(Minghui.org) Después de que el novedoso coronavirus (ahora conocido como el virus PCCh, o del partido comunista chino) estalló en Wuhan, el miedo y el pánico se apoderaron de la ciudad. Un trabajador que transportaba cadáveres a los crematorios dijo que él y sus compañeros trabajaban desde las 9 de la mañana hasta las 2 de la madrugada todos los días, transportando ocho cuerpos en cada viaje (en comparación con un solo cuerpo por viaje en el pasado).

A medida que la epidemia se intensificaba, algunas personas caían muertas en la calle; o una persona se enfermaba e infectaba a toda su familia; o varias personas de una familia morían a causa del virus con pocos días de diferencia.

Frente a esta grave situación, muchas personas obstinadas que solían creer en la "grandeza" del partido comunista chino (PCCh) cambiaron de opinión. Un hombre inicialmente culpó a otros por "difundir rumores" en Weibo (un popular sitio web de microblogging chino): "Si no crees en nuestra nación y en el partido, ¿en qué puedes creer?". Poco después, sus parientes se infectaron y no pudieron conseguir una cama de hospital. Sus posteriores comentarios se llenaron de gritos de ayuda y maldiciones al PCCh.

Li Wenliang, un médico que fue castigado por las autoridades por dar la alarma sobre la epidemia, murió más tarde de la enfermedad. Como muchas personas culparon al PCCh a través de las redes sociales por la muerte del joven médico, un estudiante escribió: "Es el virus quien lo mató". Debemos mantener la calma y escuchar al partido". Sin embargo, al volver a su universidad, el estudiante descubrió que su propio dormitorio había sido reubicado para albergar a pacientes con coronavirus sin previo aviso.

Es relativamente fácil permanecer con el PCCh y culpar a otros como espectadores no afectados; pero es una historia totalmente diferente cuando uno se convierte en víctima del PCCh.

A medida que la pandemia se extiende por más de 200 países y hasta ahora ha infectado a más de un millón de personas en todo el mundo, es importante analizar la situación para obtener una mejor comprensión de este virus.

Las zonas más afectadas

La zona del lago Shuiguo es una de las más afectadas de Wuhan y, en muchos hogares, casi todos se habían infectado. Con el recinto del gobierno provincial de Hubei ubicado aquí, esta área es también el centro político, económico y cultural, así como el centro de ciencia y tecnología de Hubei. Su personal médico, tecnología e instalaciones, así como el hospital Zhongnan, son superiores a las de otras regiones. ¿Cómo, entonces, puede explicarse la alta tasa de infección y mortalidad en esta área?

Mirando hacia atrás en la historia, las plagas tanto en los países orientales como en los occidentales a menudo llegaron repentinamente y desaparecieron igual de misteriosamente. Artículos anteriores publicados en Minghui.org sobre antiguas profecías o plagas en el antiguo Imperio Romano han demostrado que tales enfermedades a menudo tienen como objetivo a ciertas personas en determinados momentos.

Se ha dicho que los ancianos y los niños tienen sistemas inmunológicos más débiles y son poblaciones susceptibles. Sin embargo, según las estadísticas de Wuhan o China, hay muchas más personas de mediana edad que se han infectado o han muerto.

Otro aspecto inconsistente es la propagación del virus. Se cree ampliamente que el contacto físico o la proximidad cercana facilitan la transmisión de enfermedades infecciosas, por lo que el aislamiento, junto con el equipo de protección personal (como guantes, máscaras), es crucial para la mitigación.

Pero las cosas no son tan simples. Tomemos, por ejemplo, la documentación de Evagrius Scholasticus de la Plaga de Justiniano (541-542 d. C.) en la Historia Eclesiástica:

"Algunos perecieron por el simple hecho de vivir con los infectados, otros únicamente por tocarlos, otros por haber entrado en su cámara, otros por frecuentar lugares públicos. Algunos, habiendo huido de las ciudades infectadas, escaparon por su cuenta, pero transmitieron la enfermedad a los sanos”.

"Algunos estaban totalmente libres de contagio, a pesar de que se habían asociado con muchos de los afectados, y habían tocado a muchos no solo durante su enfermedad sino también cuando murieron. Algunos, también, deseosos de morir, a causa de la pérdida total de sus hijos y amigos, y con este punto de vista se pusieron todo lo posible en contacto con los enfermos, sin embargo, no se infectaron; como si la peste luchara contra su propósito".

Cosas similares también ocurrieron en Wuhan: algunas personas no se infectaron a pesar de la exposición al virus, en tanto que otras no presentaron síntomas ni siquiera después de la infección.

Como sede del gobierno provincial de Hubei, el lago Shuiguo y la ciudad de Wuhan en general han desempeñado un papel fundamental en la persecución a Falun Dafa, un sistema de meditación basado en los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia.

