(Minghui.org) El Maestro nos dijo:

"El Ren, es la clave para mejorar el xinxing de uno. El aguantar con odio, quejas o lágrimas es el Ren de una persona común que está apegada a sus recelos. Sólo el aguantar completamente sin ningún odio ni queja alguna es el Ren de un cultivador" (Qué es Ren, Escrituras esenciales para mayor avance).

Solo tenía un entendimiento superficial de la Tolerancia desde que empecé a practicar Falun Dafa. Por consiguiente, no pude alcanzar el nivel de Tolerancia requerido por el Maestro cuando había interferencia. En vez de eso, actuaba como una "mujer fuerte" siempre que podía; no aceptaba las críticas y obligaba a la gente a escucharme.

Sabía que no tenía suficiente Tolerancia, pero no conocía la raíz de mi defecto. Sin saberlo, desarrollé una actitud de resentimiento, que se manifestaba en palabras acusadoras y me angustiaba. Mi mente carecía de paz y compasión, por lo que las conversaciones con mi marido eran tensas.

En los últimos 30 años, nunca le dije una buena palabra a mi marido. Lo corregía todo el tiempo y lo despreciaba. Como resultado, nunca me sonreía y tampoco me hablaba amablemente. Como consecuencia, ambos sufríamos y no había armonía entre nosotros. Me habría divorciado o al menos separado hace mucho tiempo si tal comportamiento no estuviera restringido por Dafa.

A través de memorizar el Fa, ahora tengo una mente pacífica aun cuando mi marido me habla duramente. Le respondo en un tono tranquilo.

Dada mi fuerte voluntad de cultivarme bien, mi esposo tuvo que permitirme hacer proyectos de Dafa en casa. Él también escuchaba las conferencias del Maestro y veía la NTDTV con respecto a las noticias internacionales y la difusión de Dafa en el mundo. Como resultado, él conocía la verdadera naturaleza de Falun Dafa e incluso me ayudó con los proyectos de Dafa. Por ejemplo, cuando iba de compras, usaba papel moneda que tenían escritos mensajes de Dafa, y protegía los materiales de Dafa cuando yo era perseguida por el partido comunista chino.

Desafortunadamente, mi esposo aún no cultiva Dafa. Ahora entiendo que fue mi resentimiento hacia él lo que le impidió convertirse en un practicante de Dafa. Empecé a enviar fuertes pensamientos rectos para eliminar mi resentimiento, cambiando mi manera de pensar y tratándolo con compasión.

Yo soy una discípula de Dafa y él no lo es. Sin embargo, él soportó mucho cuando fui perseguida debido a mi falta de pensamientos rectos. Él estaba bajo mucha presión porque yo cultivaba Dafa. En cierto modo, debe tener un futuro brillante después de sufrir por mi causa y debe tener una vida asombrosa.

Con esos pensamientos en mente, mi resentimiento, derivado de los pensamientos humanos de ganancias y pérdidas, desapareció. Mi carácter mejoró. Ahora tengo grandes expectativas de que un día se convierta en un estudiante de Dafa.

Ahora que ya no siento resentimiento, le hablo a mi esposo naturalmente y con una voz suave. Me tomo a la ligera cuando él me acusa injustamente de algo. No me siento enojada en absoluto. Finalmente siento la Tolerancia de un cultivador.

Si uno es amable con los demás y considera a los demás desde su perspectiva, cuando se produce un conflicto, puede ser ignorado o tratado como nada. En ese nivel, uno puede trascender y alcanzar un nuevo nivel de Tolerancia siguiendo el principio de Benevolencia dentro de la Tolerancia.

He visto cambios en mi marido. Este año, compró un gran pastel de luna varios días antes del Festival de Medio Otoño para celebrar la gran compasión del Maestro.

Ahora, vivimos en armonía. Mi marido sabe cómo cuidarme. También toma la iniciativa de hablar conmigo y su expresión sombría desapareció. Nos tratamos como marido y mujer en lugar de enemigos.

Fue Falun Dafa me ayudó a deshacerme de mis quejas humanas. Aunque pude haberme iluminado antes con el principio, todavía me considero afortunada de haber dado un paso tan significativo en el proceso de la rectificación del Fa.

Querido Maestro, llevo 22 años cultivando Dafa y tú no te has dado por vencido conmigo. Haré bien las tres cosas y compensaré tu gran compasión y sufrimiento.