(Minghui.org) El Dr. Cheng Yuan-yu es un médico que se especializa en enfermedades infecciosas muy respetado por los pacientes y por sus colegas. Trabaja en el Hospital General de Veteranos de Taipéi y en el Hospital Kinmen, dos de los mejores hospitales de Taiwán.

Hace mucho tiempo, el Dr. Cheng se dio cuenta de que la muerte es inevitable. Siempre se preguntó quién decide cuándo es el momento de que una persona cruce la línea entre la vida y la muerte. Sabía que los médicos no poseían ese control.

Dijo: “Trabajando en hospitales, he visto pacientes de todas las diferentes condiciones sociales y económicas. Algunos sufrían enfermedades por muchos años con tubos adheridos al cuerpo”. Esto le hizo reflexionar. “Al ver sufrir a mis pacientes, comencé a preguntarme: si existen los dioses, ¿por qué permiten esto? Estaba enojado con los dioses. Me preguntaba por qué algunas personas se sentían tan miserables. No era feliz. Estaba más enojado que compasivo”.

La medicina moderna tiene sus limitaciones. Muchas veces, la cirugía y los tratamientos solo pueden prolongar la vida de una persona algunos meses.

“Empecé a tener dudas. Parecía que todo dependía del destino de la persona. La persona sufriría si tenía un mal destino. El miedo de los pacientes y mis preguntas sin respuesta proyectaron una sombra sobre mi vida”, dijo.

Ante la inevitabilidad de la muerte, se preguntó cuáles eran las cosas más importantes de la vida.

Comenzó a trabajar en el Hospital Kinmen en 2010. “Mi vida mejoró después de que me mudé a Kinmen. Tengo unos hermosos hijos, todas las cosas lujosas, mi salario se duplicó... todo iba bien, y sin embargo, tenía este pensamiento: algo no marcha bien. No es que no quisiera a mi trabajo o a mi familia, pero si iba a morir, seguramente estas cosas materiales no eran un objetivo a perseguir toda mi vida".

La hermana del Dr. Cheng

La primera vez que el Dr. Cheng oyó hablar de Falun Gong, también conocido como Falun Dafa, fue por su hermana.

En 2009, su hermana se sometió a una operación de apendicitis. Cuando se despertó de la anestesia, estaba casi paralizada. No podía abrir los párpados ni mover la boca. El diagnóstico fue atrofia de la glándula pituitaria. Su cuerpo ya no podía producir tiroxina ni epinefrina. Los esteroides y los medicamentos para la tiroides eran su única opción para sobrevivir.

En 2012, su hermana desarrolló un cuadro de celulitis grave.

El Dr. Cheng encontró extraña su celulitis: “Pasé muchos años tratando la celulitis. Desde la perspectiva de un profesional de la medicina, su caso era diferente al de cualquier otro paciente que hubiera tratado antes. Por ejemplo, experimentaba dolores en los dos pies, lo cual era inusual, y luego el dolor disminuyó drásticamente en unas pocas horas, lo cual resultó inaudito. Después de que la celulitis remitió, el edema causado por tomar altas dosis de esteroides, desapareció. Se sentía más fuerte y más animada que antes”.

Estaba confundido. Su hermana le dijo que había comenzado a practicar Falun Gong unos meses atrás y que dejó de tomar los esteroides hacía un par de semanas.

"Como médico, no podía explicar la recuperación de mi hermana".

El profesor Yang Shuohing de la Universidad Sun Yat-sen recomendó al Dr. Cheng que investigara sobre Falun Gong.

Para los practicantes de Falun Gong, el estado físico del cuerpo es solo un componente. Su meta es convertirse en personas bondadosas y compasivas. El Dr. Cheng vio que elevarse a través de la cultivación es exactamente el "objetivo de la vida" que había estado buscando.

“La noche del primer día que practiqué Falun Gong, tuve fiebre. Me duró hasta la mañana siguiente. Fue similar a la purificación del cuerpo descrita en Zhuan Falun. Solía enfermarme con frecuencia, pero ese día me sentía bien. ¡Mi mente estaba despejada y mi dolor crónico en las articulaciones había desaparecido! Falun Gong es asombroso. Como médico, no podría explicar cómo o por qué alguien puede sentirse tan bien después de tener fiebre”.

Cuando estaba en la universidad, sufría de asma y le diagnosticaron reumatismo palindrómico. Es una enfermedad autoinmune que no tiene cura.

“Siempre que estaba bajo presión o no dormía lo suficiente, el reumatismo en mis manos y pies estallaba. Cuando eso sucedía, sentía tanto dolor que solo podía acostarme en la cama y no moverme”.

Para mejorar su salud, solía trotar y lo disfrutaba mucho. Sin embargo, una vez que comenzó a practicar Falun Gong, sus puntos de vista sobre la medicina moderna cambiaron.

“Me di cuenta de que existen fenómenos sobrenaturales. Desde la purificación del cuerpo al principio hasta los estados meditativos, que no pude lograr por ningún otro medio. Están más allá de la ciencia moderna. Lo que experimenté al practicar Falun Gong puede parecer un poco impactante, pero los cambios son reales. Me siento renovado y elevado. Encontré mi paz y tranquilidad interior, lo cual supera con creces todo lo que conocía antes”.

Para el Dr. Cheng, Zhuan Falun es un libro muy importante

Más allá del mero cambio físico

Con la elevación de su mente, el Dr. Cheng se volvió más optimista, sincero y generoso.

“Cuando intentamos consolar a la gente, solemos decir: 'Cuando pierdes algo, ganas algo'. Sin embargo, el resentimiento permanecía ahí. Cuando ayudaba a los pacientes con amabilidad pero ellos respondían con hostilidad y acusación, tras pasar mucho tiempo, no podía evitar tener emociones negativas. Ahora, después de leer Zhuan Falun, tengo una reacción completamente diferente ante los conflictos.

“Ya no me enojo porque mis sentimiento son heridos. Tampoco sufro en silencio. De hecho, no estoy nada enojado. Mi tolerancia se ha expandido verdaderamente. Frente a pacientes difíciles y situaciones estresantes, mantengo la calma y me pongo en el lugar del otro. Practicar Falun Gong me ha brindado un nuevo punto de vista".

“Antes de empezar a practicar, era una persona calculadora. Tenía un sentido de autoridad y constantemente perseguía cosas materiales. Agradezco al fundador de Falun Gong, el Maestro Li Hongzhi, por guiarme por el camino más digno: una vida de cultivación. Sus enseñanzas son un recordatorio constante de la misión y las responsabilidades de mi vida. ¡Ahora he experimentado la verdadera belleza de la vida!".

El Dr. Cheng con su esposa e hijos. Esperan que todos conozcan lo maravilloso que es Falun Gong

“Recomiendo sinceramente a todos el libro Zhuan Falun. Falun Gong es una disciplina de cultivación de alto nivel que cualquiera puede practicar. Independientemente de cuáles sean tus metas iniciales: mejorar la salud, aliviar el estrés de las dificultades diarias... siempre que sigas los principios de Falun Gong, te beneficiarás mucho más allá de tus expectativas. ¡Puedes llegar a alcanzar un nivel que nunca imaginaste!".