(Minghui.org) ¡Saludos, Maestro! ¡Saludos, compañeros practicantes!
Vivo en una zona rural y no hay practicantes en los pueblos cercanos. Por ello, tengo pocas oportunidades de interactuar con otros practicantes. Solo puedo hablar con practicantes de fuera de la ciudad probablemente una o dos veces al año. Afortunadamente, tengo acceso al sitio web Minghui, que me ha ayudado a mantenerme en el camino durante estos años.
Como practicante, sé que tengo que hablar a los demás sobre Falun Dafa y desenmascarar las mentiras difamatorias difundidas por el Partido Comunista Chino (PCCh). Cuando me escucharon hablar de los crímenes que el PCCh ha cometido contra nosotros, 71 personas me dijeron entre enero y agosto de este año que querían renunciar al PCCh y a sus dos organizaciones juveniles. Esto puede ser relativamente fácil para los practicantes que son diligentes. Pero para mí, fue una gran labor persuadir a esas 71 personas para que renunciaran al PCCh. A continuación, algunos detalles.
A finales del año pasado vi un artículo en Minghui en el que se preveía cuántas personas más podrían salvar los practicantes antes del final de la Rectificación del Fa, a juzgar por el número diario de personas que renunciaban a su membresía en el PCCh y a sus organizaciones. Estaba preocupado por el bajo número, pensé que la situación no mejoraría si seguía haciéndolo tan pobremente. Sabía que tenía que mejorar en cuanto a aclarar los hechos y salvar a más personas.
Soy introvertido y no se me da bien hablar con la gente. Mi esposa se queja a menudo de ello en casa y en el trabajo tampoco hablo mucho. Esto es un obstáculo para mí. Pero también sabía que no podía ser una excusa para no aclarar los hechos. Al menos debería trabajar en mi timidez y seguir aprendiendo a hablar con la gente. Además, hay muy buenos ejemplos en Minghui.
Durante este proceso, me esforcé mucho y superé muchos apegos.
"Por favor, no me avergüences. Tómatelo con calma y quédate en casa en lugar de correr por ahí", dijo mi mujer. "Si pierdes tu trabajo [por explicar la verdad sobre Falun Dafa a la gente], pediré el divorcio".
Varios compañeros de trabajo con los que me llevo bien también me dijeron: "Puede que los directivos sepan que estás hablando de Falun Dafa aquí. Por favor, ten cuidado y evita los problemas".
En una ocasión, hubo una reunión de todo el municipio con representantes de las principales agencias y organizaciones. Un dirigente municipal señaló que algunos empresarios (incluido el mío) seguían empleando a personas que practican Falun Dafa. "Mira, todo el municipio sabe lo que haces ahora", me dijo un amigo. "Por favor, ten cuidado porque el PCCh podría aplastarte fácilmente".
Frente a estos desafíos, sabía que no podía dejarme intimidar por este tipo acontecimientos superficiales. Después de todo, como practicante, debo alinearme con los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia. También, debo cumplir mi misión de contarle a la gente los hechos y ayudar a salvarla.
A menudo mantenía conversaciones individuales. Así podía explicar las cosas con claridad, lo que a su vez aumentaba mi confianza. Después de cada conversación, anotaba en un cuaderno el nombre de la persona que había aceptado renunciar al PCCh. En abril de este año, más de 30 personas habían decidido renunciar. En agosto, la lista había aumentado a 71. Sé que esto fue un estímulo del Maestro. Con estas experiencias y el aprendizaje constante de otros practicantes, también me he encontrado cada vez más seguro para aclarar la verdad a la gente cara a cara.
Un practicante que vive en la ciudad me dijo: " Ustedes, los aldeanos, son gente modesta. Es relativamente fácil convencerles de que renuncien al Partido".
"No estoy tan seguro de eso", respondí. "Cuando el PCCh calumnió a Falun Dafa, difundió propaganda de odio por todas partes. Mucha gente se dejó engañar y no escucha".
Cuando hablé de Falun Dafa en el pueblo, algunas personas no dijeron nada, pero pude ver por sus expresiones que tenían una actitud negativa. Algunos me contradecían y no fui capaz de rebatir sus argumentos porque no era elocuente. Aunque me sentía humillado y perdí la cara, no me sentí molesto ni dispuesto a rendirme. Con el apoyo de Falun Dafa y del Maestro, sé que tendré la sabiduría para cumplir mi misión.
