(Minghui.org) Una mujer de 70 años ha sido perseguida salvajemente durante los últimos 20 años por su fe en Falun Gong. Fue arrestada cinco veces y sometida a trabajos forzados dos veces, por un total de cuatro años y nueve meses. La torturaron con varios métodos mientras estuvo detenida, incluyendo una brutal alimentación forzada, palizas y lavados de cerebro.

Falun Gong, también conocido como Falun Dafa, es una antigua disciplina espiritual y de meditación perseguida por el régimen comunista chino desde 1999.

La Sra. Xiao Genxiang es una jubilada de Hongdo Group Corporation de la ciudad de Nanchang, provincia de Jiangxi. Comenzó a practicar Falun Gong en 1996 y se mantiene firme en su fe, a pesar de la dura persecución.

Sra. Xiao Genxiang

Brutalmente torturada durante su primera condena a trabajos forzados

La Sra. Xiao fue a Beijing para apelar pidiendo justicia para Falun Gong en noviembre de 1999 y permaneció detenida durante cinco días. Lo intentó nuevamente un mes después y la arrestaron otra vez. Más tarde le impusieron una pena de trabajos forzados de 18 meses y la enviaron al campo de trabajos forzados para mujeres de la provincia de Jiangxi.

Se negó a renunciar a su creencia en el campo de trabajo. Fue brutalmente alimentada a la fuerza cuando realizó varias huelgas de hambre para protestar por la persecución. Una vez se resistió fuertemente durante una sesión de alimentación forzada, y los guardias tiraron de sus manos con tanta fuerza que la piel entre sus dedos índice y medio se desgarró y sangró profusamente. Durante otra sesión de alimentación forzada, los guardias tironearon deliberadamente del tubo que le insertaron en la nariz de un lado a otro para atormentarla hasta que comenzó a brotar sangre.

La Sra. Xiao repetidamente recibió palizas por hacer los ejercicios de Falun Gong. Los guardias a veces la agarraban del pelo y le golpeaban la cabeza contra la pared. Con frecuencia tenía moretones por toda la cara y en las manos. También fue esposada varias veces, colgada en el aire de las esposas y golpeada. Una vez, una de sus piernas se lastimó tanto que acabó cojeando como resultado.

La Sra. Xiao fue liberada tres meses después de que expiró su condena.

Humillación durante la detención

La Sra. Xiao fue arrestada nuevamente a fines de octubre de 2001, poco después de ser liberada de su primer período de trabajo forzado por distribuir folletos que exponían la persecución a Falun Gong. Fue llevada al departamento de policía del distrito de Qingyun de Nanchang e interrogada allí.

Como se negó a dar información, fue esposada y colgada de las esposas, suspendida en el aire con los dedos de sus pies apenas tocando el suelo, mientras un jefe de policía la golpeaba. Para el tercer día, se había vuelto incapaz de mantenerse de pie para desvestirse al usar el baño. Un oficial masculino insistía en "ayudarla" quitándole y poniéndole los pantalones. La tortura duró cinco días y cuatro noches.

El 1 de noviembre de 2001 fue transferida a un centro de detención donde la retuvieron durante 15 días. Luego fue enviada a una sesión de lavado de cerebro donde realizó una huelga de hambre para protestar por la detención ilegal. Fue liberada un mes después.

Una pena de tres años de trabajos forzados

La Sra. Xiao fue arrestada en su casa el 8 de febrero de 2002 y llevada directamente al campo de trabajo forzado para mujeres de la provincia de Jiangxi para cumplir un nuevo período de tres años.

Los practicantes de Falun Gong en el campo de trabajo no recibían suficiente comida. Cada comida incluía solo una pequeña porción de arroz o un bollo al vapor.

Fue puesta en confinamiento solitario a principios de 2004 en un esfuerzo de los funcionarios del campo de trabajo forzado por obligarla a renunciar a su fe. La obligaban a estar de pie desde las 6:00 a. m. a las 2:00 a. m. con las manos a la espalda. Mientras estaba de pie, tenía que mirar programas de video que difamaban a Falun Gong. Dos semanas después, el director del campo de trabajo y el jefe de división comenzaron a hablarle por turnos, durante todo el día, hasta la medianoche, amenazándola. Estas conversaciones duraron cinco días.

Durante otra sesión de lavado de cerebro, para torturarla mentalmente, los guardias del campo de trabajo le pusieron carteles con palabras que insultaban al fundador de Falun Gong en la espalda, la cabecera de la cama y la puerta del baño. También los pusieron en el suelo del baño y la arrastraron allí para que los pisara. Algunas noches, adelantaban el reloj dos horas y la obligaban a levantarse a las 4:00 a. m. para limpiar.

Los funcionarios del campo de trabajo también instigaron al esposo de la Sra. Xiao a divorciarse, para aumentar su presión.

El quinto arresto

La Sra. Xiao y otros dos practicantes fueron arrestados el 29 de abril de 2010, cuando distribuían materiales sobre Falun Gong en la ciudad de Zhangshu, Jiangxi. Los tres fueron golpeados mientras estaban bajo custodia. Un oficial de policía pateó a la Sra. Xiao en las rodillas para obligarla a arrodillarse. Otro oficial le ató las manos y la interrogó. Cuando se negó a responder las preguntas, el oficial le golpeó la cabeza y la cara con un libro grueso.

Posteriormente, los tres practicantes fueron llevados al centro de detención de la ciudad de Zhangshu, donde permanecieron durante dos semanas.