Nuevo acoso del Partido Comunista Chino (PCCh) a argentinos que practican Falun Dafa
Ola de llamados en varias partes del país con mensajes difamatorios pre-grabados
Ayer, miércoles 23 de febrero, entre las 14 hs. y las 17, practicantes argentinos de Falun Gong (Falun Dafa) de Buenos Aires y de las provincias de Tucumán, Córdoba, Santiago del Estero y Chaco recibieron un promedio de 10 llamadas pre-grabadas cada uno con intervalos de entre 15 y 30 minutos aproximadamente. Las llamadas tenían una versión en chino mandarín y otra en inglés, con una duración cerca de 4 minutos. En ellas se escuchaba la voz de una mujer china acusando a Falun Gong de formar organizaciones para atacar a China, y difamando el nombre de su fundador el Sr. Li Hongzhi. Algunos practicantes grabaron las llamadas como prueba e hicieron la denuncia en las comisarías de policía locales.
Las llamadas recibidas ayer por practicantes en Argentina no son un hecho aislado. Según un informe del periódico interncacional Epoch Times (version en español: La Gran Época) del 11/02/2005, practicantes de Falun Dafa (y sus familias) de al menos 13 países de Europa, así como EE.UU, Canadá, Autralia y Hong Kong ya habían comenzado a sufrir el acoso telefónico de esta campaña propagandística unos días antes (dos días antes del Año Nuevo del calendario lunar chino). Para la fecha del informe, la cantidad de llamados recibidos por cada practicante en Finlandia superaba el promedio de 200.
Esta continuidad e insistencia de llamados telefónicos forzados, repitiéndose una y otra vez en forma constante, hace recordar, salvando las diferencias de violencia y crueldad, al típico método utilizado actualmente por el PCCh en las “sesiones” de lavado de cerebro a los practicantes de Falun Dafa detenidos ilegalmente en China. En ellas se obliga a los practicantes a escuchar y ver durante las 24 horas, día y noche sin dormir, videos o grabaciones orales difamando la práctica, con polícías turnándose para propiciar golpizas en caso de que el practicante se duerma. Todo eso se perpetúa hasta que el practicante desista de sus creencias y renuncie al aprendizage de los principios de verdad, benevolencia y tolerancia, cosa que en la mayoría de los casos no ocurre. Evidentemente el PCCh, con su campaña telefónica, intenta aplicar la idea de Hittler de “repetir un misma mentira una y otra vez hasta que se haga verdad,” molestando ridículamente a los practicantes argentinos y del mundo y sus familias haciéndoles sonar el teléfono para escuchar continuamente las mismas mentiras.
La siguiente es una declaración de un practicante de Falun Gong de Santiago del Estero luego de ser víctima de estas llamadas: “Las campañas vergonzosas del PCC demuestran ya la desesperación de ese régimen que ha cometido crímenes en toda su historia. Este tipo de actos perjudica la armonía de las familias, sobre todo de los miembros jóvenes y viola las leyes argentinas. Creo que debido a la publicación del Epoch Times de los ‘9 comentarios sobre el PCCh’ a fines del año pasado, que ya ha generado la declinación de miles miembros del Partido, sumado a su frustración por su inhabilidad para erradicar la práctica espiritual pacífica de Falun Gong, el régimen chino está buscando desesperadamente formas de detener la revelación de la verdad sobre su situación de DDHH, y más ahora que estamos a 20 días del comienzo de la reunión de Comisión de DDHH de las NU en Ginebra. Lo que ellos quieren suprimir no es un grupo de personas que luchan por poder político, ni por intereses personales, ellos quieren acabar con personas que tratan de ser buenas, están atacando a la humanidad. Lo que hacemos es contar a la gente la verdad sobre este genocidio y por eso el PCC está temeroso y, ante la imposibilidad de ejercer todo su potencial violento en el exterior, reacciona de esta manera. En definitiva, trata de ‘convencer’ especialmente a quienes exponen la verdad y crear controversias en sus familias.”
Los argentinos que practican Falun Dafa vienen padeciendo de distintas maneras la persecución del régimen chino: golpizas recibidas por chinos con complicidad de la prefectura y la policía durante la vista del presidente chino, Hu Jintao, amenaza de muerte de agregado cultural de la embajada china, amenazas telefónicas, campaña oficial de difamación y censura por parte de diplomáticos chinos, y otras.
¿Hasta cuándo dejaremos que nadie sepa que el régimen terrorista chino ha estado violando la soberanía de nuestro país intentando suprimir a ciudadanos inocentes en nuestro territorio con todos estos actos ilegales, como parte de su campaña genocido contra gente inocente y buena como lo son lo practicantes de Falun Dafa? ¿Son los intereses comerciales los hacen estos actos permanezcan ocultos?
Fecha de edición: 2/3/2005
Fecha del artículo original: 24/2/2005
Categoría: Medios de Difusión