Un vecino obstinado
Uno de mis vecinos, Lei, solía estar en contra de Falun Dafa. Intenté hablar con él sobre este tema, pero o bien se callaba o discutía conmigo. Envié pensamientos rectos, pero aun así no me escuchó.
"Vamos, hablemos de otra cosa, ¿vale?", decía él.
Pero sabía que esto era la cosa más importante para su vida y que tenía que hacer un avance.
"Si no puedo ayudar ni a mi vecino, ¿a quién más puedo ayudar?", pensé.
Un día, mientras estudiaba las enseñanzas de Falun Dafa, pensé en Lei y en por qué no había aceptado renunciar al PCCh. "¿He hecho algo inapropiado?", me pregunté. Entonces me di cuenta de que había sido amable con Lei porque quería que renunciara a su membresía en las organizaciones del PCCh para poder añadirlo a mi lista. Se trataba de un motivo egoísta, y estaba profundamente enterrado. Sin embargo, las viejas fuerzas podían estropear las cosas debido mi apego. Además, el hecho de que Lei no hubiera cambiado era porque estaba esperando a que yo cambiara.
El Maestro dijo:
“Tú tienes que salvarme, todos dicen que tú tienes que salvarme, tú tienes que salvarme, pero la forma en que se manifesta no es como la lógica y las razones del mundo humano, que cuando pides algo tienes que ser muy cordial, muy humilde: tú me salvas, entonces primero tengo que agradecerte, yo te daré algo provechoso; pero no es así. Según como lo ven ellos, “si puedes salvarme tendrás que llegar a mi nivel. Tienes que tener esta poderosa virtud, recién así puedes salvarme. Si tú no tienes esa virtud poderosa, si no has llegado tan alto como yo, ¿cómo me salvarás?” Entonces ese hace que caigas, que sufras tribulaciones, que elimines tus apegos, y después [ese] establece tu poderosa virtud y cuando te hayas cultivado a ese nivel, recién podrás salvarlo; todos lo hacen de esta manera” (Los Dafa dizi tienen que estudiar el Fa, Colección de Enseñanzas del Fa, Vol. XI).
Decidí rectificarme y ser verdaderamente bueno con él de todo corazón. Por ejemplo, Lei tiene mala salud y no puede hacer trabajos pesados. Cuando necesitaba mi ayuda, acudía y hacía bien el trabajo. Cuando pasaba por su casa y le veía trabajando, a menudo me paraba para ayudarle. Esto incluía plantar verduras, rociar herbicidas y levantar o cargar objetos pesados. Incluso si había barro o llovía, le ayudaba. Simplemente le ayudaba sin pedir nada a cambio ni aceptar nada de él. Así, nos hicimos cada vez más amigos.
Esta primavera me pidió que le ayudara a cortar leña, así que fui. Es un trabajo que requiere mucha fuerza, así que básicamente lo hice yo solo debido a su mala salud. Primero trasladé los troncos a la sierra de mesa, luego los corté y los apilé. Había más de dos toneladas de troncos y estuve ocupado todo el día. Al verme trabajar tan duro, todo sudado y con serrín por todas partes, se conmovió mucho y siguió diciendo que era una buena persona. Aprovechando la ocasión, le expliqué que el PCCh está condenado por los pecados que ha cometido. Como todos nosotros habíamos jurado dedicar nuestra vida al régimen cuando nos afiliamos a sus organizaciones, tenemos que renunciar a nuestras afiliaciones para evitar las consecuencias. Pensé: "Que renuncie o no es su decisión, pero tengo que ayudarle a que lo tenga claro".
Para mi sorpresa, Lei no me contradijo esta vez. "¡Sí! Renuncio", dijo. Me alegré mucho por él. Al ver cómo había cambiado, su mujer también renunció a la Liga Juvenil y a los Jóvenes Pioneros. Lei me elogiaba a menudo delante de los demás: "¡Este hombre es realmente impresionante!". Otras personas del pueblo también me respetaban.
Después de que la familia de Lei renunciara a las organizaciones del PCCh, no dejé de ayudarle. Seguí echándole una mano siempre que era necesario. Hice esto antes de escuchar lo siguiente. Cuando estaba de visita en la sede del condado, escuché a alguien decir: "Estos practicantes de Falun Dafa son un poco raros. Cuando hablan de renunciar al PCCh, son muy amables contigo. Después, actúan como si no te conocieran. ¿Qué está pasando?". Sabía que esa situación era poco frecuente, sin embargo, ese comportamiento arrogante está relacionado con la cultura del PCCh. Los practicantes somos realmente desinteresados y considerados con los demás. Eso también es una manifestación de nuestro nivel.