Cuando el exlíder del PCCh Jiang Zemin planeó suprimir a Falun Dafa en abril de 1999, Zhao Zhizhen, entonces director gerente de la oficina de radio y televisión de la ciudad de Wuhan y de la estación de televisión de Wuhan, tomó la iniciativa de seguir las órdenes de Jiang.

A finales de junio de 1999, Wuhan TV envió a tres miembros del personal y filmó un vídeo difamatorio de 6 horas titulado "Sobre Li Hongzhi [fundador de Falun Dafa]". Este video no solo jugó un papel crítico en dañar la reputación de Falun Dafa, sino que también fue reproducido a través de numerosos canales de comunicación para despertar el odio del público contra Falun Dafa. Muchos más videos difamatorios fueron producidos posteriormente.

Según la información que figura en el sitio web de la embajada china, en marzo de 2001 se celebró en Wuhan una conferencia nacional para intensificar la persecución contra Falun Dafa. Desde esa conferencia, la represión empeoró tanto en la provincia de Hubei como en toda China.

Sustracción forzada de órganos

Desde 2006, un gran número pruebas han confirmado la sustracción forzada de órganos, autorizada por el estado, a practicantes de Falun Dafa en China. Entre las instituciones involucradas, el hospital Tongjing de Wuhan fue uno de los primeros hospitales de China que realizó trasplantes de órganos de procedencia dudosa.

Solo en febrero de 2005 se realizaron más de 1.000 trasplantes de riñón en este centro. En ese momento, su instituto de investigación de trasplantes de órganos era un centro clave bajo la comisión de salud pública. Con capacidad para trasplantar 14 órganos, era también el mayor centro de trasplantes de China en ese momento.

Lin Zhengbin, subdirector del instituto de investigación de trasplantes de órganos, fue hospitalizado el 27 de enero de 2020 y falleció a causa del coronavirus el 10 de febrero. Durante esas dos semanas, ni siquiera el mejor personal médico y de soporte vital pudo salvarlo.

Lin había realizado unos 1.000 trasplantes de riñón y su participación en la sustracción forzada de órganos aún no ha sido informada.

Represión a través de la oficina religiosa

Wang Xianliang, de 62 años, exjefe de la oficina de asuntos religiosos y étnicos de Wuhan, falleció en el hospital central de Wuhan el 26 de enero de 2020. Fue uno de los primeros funcionarios de alto nivel en Wuhan que murió por el virus del PCCh.

Las oficinas religiosas en toda China han jugado un papel importante en la persecución a Falun Dafa. Después de que Jiang comenzara a reprimir a Falun Dafa el 20 de julio de 1999, Ye Xiaowen, entonces director de la administración estatal de asuntos religiosos (SARA) entre 1995 y 2009, dio un discurso de 4 horas de duración a varias agencias del gobierno central difamando a Falun Dafa. Este discurso fue luego compilado como material de estudio para las agencias gubernamentales en Beijing.

Wang se convirtió en el jefe de la oficina religiosa de Wuhan en 2012 y lideró muchas acciones contra Falun Dafa. En 2014, él y Duan Dezhi de la universidad de Wuhan compilaron un libro para difamar a Falun Dafa.

Wang y otros funcionarios fueron investigados por corrupción en 2017. Como resultado, fue degradado, pero aun así trabajó en la oficina.

La tragedia de un médico

Li Wenliang, uno de los 8 médicos amonestados en Wuhan el 1 de enero por crear conciencia de la epidemia, murió de esta enfermedad el 7 de febrero de 2020.

Desde que se convirtió en miembro del PCCh en su segundo año de universidad, Li siguió de cerca al partido. Mientras los residentes de Hong Kong protestaban en 2019 por el proyecto de ley de extradición, Li publicó la propaganda del PCCh en Internet, expresando su voluntad de apoyar al partido. También pidió a sus amigos que hicieran lo mismo.

Después de ser castigado por "difundir rumores" el 1 de enero, según informó la agencia de noticias estatal Xinhua, CCTV informó que Li firmó documentos en los que aceptaba permanecer callado.

Después de contraer la enfermedad el 8 de enero, se le diagnosticó la infección el 1 de febrero, y falleció 6 días después.

Li había seguido de cerca al partido a lo largo de su vida, durante sus días de universitario, en el movimiento democrático de Hong Kong, y se quedó callado durante la epidemia. Esto eventualmente le costó la vida.

La verdadera tragedia es que Li fue aclamado como un héroe por decir la verdad, la única vez que no siguió de cerca al PCCh. "Solo cuando más gente siga su conciencia en lugar del PCCh, nuestra sociedad tendrá esperanza", escribió un ciudadano chino en los medios de comunicación social.