(Minghui.org) Hace poco, un practicante local no chino nos tomo una foto haciendo los ejercicios en nuestro sitio de práctica. Comentó que todos nosotros parecíamos muy serios, incluso un poco tristes, y eso se aplicaba a todos los practicantes de allí. Transmitió sus observaciones al coordinador del sitio de práctica, que me lo comunicó con un tono de voz serio.

El comentario era sincero. Hace unos años, mi hijo vino a nuestro sitio de ejercicios y me dijo: "Parecías triste y enfadado". Entonces no le di mucha importancia y pronto lo olvidé. Pero esta vez tuve que tomar en serio la observación. Cuando hacemos los ejercicios, se supone que debemos "Presentar una cara bondadosa y serena" (Capítulo Quinto, Falun Gong).

La expresión de mi rostro ha sido la opuesta a la que el Maestro requiere de nosotros y parece haber empeorado con los años.

El Maestro dijo:

"Hay otra situación, que se llama practicar inconscientemente una vía perversa. ¿Qué significa practicar inconscientemente una vía perversa? Quiere decir que uno practica una vía perversa sin saberlo. Esto es muy común, hay simplemente demasiados de estos casos. Como dije el otro día, hay muchas personas que practican gong con pensamientos incorrectos en sus mentes; mira cómo hace la postura de estaca, sus manos y piernas tiemblan de fatiga. Pero su mente no está ociosa y piensa: «Los precios van a subir, así que tengo que comprar algo. Cuando termine la práctica iré de compras, si no, los precios subirán». Y otro reflexiona: «Ahora en mi entidad de trabajo se están repartiendo viviendas, ¿habrá una de estas viviendas para mí? ¿Por qué la persona que se encarga de repartirlas está en mi contra?». Cuanto más piensa, tanto más se enfurece: «Seguramente no me va a dar ninguna vivienda, cómo peleo con él…» Tienen toda clase de pensamientos. Como dije antes, parlotean desde asuntos familiares hasta grandes asuntos del país, y cuando abordan temas que los irritan, se enfadan más" (Quinta Lección, Zhuan Falun).

En realidad no había cumplido ninguno de los requisitos establecidos por el Maestro. Mientras hacía los ejercicios, mi mente estaba siempre activa, pensando en todo tipo de cosas, incluyendo a veces pensamientos de ira. No era de extrañar que mi expresión facial nunca fuera de serenidad. Afortunadamente, se me alertó del problema. Shifu siempre ha dicho que es bueno que hagamos ejercicios en el sitio de práctica.

El coordinador del sitio dijo: "Todos deberíamos sonreír". Ciertamente, él sonríe todo el tiempo y siempre hace los ejercicios todos los días. Un practicante no chino le dijo una vez que llevaba buena energía y que se sentía bien estar cerca de él. En comparación, yo lo había hecho muy mal.

Me había desviado de los requisitos de Dafa sin darme cuenta. No hacía mucho, me había preguntado por qué no estaba cosechando los beneficios de los ejercicios y por qué me faltaba fuerza en las manos incluso para abrir una botella. Peor aún, no busqué la causa en mi interior, sino que sentí dudas sobre el Maestro y Dafa. Me alegré mucho de que la cuestión surgiera ahora y me diera la oportunidad de enmendar mi error.

El Maestro dijo:

“…si has caído, no te quedes allí tumbado, ¡levántate en seguida!”(Exponiendo el Fa durante el Festival de la Linterna, 2003).

Ahora me recuerdo siempre que debo "mantener una expresión serena en el rostro". Tengo que estar sonriendo, ya sea haciendo los ejercicios o lavando los platos. Mientras estoy sentado frente al ordenador, a veces me toco la cara para comprobar que llevo una sonrisa. Cuando estoy frente a un espejo, me aseguro de componer una sonrisa. Aprovecho cualquier oportunidad para irradiar buena energía.

Me gustaría recordar a mis compañeros practicantes: ¿mantienes una expresión serena en tu rostro y sonríes ahora?

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