Estableciendo vínculos
De las 71 personas de mi lista, la mayoría ha oído hablar de Falun Dafa a través de mí en diferentes ocasiones. En las zonas rurales se celebran muchas reuniones, como bodas, funerales, construcción de una casa, mudanza a un nuevo hogar, ingreso en el ejército, ingreso en la universidad, cumpleaños importantes y otros. El dinero es escaso en las zonas rurales, y los aldeanos pueden recaudar fondos organizando este tipo de eventos.
Sabiendo que es una gran oportunidad para conocer gente, intento asistir a todos los eventos que puedo. En ocasiones, cuando me encuentro con alguien por la calle, puedo entablar una conversación y preguntarle cómo le va todo. "Todos somos vecinos o familiares, así que deberíamos ayudarnos unos a otros. ¿No es así?", he dicho a menudo. Para salvar a la gente, si tengo que dar algo de dinero de regalo, vale la pena. Muchos aldeanos son modestos y, después de escuchar lo que tenía que decir, me avisaban cuando surgía algo. A menudo había decenas de personas en un evento, y siempre había alguien a quien podía hablar y salvar.
Una vez me enteré de que un pariente iba a celebrar una boda. No éramos parientes cercanos y mi padre tenía poca relación con ellos. No obstante, conduje hasta las montañas y asistí a ella, con dinero como regalo. "¡Vaya! No esperaba que vinieras. Muchas gracias", dijo el pariente. En la boda, hablé con la persona que estaba a mi lado y al final aceptó renunciar a las organizaciones del PCCh.
En situaciones como esta, familiares que no se han visto durante décadas se reúnen y hablan. Nos preguntamos por la situación de cada uno y charlamos sobre la actualidad. Lo natural es hablar de lo corrupto que es el PCCh y de la conveniencia de renunciar a él. En esa boda, ayudé a ocho personas a renunciar.
En otra ocasión, visité a un pariente unos días después del Año Nuevo Chino. Hubo una disputa entre él y mi padre, y no nos habíamos visto durante más de 10 años. Como mi padre había fallecido y ahora soy un practicante de Falun Dafa, pensé en reparar esa relación rota y llevar al pariente y a su familia las bendiciones de Falun Dafa. Llevé dos cajas de regalos para desearles un Feliz Año Nuevo. Toda su familia estaba muy conmovida. "¡Nunca soñé que vendrías!", dijo. Me prepararon un delicioso almuerzo y les hablé de Falun Dafa. Los cinco miembros de su familia renunciaron al PCCh.
Hay muy pocos de mis parientes que no hayan oído hablar de Falun Dafa a través de mí. Les he explicado las cosas sistemáticamente, una por una, y he tomado nota de los que no aceptaron renunciar a las organizaciones del PCCh. Si lo hicieron, les recuerdo de vez en cuando que tengan en cuenta que "Falun Dafa es bueno" y "Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno".
Hay un director donde trabajo al que le había hablado de Falun Dafa muchas veces. Sabía de la persecución, pero no quería renunciar al Partido. Creí que él tenía miedo de las posibles consecuencias, ya que trabajábamos en el mismo lugar. Considerando su situación, me di cuenta de que debía prestar atención al contexto. Una vez me enteré de que estaba enfermo. Compré algunos regalos y lo visité en su casa. Estaba muy conmovido y me dijo: "¡Muchas gracias por venir!". Esta vez, volví a hablarle de los beneficios de Falun Dafa y de la brutalidad del PCCh en su persecución a personas inocentes. Como estábamos en su casa, estaba relajado y muy contento de renunciar al Partido.
Basándome en mi experiencia, sé muy bien que ayudar a una persona a renunciar al PCCh no es algo trivial. Cualquier omisión o falta de confianza podría arruinar la oportunidad. Por lo tanto, siempre me esfuerzo al máximo y explico bien las cosas. Esto es similar a cultivar la tierra. Algunas personas tienen prisa y dejan muchas malas hierbas. Yo trato de evitarlo y, por el contrario, hago un gran esfuerzo. Además, suelo recordarles que les cuenten a sus familiares lo que les he dicho para que ellos también se beneficien.
Seudónimos
Como la renuncia al PCCh se hace de corazón, dada la situación actual en China, también se aceptan los seudónimos. A continuación, algunos ejemplos.
