(Minghui.org) Me convertí en una practicante de Falun Dafa en 1997, pero me alejé de Dafa después de haber estado encarcelada en un campo de trabajos forzados por mi fe de 2004 a 2006. No fue hasta 2013 que empecé a practicar de nuevo. Aunque he estado haciendo las tres cosas, ha sido a un nivel muy superficial sin poner todo mi corazón y alma en ello. Pero Shifu nunca me abandonó. El Maestro me mostró su inmensa misericordia y el extraordinario poder de Dafa en mi reciente lucha contra el yeli de enfermedad.

Una madrugada de marzo, me desperté con un fuerte dolor en el área abdominal del lado derecho y en la parte baja de la espalda. Sentí náuseas a medida que el dolor se intensificaba. También tenía fiebre y temblaba incluso bajo dos capas de mantas. Con gran esfuerzo, me levanté de la cama para enchufar la manta eléctrica y luego me dormí un rato antes de sentirme un poco mejor. Mi marido, que también es practicante, me hablaba, pero me sentía demasiado débil y dolorida para responder.

Cuando me sentí un poco mejor, me senté y traté de memorizar el Fa, pero me resultó difícil concentrarme. En vez de eso, escuché las conferencias del Maestro. También envié pensamientos rectos y busqué dentro de mí la causa de esta tribulación. Supongo que no profundicé lo suficiente porque no descubrí nada. Esto se prolongó durante tres días.

No comí durante este tiempo, mi estómago estaba hinchado y tenía problemas para orinar. A veces mis nociones humanas de querer evitar el dolor y el sufrimiento y desear comodidad tomaron el control. Incluso pensé una vez: "No es tan malo ser una persona común y corriente. Podría mejorar con sólo estar acostada y tener un suero intravenoso". Supe inmediatamente que estaba equivocada al pensar esto. Ese no era el verdadero yo; los tratamientos ordinarios para la gente común no eliminan realmente la causa de la enfermedad o el yeli subyacente. Soy una discípula de Dafa, y mi cuerpo fue purificado por el Maestro cuando empecé la cultivación. Además, todas mis células están llenas de materia de alta energía, y la energía y las muchas entidades que he cultivado se están moviendo dentro de mi cuerpo, lo que causa las molestias ocasionales. Estuve pensando eso todo el tiempo. Cada vez que tenía un pensamiento humano, lo eliminaba con las enseñanzas de Dafa.

Mi marido me recordó desde el principio que rechazara y disipara inmediatamente cualquier pensamiento negativo que surgiera ni reconociera esos pensamientos como míos. Los practicantes sólo queremos caminar por el sendero que el Maestro ha arreglado para nosotros. Cualquier deficiencia que tengamos en nuestra cultivación, tenemos que rectificarnos de acuerdo con Dafa. A ningún ser se le permite que interfiera o nos haga daño.

Durante esos tres días, mi marido compartió conmigo su comprensión de la situación desde la perspectiva del Fa. Dijo que estábamos en medio del período de la Rectificación del Fa y que cualquier cosa que afectara nuestra capacidad para hacer las tres cosas bien debería considerarse como una interferencia. Por lo tanto, debemos enviar pensamientos rectos para eliminar toda la interferencia. También me recordó que buscara en mi interior los apegos. Pasamos largos períodos de tiempo enviando pensamientos rectos juntos. Más tarde me enteré de que mi esposo había pasado mucho tiempo enviando pensamientos rectos por mí mientras yo estaba descansando en la cama. Apuntó a todos los elementos malignos que me hacían daño.

Cuando me levanté al cuarto día para hacer mis ejercicios matutinos, el dolor volvió y era insoportable. Apareció un pensamiento incorrecto: "Un goteo intravenoso debería arreglar todo eso". Pero me corregí de inmediato: "No estoy enferma, así que ¿por qué necesitaría un suero?". Es cierto que todo tiene su existencia material y está muy vivo en otras dimensiones. Y mi marido pronto me preguntó: "¿Crees que deberías ir al hospital?". Estaba convencida: "¡No, no!". Fui muy firme, y mi voz no había sido tan enérgica en los días anteriores.

Le dije a mi esposo que había descubierto que mi problema eran los celos y cómo se habían desarrollado en esos pocos días. De nuevo me recordó que enviara pensamientos rectos para eliminar este corazón de envidia. Juntos leímos las enseñanzas del Maestro sobre el tema:

“Este problema del corazón de envidia es muy grave porque involucra directamente el asunto de si podemos cultivar la Perfección o no. Mientras la envidia no se elimine, todos los corazones que la persona cultivo y refino se vuelven muy frágiles.Aquí hay una regla: si el hombre, en el transcurso del xiulian, no elimina el corazón de envidia, no puede obtener el Fruto Recto, absolutamente no puede obtener el Fruto Recto”. (Séptima Lección, Zhuan Falun)

Pronto era las 6 de la mañana, tiempo para enviar pensamientos rectos de nuevo, y lo hicimos durante media hora. Me acosté, y media hora después me desperté. Me sentí mucho mejor cuando me levanté de la cama. Le dije a mi marido: "¡Me he recuperado! ¡Mi dolor ha desaparecido!". Estábamos muy contentos.

Es exactamente como dice Shifu:"La cultivación depende de uno mismo, el gong depende del shifu",(Primera Lección, Zhuan Falun). El Maestro puede hacer cualquier cosa por nosotros cuando nuestros pensamientos son rectos. Después de desayunar, con mi esposo fuimos frente al retrato del Maestro a poner incienso y a arrodillarnos. Con lágrimas en los ojos, agradecimos al Maestro por soportar nuestro yeli por nosotros.

A partir de las 7 de la mañana de ese cuarto día, mis síntomas de yeli de enfermedad, incluyendo dolor, fiebre, náuseas, hinchazón estomacal y problemas urinarios, se detuvieron abruptamente. Desaparecieron sin dejar rastro. He presenciado de nuevo el poder milagroso de Dafa y la infinita misericordia de Shifu. Puedo recompensar al Maestro sólo comprometiéndome a cultivarme diligentemente en el tiempo venidero.

Hace unos días, mi marido sugirió que compartiera mi experiencia en Minghui. Dije que no lo había hecho bien y que no quería crear trabajo extra para el personal de Minghui. Explicó: "Tu motivo no es correcto. Estamos validando el Fa, no a nosotros mismos". Tenía razón: ¿qué podemos hacer solos?

No pude evitar llorar de nuevo mientras escribía este artículo. Personalmente he sido testigo de muchos milagros que le sucedieron a mi esposo. Su problema estomacal crónico, insomnio, enfermedades oculares, palpitaciones cardíacas, dolores de cabeza y tumores desaparecieron en un año después de comenzar a practicar Dafa. También él fue capaz de dejar fácilmente el alcohol y el tabaco. El pasado otoño, dos grumos de flor de Udumbara aparecieron místicamente en nuestra casa. Hay más de cuarenta flores en total, que siguen de color blanco brillante y fresco hasta el día de hoy.

¡Compañeros practicantes, somos muy afortunados! ¡Atesoremos esta oportunidad! Cuando experimenten el yeli de enfermedad, deben tener fe en el Maestro y en Dafa. Eliminar firmemente todas las interferencias, y mirar hacia adentro rápidamente para rectificarse a uno mismo. Espero que puedan superar rápidamente el yeli de enfermedad y dar grandes pasos en su cultivación.