(Minghui.org) Soy un joven practicante de Falun Dafa. Actualmente estoy en mi primer año de universidad. Tuve la suerte de obtener Dafa a mediados de 2018. Por lo tanto, me gustaría compartir con todos algunas de mis experiencias de cultivación.

Obtención del Fa

Un día a mediados de 2018, cuando caminaba por la orilla del río, mi madre y yo vimos a un grupo de personas haciendo los ejercicios de Falun Gong. Curiosos, nos detuvimos a observar un poco. Un practicante nos dio entonces una pequeña flor de loto hecha a mano y un folleto informativo de Falun Gong (también llamado Falun Dafa).

Mi madre había oído hablar de Falun Gong y de cómo la gente se beneficiaba de la práctica de esta cultivación. Por eso, cuando volvimos a casa, se metió a Internet para buscar más información. Entonces decidió empezar a practicar Dafa. Al principio, yo no tenía intención de practicar Dafa porque pensaba que todavía era joven. Quería esperar hasta más adelante.

Sin embargo, un día que estaba viendo un vídeo donde aparecía una escena del Maestro enseñando a los nuevos practicantes en China cómo hacer los ejercicios, surgió una emoción indescriptible y conmovedora desde lo más profundo de mi ser -una emoción que nunca había experimentado antes- al ver el rostro compasivo del Maestro. Le dije a mi madre: "¡No hay duda de que el Maestro no es una persona común!". Desde ese momento, comencé a practicar Falun Dafa junto con mi madre.

Mejoras físicas y mentales

Mi salud ha mejorado significativamente desde que empecé a practicar Dafa. Antes tenía rinitis alérgica y bronquitis aguda, que me molestaban mucho porque incluso un pequeño olor extraño o el viento frío podían afectar fácilmente a mi sistema respiratorio e impedirme respirar con normalidad. Tenía que visitar al médico con frecuencia y necesitaba medicarme casi a diario.

Desde que empecé a cultivarme en Dafa, me recuperé de todas mis enfermedades y ya no tomo ninguna medicina. Mi cuerpo se volvió más ligero, más sano, y me llené de energía. Antes me cansaba fácilmente al hacer las tareas domésticas, pero ahora puedo ayudar a mi madre desde la mañana hasta la noche sin sentirme cansado.

Cuando conocí Dafa, oí a otros practicantes decir que el libro Zhuan Falun -el libro principal de Falun Dafa, que enseña a la gente cómo convertirse en buenas personas siguiendo los principios de Verdad, Benevolencia y Tolerancia -podía responder a muchas preguntas sobre la vida. En aquella época, tenía muchas preguntas que nadie podía responder, así que intenté leer Zhuan Falun. Me fascinó lo que leí en Zhuan Falun. Esas preguntas me habían perseguido desde que era un niño. Eran: "¿Quién soy?". "¿Para qué vivo?", etc. Todas fueron respondidas en Zhuan Falun.

El Fa del Maestro era como una luz en mi corazón, ahuyentando la oscuridad y mostrándome el camino hacia un futuro brillante.

Cultivando en un ambiente de estudio

Desde que empecé a cultivarme, Dafa me ha dado sabiduría. Mis pensamientos son más claros y mi memoria es mucho mejor. Puedo entender y recordar las lecciones rápidamente. Cuando todavía estaba en la escuela secundaria, la mayoría de mis amigos tenían que gastar mucho tiempo y dinero tomando clases adicionales para obtener buenos resultados de estudio.

Yo no necesito estudiar tanto, pero sigo siendo el mejor de la clase. Cuando mis amigos vieron esto, se sorprendieron mucho y me preguntaron por el secreto. Les dije que la práctica de Falun Dafa me había ayudado a mejorar mi memoria y mi capacidad de pensar y resolver problemas.

Algunos de mis amigos quisieron entonces aprender más sobre Dafa, así que les di algunos folletos que aclaraban la verdad y flores de loto hechas a mano. También presenté Falun Dafa a algunos de mis profesores. Todos se alegraron de recibir las flores de loto y uno incluso quiso leer Zhuan Falun.

A veces no equilibraba bien la relación entre la cultivación y el estudio. Empecé a confiar en la sabiduría que me había regalado Dafa. No hacía los deberes porque pensaba que no eran necesarios. Solo quería pasar más tiempo estudiando el Fa y haciendo los ejercicios. Pensé que eso mejoraría mi estado de cultivación. Pero, al contrario, mi estado de cultivación empeoró. Perdí mucho tiempo mientras hacía cosas porque no podía concentrarme. Por lo tanto, mi tiempo para cultivarme y estudiar era cada vez menor. Después de mirar hacia adentro, me di cuenta de que no había seguido lo que el Maestro había enseñado.

El Maestro dijo:

“Esto se debe a que una persona que refina gong debe reflejar que es una buena persona dondequiera que esté" (Zhuan Falun Fajie).

“Piensen todos un poco, de este modo, siendo un alumno, siendo un estudiante tu deber es estudiar bien, porque eres un estudiante” (Zhuan Falun Fajie).

