(Minghui.org) Aunque he mantenido pensamientos y una conducta recta, el miedo a ser perseguido otra vez siempre me ha hecho temblar debido a la tortura que he sufrido por mantener mi fe. Este apego se ha manifestado ocasionalmente cuando hago las tres cosas.

Un antiguo amigo, que también es practicante, fue arrestado hace pocos días. Estudié el Fa y envié pensamientos rectos y examiné mis propias deficiencias durante tres días después de que escuché la noticia.

Al cuarto día, recibí un mensaje de un practicante para que me escondiera inmediatamente, diciendo que podría estar implicado si el otro practicante sucumbía a la tortura.

Pero no podía irme. Tengo un trabajo y también necesitaba cuidar de mi familiares, que no son practicantes. Debía considerar sus sentimientos y ser responsable con los que me rodeaban.

Sabía que debía tener pensamientos rectos y rechazar cualquier arreglo de las viejas fuerzas, sin embargo me afectó. Oleadas de miedo siguieron golpeándome. Sentí que la policía podría llegar en cualquier momento. Aterrorizado, me arrodillé frente al retrato del Maestro y dije: “Maestro, no tengo suficientes pensamientos rectos, por favor ayúdeme”. Entonces, envié pensamientos rectos durante media hora. Estaba mucho más tranquilo y sabía que el Maestro había eliminado muchas sustancias negativas en mí.

Comencé a estudiar las enseñanzas del Maestro, y las siguientes frases aparecieron tan pronto cuando comencé a leer:

“Sin embargo, en momentos cuando tienes corazones humanos pesados y hay interferencia de la maldad y de factores no buenos, entonces se manifiesta que cuando tú te haces más fuerte estos se hacen más débiles, y cuando tú te debilitas estos se hacen más fuertes(Enseñando el Fa en el Fahui Internacional del Washington DC 2009).

Las palabras del Maestro me impactaron. ¿No me estaba dando una pista? Fui yo quien se rebajó exagerando la importancia del proyecto en el que había trabajado, pensando que provocaba muchos factores malignos.

El Maestro dijo:

“Una vez que esta benevolencia misericordiosa emerge, su fuerza no tiene igual, y desintegrará a todos los factores malignos. Cuanto mayor la misericordia, mayor su poder” (Enseñando el Fa en el Fahui Internacional del Washington DC 2009).

¿Por qué siempre me preocupaba que me persiguieran? ¿No era por falta de compasión? Lo veía como una persecución solo porque un oficial de policía llamó a mi puerta. No puse la salvación de los seres conscientes como una prioridad.

¡Qué egoísta fui!, Comparado con los practicantes que se dirigieron a la policía y les hablaron sobre Dafa con aplomo y con seguridad, tenía un largo camino por recorrer.

Recuperé la calma. Cuando ocasionalmente aparecían pensamientos como: “Qué pasaría si el practicante arrestado me implicaba”, era capaz de repelerlos.

Compartí mi situación con otro practicante, dijo que no debería haberme preocupado por estar implicado. Debería confiar en el practicante y no preocuparme por nada más.

El Maestro dijo:

“Un Dafa dizi… ¿qué es un discípulo de Dafa? Es un ser creado por el Fa más extraordinario, (aplausos entusiastas) y es sólido como la roca e indestructible como diamante" (Exponiendo el Fa en el Fahui de Washington D.C., 2003).

Después de leer las palabras del Maestro, sentí la noción de “en el caso de que el practicante me implique” era un gran insulto a ese practicante, una noción que no debía ser reconocida.

El Maestro dijo:

“Entonces, una vez que se arregló el camino de cultivación de un Dafa dizi, básicamente nadie puede simplemente cambiarlo impulsivamente, y nadie –bueno o malo– puede hacer nada por ti. Incluso cuando alguien quiere darte algo especial y bueno, no es capaz de agregarlo. Y si alguien quiere darte algo especial que no es parte de lo que originalmente tenías en tu cultivación o si alguien quiere desbordarse persiguiéndote, no podrán hacerlo. Las excepciones sólo aparecen cuando tú mismo lo haces pobremente” (Exponiendo el Fa en la Ciudad de Los Ángeles) (25 de febrero de 2006).

“Nosotros tenemos que rechazar incluso la aparición de las viejas fuerzas y sus arreglos; todos tenemos que rechazar hasta sus existencias. Estamos fundamentalmente negando todas sus cosas, y todo, y solamente las cosas que tú haces para eliminarlos es la poderosa virtud. No se cultiven en las tribulaciones creadas por ellos; caminen bien el propio camino sin reconocerlos a ellos, ni siquiera reconozcan la manifestación de las tribulaciones cuando las eliminen. (Aplausos) Entonces, mirando desde este ángulo, lo que tenemos que hacer es negar por completo a las fuerzas viejas. Ni yo ni los Dafa dizi siquiera reconocemos las manifestaciones de su última lucha antes de que mueran” (Exponiendo el Fa en el Fahui de Chicago 2004).

Leí repetidamente las conferencias del Fa del Maestro. En verdad, ¿quién puede excederse para perseguirme?

Dejé ir mis apegos y continué haciendo el camino que el Maestro arregló para mí. Trasladé el equipo de producción de materiales a mi casa y reanudé el trabajo para ayudar a la gente con un corazón más puro.