir a Guangzhou para la conferencia. Firmamos el acuerdo con el hospital, y después nos fuimos a casa. Al día siguiente ayudé a mi marido para ir al aeropuerto. El único pensamiento que nosotros tuvimos durante el camino era de escuchar el Fa. En el avión, mi marido se encontró mejor y fue capaz de comer algunas galletas. Cuando llegamos al aeropuerto en Guangzhou, él estaba ya totalmente normal. Nadie podría saber que él estaba enfermo, y fue capaz de caminar sin ayuda.

Practicantes veteranos regalaron sus entradas - docenas de personas vieron Falun

Es muy difícil de describir la dignidad y el gran ambiente de la conferencia en Guangzhou, a no ser que uno estuviera allí. Había aproximadamente 6,000 practicantes. El estadio no podía dar cabida a tantos. Algunos practicantes veteranos tenían un xinxing de alto nivel y cedieron sus entradas a aquellos que no eran de la ciudad, incluidos nosotros y mi pariente. Todavía agradecemos la bondad de aquellos compañeros practicantes.

Cuando el Maestro daba la conferencia, varios cientos de practicantes se sentaron fuera, escuchando la conferencia por la radio. El Maestro fue a verles después y les dijo que el efecto de escuchar afuera era el mismo que si estuvieran adentro.

Como los gastos en Guangzhou eran relativamente más altos que en otras ciudades de China, vimos que muchos practicantes de otros sitios comieron fideos instantáneos en cada comida. Algunos practicantes sólo tenían uno o dos panes cocidos al vapor para cada día. Un practicante de la provincia de Xinjiang acudió a Guangzhou una semana antes. Él había usado todo su dinero y no podía ni comprar panes cocidos al vapor. De noche dormía bajo los árboles o sobre las aceras. Algunos practicantes de Beijing se enteraron de esto, y entonces ayudaron a aquellos de áreas remotas con algún dinero para que de esa forma ellos pudieran escuchar las conferencias del Maestro con calma y sin preocupaciones financieras.

Durante los nueve días, algunos practicantes hicieron los ejercicios sobre la azotea del hotel. Un día cuando nosotros hacíamos los ejercicios alguien gritó: "Hay un Falun en el cielo". Miré hacia arriba y vi un Falun enorme girando en el sentido de las agujas del reloj y en sentido contrario a las agujas del reloj, cubriendo la ciudad entera de Guangzhou. Justo como lo que el Maestro dijo, el símbolo wan y el símbolo taiji también giraban dentro. Había aproximadamente 50 practicantes sobre la azotea. Más de la mitad de ellos lo vio. Ellos estuvieron emocionados, gritando: "Falun, Falun, yo vi el Falun".

El último día de la conferencia, practicantes de todos los sitios de práctica ofrecieron tributos de flores y banderas al Maestro. La ceremonia duró noventa minutos. Las flores y banderas cubrieron completamente la mesa de la conferencia. Después, los practicantes no querían marcharse. Los aplausos se hicieron más y más fuertes, y finalmente vi a muchos practicantes que se marcharon con lágrimas en sus ojos.

(Versión en chino: http://www.minghui.ca/mh/articles/2005/12/6/115907.html)
(Versión en inglés: http://www.clearwisdom.net/emh/articles/2005/12/27/68370.html)

Fecha de edición: 1/1/2006Fecha del artículo original: 5/12/2005