Una vez hablé con un vendedor ambulante. Había sufrido un derrame cerebral en el pasado y no tenía un trabajo fijo. Para ganarse la vida, vendía verduras.
Después de charlar un rato, le conté cómo el PCCh ha destruido la cultura tradicional china. "Los valores morales han decaído mucho y los productos falsificados están por todas partes. Además, los funcionarios son más corruptos que nunca". Cuando asintió con la cabeza, le dije que un régimen así sería eliminado con toda seguridad. "En el PCCh están incluidos el Partido, la Liga de la Juventud y los Jóvenes Pioneros, y todos los que pertenezcan a él enfrentarán las consecuencias. ¿Por qué no renuncias al régimen?". Le sugerí.
Dijo que sí, que estaba dispuesto a renunciar a la Liga Juvenil. Como su apellido era Wang, le sugerí que usara el nombre Wang Kang (que significa salud y seguridad en chino) para renunciar. "Es un nombre estupendo. Me gusta", exclamó. "¿Sabes qué? Mi nombre de usuario en WeChat era Wang Qi (que significa gas o ira en chino) porque solía rellenar los depósitos de gas natural de la gente. Ojalá hubiera usado el nombre Wang Kang".
Dijo que la vida era muy difícil para él. Después de la apoplejía, había contemplado el suicidio varias veces. Afortunadamente, alguien lo encontró y lo rescató cada vez. Le expliqué que no habíamos venimos a este mundo para nada. De hecho, renunciar al PCCh y tener presente que "Falun Dafa es bueno" y "Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno" le traería bendiciones a largo plazo. Asintió y me dio las gracias.
En otra ocasión, cuando pasaba por delante de una fábrica, vi a una joven esperando el autobús. Era un día gélido de invierno, así que me paré y le ofrecí llevarla. Ella pensó que era un taxista y preguntó: "¿Cuánto?".
Nunca tuve la intención de cobrarle nada, pero si le decía que era gratis, podría sospechar, así que le contesté: "Lo que quieras pagar".
Cuando le hablé de renunciar al PCCh mientras conducía, se quedó callada y un poco nerviosa. Sabiendo que debía estar envenenada por las mentiras, empecé a desmentir la típica propaganda de odio del PCCh, como la autoinmolación escenificada en la plaza de Tiananmen. Después de un rato, lo entendió y se relajó.
Le expliqué que el PCCh casi había acabado con la cultura tradicional china y que se enfrentaría a las consecuencias y que por eso debíamos renunciar al régimen para tener un futuro mejor. Al final, añadí que, si ella no creía lo que decía, podía considerarlo un cuento. "Pero si es verdad, ¿por qué no se hace este seguro gratis?". También le sugerí que utilizara el seudónimo de Qianqian (bella) para renunciar al PCCh. Ella sonrió y aceptó.
Cuando llegamos a su destino, me preguntó: "¿Cuánto es?". Le dije que no se preocupara. "Mientras tengas en mente que "Falun Dafa es bueno" y "Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno", estarás a salvo y serás feliz. ¿Verdad?", le dije. Ella sonrió y me dio las gracias de nuevo.
Una vez conocí a la madre de un empresario. Dijo que la sociedad estaba "sin esperanza". "Mi hijo es constructor. Pero alguien que le debía dinero acaba de huir. ¿Cómo podemos ganarnos la vida así?", dijo.
Cuando le pregunté si había oído hablar de Falun Dafa y si había renunciado a las organizaciones del PCCh, me dijo que su sobrino era un practicante, pero que no le creía.
Desde la cultura tradicional hasta la brutalidad y las mentiras del PCCh, desde las antiguas profecías hasta la propaganda calumniosa del régimen, le expliqué cómo el PCCh ha perjudicado al pueblo chino y a la sociedad. Poco a poco, aceptó lo que le dije y aceptó renunciar a la Liga Juvenil y a los Jóvenes Pioneros. Cuando le sugerí los seudónimos Anshun (vida segura y fácil), se sintió muy satisfecha. También aceptó hablarles a su marido y a su hijo de las frases "Falun Dafa es bueno" y "Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno".
Arriba están mis experiencias. Creo que todo lo que hacemos, incluida la búsqueda de un seudónimo, requiere que seamos considerados con los demás para conseguir los mejores resultados a la hora de ayudar a la gente. Todavía hay una distancia que me separa de otros practicantes que lo han hecho muy bien, pero haré todo lo posible por ponerme al día.
¡Gracias Maestro! ¡Gracias, compañeros practicantes!
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