Declaración de prensa - 21 de enero de 2005- Centro de Información europeo de Falun Gong
LONDRES – Diversas informaciones elaboradas y deformadas minuciosamente por el Ministerio chino de propaganda para su campaña de persecución tienen en estos últimos años abierto un camino hasta los lugares a priori más improbables: los artículos de los medios de comunicación occidentales creíbles.
Este domingo, 23 de enero de 2005, marca el cuarto año desde que cinco individuos supuestamente se autoinmolaron en la Plaza Tienanmen de Pekín. Apenas algunas horas después del incidente y hasta hoy día, el Ministerio de propaganda chino lanzó una campaña de odio en la que declaraba que los inmolados eran practicantes de Falun Gong, con el fin de tratar de justificar la violenta represión de la práctica que empezó en julio de 1999 bajo el régimen de Jiang Zemin.
Uno de los medios más eminentes de Europa informa en su calendario histórico del 23 de enero, que cinco individuos "seguidores del prohibido movimiento espiritual Falun Gong se auto inmolaron en la Plaza Tienanmen de Pekín en una tentativa de suicidio colectivo”. No se proporciona ninguna fuente de información ni punto de vista alternativo.
Es un desgraciado ejemplo de un fenómeno demasiado corriente; el medio trata las noticias que vienen de agencias de prensa chinas controladas por el Estado como fuentes creíbles sobre Falun Gong e incluso peor todavía, repiten las informaciones como hechos innegables.
En la inmensa mayoría de las noticias sobre la "auto inmolación", el hecho es que, durante más de un año después del incidente, ninguna tercera parte - medios de comunicación u otro - tuvo la posibilidad de acercarse a los individuos implicados, mientras para que los medios de comunicación chinos controlados por el Estado continúan vendiendo un reportaje tras otro sobre el incidente y no mencionan esto.
Sólo un periodista occidental conocido que investigó la historia, un reportero de Washington Post con sede en Pekín, descubrió que ninguna persona de la ciudad natal de los dos presuntos inmolados los había visto jamás practicar Falun Gong y esto no es mencionado.
Un documental premiado [// www.fr.clearharmony.net/articles/200311 / 10621.html] que investigó el incidente, identificó de contradictorias las informaciones publicadas por las agencias de prensas controladas por el Estado, haciendo ver a los observadores chinos y a por lo menos un miembro de una organización de las Naciones Unidos que el incidente fue dirigido por funcionarios chinos para cambiar la opinión pública en contra de Falun Gong, y esto tampoco se menciona.
Que el acto de suicidarse oponiéndose a las enseñanzas de Falun Gong, que dice que toda forma de homicidio incluido el suicidio es pecado o como se estipula en términos budistas, crea grandes cantidades de karma, no es mencionado.
Que durante los seis primeros meses de la persecución, los medios controlados por el Estado publicaron más de 300.000 informes atacando Falun Gong con el fin de convencer a la población china y a la comunidad internacional de que la persecución no existe, describiendo al mismo tiempo a Falun Gong como “peligroso” o “amenaza” con el fin de contrarrestar las críticas contra la persecución, no es mencionado. Las informaciones difundidas por el Estado sobre el incidente de la auto inmolación están en el corazón de esta campaña para difamar a Falun Gong
Entonces, ¿por qué una parte muy grande de esta historia a menudo no se explica en los medios internacionales mientras que la línea del Partido Comunista chino está siempre en disposición de buena información y en algunos casos de modo unilateral?
En el contexto de las atrocidades contra los practicantes ampliamente difundidas a través de China, no podemos tomar las informaciones de los medios de comunicación controladas por el Estado sobre Falun Gong como noticias fiables, ni dar credibilidad a sus fuentes ni podemos saber hasta que punto sus informaciones son apoyadas por hechos verdaderos. En efecto, hay que usar la prudencia y una justa vigilancia al repetir las noticias de las agencias de prensa chinas que son totalmente controladas por la jefatura comunista.
No sugerimos una censura de sus noticias vinculadas a Falun Gong. Al contrario, apelamos a los medios de comunicación internacionales a ahondar más en esta historia y a no creer solamente lo que dicen los dirigentes del Partido Comunista chino sobre Falun Gong a través de sus "agencias de prensa", portavoces, etc. Que justifiquen lo que digan, lo que tratan de esconder y más importante todavía, que es lo que sabe la población china de los más de 100 millones de personas que practican Falun Gong.
Aunque los informes y las declaraciones propagandistas comunistas chinas valen la pena consultarse, creemos que la verdadera historia se encuentra detrás de las paredes de los miles de campos de trabajo, centros de detención, comisarías de policía y centros de lavado de cerebro de donde continúan saliendo cada día las historias intensas de abuso, torturas, violaciones y matanzas de practicantes de Falun Gong.
La comunidad internacional debe comprender toda la historia de Falun Gong en China. Pensamos que las agencias de prensa creíbles del mundo tomarán la responsabilidad de promover esta historia sin tener en cuenta la presión que podrían – como sucede a menudo - proceder de la jefatura china para impedirles informar o para hacerlo según sus criterios.
Fecha de edición: 30/1/2005
Fecha de artículo original: 17/1/2005
Categoría: Noticias y eventos alrededor del mundo