Después de corregir mi estado, me fue bien como estudiante -todo cambió inmediatamente. Mi resultado de estudio mejoró, y también tuve suficiente tiempo para terminar de estudiar el Fa y hacer los ejercicios.

Hubo una época en la que no me iba bien en los exámenes. Tenía miedo de sacar malas notas, así que pretendía copiar las respuestas de mi amigo aunque sabía que no era correcto hacerlo.

Examen de xinxing

Me di cuenta de que aquel era un examen de xinxing para mí, así que abandoné la idea de hacer trampas. En ese momento, las respuestas aparecieron de repente en mi cabeza y pude completar el examen.

En mi clase del instituto, parecía que le caía mal a un compañero. Cada vez que sacaba una nota alta en un examen, me decía palabras sarcásticas y provocativas. Yo intentaba mantener la calma y no contender. Una vez incluso me envió una carta, diciendo lo mucho que le irritaba mi comportamiento. Al principio, me sentí herido. Luego me calmé y me pregunté qué tipo de apegos estaban surgiendo.

Me di cuenta de que solo lo había tolerado en la superficie, pero en mi corazón no había dejado de lado mis apegos. Por ejemplo, siempre había pensado que tenía envidia de los resultados de mis estudios, pero no me había dado cuenta de que yo también estaba celoso de las puntuaciones y clasificaciones de otros estudiantes. Me sentía incómodo cuando veía que otros sacaban mejores notas que yo. Era una manifestación de celos, de no querer ser superado por los demás.

Reflexionando un poco más, me di cuenta de que muchas veces, cuando sacaba buenas notas, aunque no presumía, en mi mente seguía desarrollando la complacencia con mis capacidades. También descubrí los apegos de rectificarse a sí mismo, de luchar por la fama, de presumir y de no querer escuchar palabras duras. Después de descubrir esos apegos, envié pensamientos rectos para eliminarlos y traté de que mi mente no se dejara llevar por ellos.

Mantuve una actitud alegre y amistosa y lo traté bien. Su actitud hacia mí cambió gradualmente. Se volvió cada vez más amable y tomó la iniciativa de empezar a charlar conmigo. Después de terminar el instituto, aunque no estudiabamos en la misma universidad, seguimos manteniendo el contacto.

Aprender a ser una persona verdaderamente buena

Desde que era pequeño, siempre he querido ser una buena persona. Pero, en realidad, la gente de esta sociedad siempre se pelea y se engaña para obtener beneficios personales. Me resultaba muy difícil ser una buena persona. Algunas personas decían que ser demasiado amable solo me traería desventajas y que debía ser más prudente para proteger mis intereses personales. No quería perder mi buen carácter, pero no sabía cómo hacerlo. Esto me había molestado todo el tiempo hasta que encontré Dafa.

El aprendizaje del Fa del Maestro me ayudó a darme cuenta de cómo llegar a ser una persona verdaderamente buena. Antes, al compararme con la mayoría de la gente de la sociedad, suponía que era una buena persona. La gente a mi alrededor también decía que era amable y cariñoso. Sin embargo, al compararme con el Fa, me di cuenta de que no había alcanzado el nivel de una persona verdaderamente buena. Era porque detrás de mi propósito de ser una buena persona estaba el deseo de ser amado y respetado por otras personas y de alejarme de las tribulaciones. Eran los apegos de luchar por la fama y la reputación. Mi verdadero propósito de ser una buena persona seguía regido por el egoísmo.

El Maestro dijo:

"Zhen-Shan-Ren es el único criterio para evaluar si una persona es buena o mala" (Primera Lección, Zhuan Falun).

Me di cuenta de que una persona verdaderamente buena sigue los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia, sería una persona desinteresada que siempre se preocuparía por los demás en primer lugar, y no esperaría recibir nada por hacer buenas acciones para los demás. Por lo tanto, traté de cambiar mi propósito desde la raíz. En la vida cotidiana, aprendí a pensar y a preocuparme por mi familia, mis amigos y todos los que me rodean.

Me esforzaré por cultivarme según el Fa del Maestro para convertirme finalmente en un ser desinteresado y altruista.

Epílogo

He obtenido muchos beneficios mentales y físicos desde que empecé a cultivarme en Dafa. Es como si hubiera recibido una nueva vida. Ya no me siento cansado y perdido. Ahora sé qué tipo de persona debo ser y cuál es el verdadero sentido de la vida.

Mirando hacia atrás en mi camino de cultivación, me he dado cuenta de que el Maestro siempre ha estado a mi lado: me ha guiado y cuidado. A menudo, el Maestro me dio pistas a través de las palabras de otros practicantes o de pasajes de las enseñanzas del Fa que leí por casualidad. Me animaron cuando me enfrentaba a las dificultades. No hay palabras que puedan describir mi gratitud al Maestro y a Dafa. Me cultivaré bien y estaré a la altura de la compasión del gran Maestro. Espero que cada vez más personas en todo el mundo escuchen y comprendan que "¡Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno!".

Todo el contenido publicado en este sitio web tiene derechos de autor de Minghui.org. Minghui producirá compilaciones de su contenido en línea regularmente y en ocasiones especiales.