(Minghui.org) Fui arrestada por policías de civil cuando estaba entregando materiales sobre Falun Dafa. Dentro de su auto, dijo que si le hacía masajes en su cabeza (porque tenía dolor de cabeza), me dejaría ir. De otro modo, me llevaría a la comisaría. Me dio unos minutos para considerar su propuesta. Me dije que solo Shifu decide mi vida. No podía hacer algo que iba contra los principios de un cultivador. Me decidí y le dije que no lo haría, incluso si me detenían o encarcelaban.

Debo haber pasado la prueba porque no me pasó nada. Después de regresar a casa, miré hacia dentro para ver qué no había hecho bien. Me di cuenta que tenía un apego a la lujuria y a ser selectiva cuando aclaro la verdad.

Shifu dijo:

“Salvar a la gente es simplemente eso, salvar gente, y elegir y seleccionar no sería misericordioso” (Enseñando el Fa en el Fahui internacional de Gran Nueva York 2009).

Eliminando miedo y egoísmo

Con un entendimiento más profundo de las enseñanzas de Shifu, reconocí dos lugares donde me quedaba corta.

Primero, solo me acercaba a gente mayor, mujeres, y personas de bajo nivel. También hablaba con personas que parecían “saludables” o amigables. Entonces ¿qué hay de las personas jóvenes, edad mediana, alto nivel, seriamente enfermas, o que parecen no amistosas y que están esperando que les cuente la verdad?

Esto se debía a estar apegada a aumentar el número de personas que salvaba y mi miedo a fallar y al peligro. Es más fácil y seguro hablar con los ancianos porque están jubilados y tienen mucho tiempo para hablar. Además, muchos de ellos no tienen celulares.

Mientras que las personas de edad mediana o jóvenes están ocupados y usan sus celulares. Por eso, sería más difícil persuadirlos, y no es muy seguro porque pueden grabar la conversación o sacarme una foto. En realidad, estaba siendo egoísta y miedosa.

Shifu dijo: “…que obtengas la honrada iluminación de desinterés y altruismo” (La naturaleza fo no tiene ningún punto débil).

¡Estoy lejos de este requisito!

La segunda falla era mi miedo a hablar con más de dos personas a la vez. No me atrevía a decir nada si más de dos personas estaban frente a mi. Si yo tuviera un corazón compasivo, sin pensamientos personales, e intentaba romper con este apego, tal vez podría hacer algunas mejoras.

Una vez hablé con una señora que estaba recogiendo a su amiga en la estación. Ella se negó a llevarse el material informativo cuando intenté dárselo y no quiso renunciar al PCCh. Su amiga y otra persona se bajaron del autobús y yo pensé en irme. Después de un rato, la otra persona se fue, así que le di el material a la amiga de esta señora. En ese momento, la amiga de la señora le dijo a su amiga que era información sobre Falun Dafa. Su amiga contestó: “¡Eso es bueno! Si tú no lo quieres, me lo llevó yo”.

La señora entonces dijo que ella también quería una copia. Le pregunté a su amiga si había renunciado al partido. Ella dijo que sí y le dijo a su amiga: “Falun Dafa es algo importante y relacionado a todos. Es más seguro renunciar”. Entonces la señora aceptó renunciar al PCCh.

La gente que entiende la verdad de Dafa nos está ayudando a aclarar la verdad. Es como dijo Shifu:

“Yo le digo a mis amigos que es bueno, no engaño a mis amigos; yo le digo a mi familia que es bueno, no engaño a mi familia, por eso esto es creíble; las publicidades no tienen este tipo de efectividad” (Fahui de Nueva York 2019).

Ser selectiva en la salvación era solo para protegerme bajo el manto del miedo. También era ser egoísta sin considerar la seguridad de los seres conscientes. Debo eliminar el egoísmo, y recién puedo verdaderamente tener un corazón de compasión enfocado en salvar a otros.

Si uno realmente quiere mejorar en la cultivación y hacer avances en la salvación de la gente, uno debería comenzar por quitar el egoísmo y el ser selectivo. Claro uno tiene que prestar atención a la seguridad y considerar la situación también, pero esto tampoco puede ser forzado si el corazón no está bien posicionado.