Por un miembro de familia de un practicante de Falun Gong en el noreste de China
(Sabiduriapura.org) Mi madre tenía artritis reumática. Ella estaba casi completamente incapacitada y no podía cuidar de sí misma. Después que en 1997 comenzó a practicar Falun Gong, volvió a ponerse de pie. Más aun, subía las escaleras, iba de compras y volvió a cocinar. Mi madre personalmente experimentó la magnificencia de Falun Gong.
Después de octubre 2000, mi madre y mi hermana, por practicar Falun Gong fueron ilegalmente arrestadas y por varias veces detenidas. Durante ese período, quedé solo en casa. A la policía no le importó mi difícil situación financiera y constantemente me extorsionaba dinero. Ya que tenía que pagar multas, gasté rápidamente todos los ahorros de la familia. Además, la policía fue ordenada a “arruinar” la reputación de ellas, financieramente dejándoles en banca rota y físicamente destruyéndoles solicitado por el Partido Comunista del régimen de Jiang Zemin. El peso mental y financiero que sufro es muy grande.
El 1 de enero 2001, mi madre fue perseguida al borde de la muerte. Ya que oficiales de la Oficina 610 tuvieron miedo de sentirse responsables por su muerte, me ordenaron pagar la multa y recoger a mi madre. Ya que realmente no pude afrontar la multa, me forzaron a firmar una declaración de débito por más de 3000 yuanes y dejaron en libertad a mi madre.
Esto solo fue el comienzo. Mi hermana fue encarcelada en un notorio campo de labores forzadas. Bajo la política extorsionista del régimen de Jiang de que “nadie será responsable si los practicantes de Falun Gong son golpeados a muerte, contándoles a ellos como suicidio”, la vida y seguridad personal de practicantes de Falun Gong no pueden ser garantizados. Durante su detención, ella constantemente escuchaba historias de la persecución a muerte o la descapacitación a practicantes. Los practicantes no eran permitidos tener la visita de familiares. Justo antes del Año Nuevo del 2001, fue torturado a muerte un practicante. Después de fuertes reclamos por parte de miembros de familia, ella tuvo el chance de tener visitas en el campo. ¡Realmente atesoré esta oportunidad ya que pensaba que nunca más la volvería a ver! Un día después del Año Nuevo cuando fuimos a visitar a mi hermana, un guardia de policía en la entrada al campo de labores nos engañó haciéndonos firmar un acuerdo como “permiso de ingreso” que tenía palabras que difamaban a Falun Gong y que las cubría con su mano. Mas tarde, escuché que dos hijas de una practicante encarcelada habían rechazado firmar el acuerdo y no fueron permitidas las visitas a sus familiares. Esta practicante dijo a los guardias del campo de labores, “¡Estoy orgullosa de mis dos hijas”.
De inmediato después, mi madre fue ilegalmente arrestada nuevamente y detenida en el mismo campo de labores. Cerca al Año Nuevo del 2002, mi madre y hermana se dieron en huelga de hambre para resistir la persecución. Cuando mi hermana estuvo casi por morir, oficiales del campo de labores me dijeron, “Trae 2000 yuanes y recoge a tu hermana”. Al día siguiente reuní 500 yuanes. La supervisora del campo de labores del grupo de mujeres me dijo, “Aunque no has podido conseguir el dinero suficiente, tú tienes familiares. ¡Pídeles dinero prestado a ellos! Le dije, “Puedo pedirles prestado ese dinero, pero ¿cómo les voy apagar?” Después de escucharme, se alejó sin decir una sola palabra. Para poder poner en libertad a mi hermana tan pronto me era posible, pagué 500 yuanes en efectivo, firmé un acuerdo de débito por 2000 yuanes y fui forzado a firmar una declaración de garantía.
Después de eso, en varias ocasiones mi madre estuvo por morir. Nuevamente el campo de labores me pidió les pagara dinero y también que mi hermana fuera a cambio de mi madre. ¡Qué terribles fueron sus palabras! Mi hermana estaba comenzando a recuperarse del borde a la muerte y la vida de mi madre estaba en extremo peligro. ¿Cómo podría escoger entre ellas? La experiencia fue extremadamente dolorosa. Cuando fui al hospital, casi no podía reconocerle a mi mamá porque había sido torturada tan malamente. Mis primeras palabras a ella fueron, “¿Mamá? ¿Eres tú, mamá?” Los policías se mantuvieron demandándome que les diera mi dirección y dónde trabajaba y dijeron que de inmediato iban a arrestar a mi hermana. Encarando esas responsabilidades, quién no tiene consciencia humana, era extremadamente doloroso. No les dije dónde estaba mi hermana. De todos modos, estaba muy preocupado por la salud de mi madre. Les pagué más de mil yuanes y les escribí un acuerdo de garantía por mi mamá. Vi que mi madre estaba extremadamente débil y se había reducido a huesos y piel. Después de leer mi acuerdo de garantía, la supervisora del grupo de mujeres furiosamente me devolvió el acuerdo y me dijo, ¡Esto no es una garantía - esto más bien es un tipo de acusaciones en contra nuestra!” Como resultado, mi madre no fue puesta en libertad. Tan débil como estaba debido a las torturas mentales y físicas, aún así es requerida hacer labores forzadas.
Esta persecución aún sigue. Por tanto muchos practicantes están detenidos en cárceles. Sus miembros de familia están sufriendo el mismo tormento.
17 de abril, 2005
Fecha de edición: 25/5/2005
Fecha de artículo original: 12/5/2005
Categoría: Información sobre la persecución
Traducido: 20/5/2005
Versión en chino disponible en: http://minghui.org/mh/articles/2005/4/28/100614.html
Versión en Inglés disponible en: http://www.clearwisdom.net/emh/articles/2005/5/13/60704.html